Parte 1

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Hola, me llamo Kyle Broflovsky, eh sido abusado desde que soy niño, a mis padres no les importa lo que me pasa ya que su atención va para mi hermano menos Ike, eh sufrido abuso sexual en la calle y a pesar de mis denuncias nada sucede, la única persona que tengo a mi lado es mi mejor amigo Stan, él tiene una vida normal y es querido por sus padres y hermana, en cambio yo solo tengo que soportar los golpes y palabras hirientes de mis padres, no soy capaz de denunciarlos porque no me quiero ir del pueblo a un hogar y no volver a ver a mi amigo. Pero no sabía que después todo cambiaría en mi vida.

Lunes 12 de Marzo

- Hola Stan - dije caminando hacia la parada del autobús.

- Hola Ky....¡¿ese es un moretón?! - dijo notando una marca en mi rostro, se me había olvidado ocultarla.

- N-no se de que estás hablando - dije intentado cubrirlo con mi mano pero era muy tarde.

- Ay Kyle ahora que te hicieron - dijo poniendo un parche encima de aquel moretón, nadie de la escuela sabía sobre el maltrato en mi familia así que supongo que no se preocuparían.

- Me golpearon... Ike mintió sobre qué le hice algo pero no se qué - dije secando unas lágrimas que caían en mis mejillas.

- Realmente no soporto que te sigan golpeando, te juro que voy a ir y.... Ugh... - dijo suspirando, sabía que si a mi no me escuchaban a él menos lo escucharían.

- Solo tengo que esperar unos años e irme de esa casa - dije un poco cansado.

- Kyle, solo tenemos quince años, ¿quieres esperar tres años siendo maltratado y abusado? - dijo mirándome, el solo quería que me fuera de esa casa.

- No es fácil Stan, no puedo irme así como así, ¿y si me encuentran?, me iría peor de lo que me está yendo ahora - le dije intentando sacarle esas esperanzas pero él no se rendía.

- ¿Crees que les importaría que te fueras de esa casa?, creo que no lo notarían y si lo llegaran a notar no harían nada, después de todo tu hermano es la prioridad en esa casa - dijo enojado - Ya se, quédate en mi casa hasta que cumplamos los dieciocho, mis padres te acogerían como si fueras su hijo - dijo entusiasmado, realmente era ingenuo.

- No lo sé, a pesar que no les importe aún así no me dejarán irme de la casa, ¿qué pasa si voy a vivir a tu casa y tus padres terminas denunciados?, sería culpa mía - dije intentando hacerlo razonar pero fue en vano.

- Lo dudo, solo haz el intento y si te pasa algo malo intentaré salvarte del lío en el que te habré metido - dijo abrazándome, sus abrazos eran los únicos que me hacían sentir bien, eran los únicos abrazos reales que eh tenido en mi vida.

Al llegar el bus nos sentamos al final como de costumbre, él hablaba con sus amigos y yo miraba hacia la ventana, nunca quise hacer un contacto visual o hablar con ellos así que intentaba pensar en otra cosa.

- Oye Kyle, ¿por qué no saludas? - dijo Stan intentando que mirara hacia delante, no quise pero insistí y vi a dos chicos, uno tenía un gorro similar al de Stan pero era amarillo con celeste y el otro usaba su capucha naranja.

- Hola, ¿eres Kyle, no?, Stan habla mucho sobre ti, sobre tus notas y como aveces le salvas el promedio - dijo el chico de naranja.

- Si - dije en breve quitando la mirada hacia el suelo, estaba un poco incómodo.

- Soy Kenny, y el otro es Eric, un placer conocerte Kyle - dijo estrechando la mano hacia mi, accedí a tomarla pero la mano del otro nunca llegó.

- Eric no seas malo, salúdalo - dijo Stan.

La venganza (Cryle)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora