Bound to the Alpha

Chapter 5

Fiona contuvo la respiración.

—No sé de qué me está hablando —tragó saliva mientras aquel soldado solo entraba.

—¿Cómo te sientes ahora? —Preguntó y ella pudo notar que no lo sabía.

Solo lo miro agitando su mano antes de susurrar:

—Mejor...

—Tenemos que partir hacia Dark feral ahora mismo —Fiona tampoco sabía por qué confiaba en este hombre. Pero cualquier cosa que pudiera alejarla de la capital era suficiente.

Permaneció en silencio cuando le dieron el alta en el hospital. David tenía un jeep que no tenía techo. No pudo evitar preguntarse de qué noticias hablaba. Era imposible que la estuviera ayudando después de enterarse de que era hija de Addison Walter. Entonces, ¿de qué se trataba esa noticia?

David se detuvo frente a una pequeña tienda en la carretera para comprarle un poco de zumo y una bolsita que tenía algo de comida. Fiona no le dio las gracias, pero aceptó el paquete. El guardia sonrió y se apresuró a iniciar la conversación.

—No habrá sitio para comprar comida. Es mejor que nos aprovisionemos...

—¿Adónde vamos? —preguntó Fiona.

—Conocí a tu ama. Ella no tiene problema si te llevo a casa de tu padre.

—¿Hablaste con Paula? —Fiona casi jadeó y se preguntó cómo podía estar viva.

—Sí, parece que tu ama lo está pasando bastante mal. Su compañera fue asesinada por... —Fiona tenía las manos apretadas alrededor de la bolsa y tenía los ojos llorosos.

Ella abandonó a Troy. ¿Cómo debe haberse sentido al enterarse de eso? Ella podía decir que Troy estaba devastado al darse cuenta de que Paula lo abandonó.

—Tu padre está muerto, Fiona —El guardia dijo y Fiona no pudo evitar el grito ahogado.

—¿Qué? —Fiona lo miró preguntándose si él conocía su identidad.

—Tu padre murió hace dos días. Parece que vino a buscarte tras la muerte de tu madre —Solo ahora Fiona se dio cuenta de que estaba hablando del padre de Sienna.

—¿Cómo... has averiguado quién es mi padre?

—Bueno, ya te he dicho que no hay mucha gente y ¿adivina qué? Hay aún menos con el pelo rubio. Y, entonces parece que el Sr. Phipps se enteró de la muerte de tu madre. Y, sólo te preseleccionó a ti.

Sienna no tenía el pelo rubio. Fiona sólo se preguntaba si la habían dado a la familia correcta o no. Pero no había forma de que pudiera opinar.

Pasaron dieciséis horas cuando David la dejó dormir en la parte trasera del jeep. Fiona sólo se despertó para ver salir el sol y volver a dormirse.

—Hey... —Ella se despertó con un golpe en la cabeza y se encontró con un tipo alto que parecía en su adolescencia de pie a sólo un metro del jeep.

Tenía unas cuantas piedras en las manos y estaba a punto de golpearla con la siguiente que Fiona intentó esquivar con un brazo sobre la cara—... despierta dormilona —Fiona miró a su alrededor para encontrar el jeep aparcado y preguntarse dónde estaba David.

—¿Quién es ella? —Una chica que parecía tener la misma edad que Fiona apareció por el lado de aquel tipo y preguntó. El chico adolescente no tardó en adivinarlo.

—Estoy seguro de que es una nueva criada. ¿No es demasiado guapa para ser una criada? —La niña cruzó los brazos sobre el pecho antes de negar con la cabeza.