IV

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Un fuerte apretón fue dado en su trasero. Auto seguido de aquello un fuerte sonido se escucho en todo el lugar dejando helados a dos alfas y a uno completamente congelado.

—¡¿Que diablos le pasa?!

Gruño Hades mientras observaba la rojiza marca que había dejado en el precioso rostro del alfa de venda. ¿¡Que demonios se creía?!.

—¡Usted no es nada mío, ni siquera lo conosco para que haya hecho algo así!

Grito en cólera, todos los malditos alfas eran iguales.

—¡¿Limpus acaso te volviste loco?! ¡No sabes con quien acabas de meterte! ¡¿Acaso buscas que te despida tonto omega?!

Grito asustado su supuesto jefe mientras miraba con pánico a sus contrarios.

—¡El no tiene ninguna potestad para tocar mi cuerpo como le plazca no soy una puta ni mucho menos un regalado!¡Se lo merece por ser tan mano suelta!

Otro gruñido salió de los resecos y maltratados labios del omega mientras intentaba con todo su ser no golpear aquel tonto alfa que tenía de superior.

—¡Cuidado como me hablas omega!

Grito en cólera su jefe, utilizando su voz de mando, cosa que solo hizo que Hades riera, bien justo ahora su paciencia se había escurrido por el caño.

—¡CUIDADO COMO ME HABLA USTED PEDAZO DE ALFA ASQUEROSO!

Grito sin inmutarse de la voz de mando usada en el por el alfa de cabellos matizados.

—¡Usted no tiene ningún derecho de tratarme así y mucho menos en usar su voz de mando conmigo!¡la cual le rectifico no funciona conmigo!

Río nuevamente antes de acercarse más al alfa tomándolo por su ropa y levantandolo, asombrado con creces al alfa japonés, mismo que miraba interesado toda al escena.

—Y para que lo sepa renuncio, no voy a seguir trabajando con un bastardo como usted, que acosa a omegas sin lazo o pareja, ya me arte de sus constantes maltratos laborales y sus burlas injustificadas, me arte de absolutamente todo, he aguantado lo suficiente como para no destrozarle el rostro estupido alfa asqueroso

Solto el cuerpo del hombre para luego dirigirse hacia el atrevido que le había manoseado, mismo que a los iris del peli plata seguía completamente aturdido.

—¡Y usted! Tenga cuidado donde ponga las manos si quiere manosear a alguien consigase una pareja o balla con una prostituta yo no soy ninguna e las dos, la próxima vez que lo intente va a perder su brazo, ya esta advertido

Y sin más salio del lugar, no son antes tomar su paga.

—Lo quiero . . .

Un susurro escapó de los labios del alfa de venda.

—¿Qin?

Pregunto el japonés un poco preocupado porque aquel golpe hubiese afectado algo en la cabeza de su amigo y socio.

—Quiero a ese chico como mi compañero y Luna

Agrego Qin mientras una sonrisa se asomaba en su rostro.

—¿Que?¿Qin estas seguro?creo que si ese joven vuelve a encontrarse contigo es capas de matarte por lo que le hiciste,¿de hecho porque lo hiciste en primer lugar?

Pregunto curioso y muy muy preocupado por la reciente amenaza, si bien sabía que su compañero era jodidamente fuerte y poderoso ese chico parecía tener una fuerza bestial y poco común.

—No se porque hize algo así, mi cuerpo se movió solo, y si, estoy completamente seguro, ese chico se convertirá en mi luna o dejo de llamarme a mi mismo el Emperador Qin Shi Huang

DOMINACYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora