P A R A D I S E (Aidan y T/N)

No eras tú.

T/N Parker.

—Entonces le dije que quedaba detenido por tráfico de sustancias ilegales y ¡pum! Lo mandé a la cárcel junto al otro idiota que dañaba a mi sobrina —cuenta Luisa, mientras sigue siendo cargada por Aidan.

—Debió ser el mejor golpe que yo haya imaginado —dice Aidan, ingresando al departamento una vez que abro la puerta.

—Lo fue, me sentí poderosa —se ríe mi tía.

Me encargo de guiar a Aidan hasta la habitación de Luisa, necesito que ella dejé de parlotear cosas del pasado porque en su estado no mide las consecuencias de hablar.

—Tía, deberías callarte un momento —le pido, mientras destiendo su cama con rapidez.

—¿Por qué? Si a Aidan le encanta oír mis historias, ¿verdad, cielo? —le pregunta y el ojiverde asiente —. ¿Lo ves? Ay, linda. Sin duda prefiero a tu noviecito que al idiota de tu ex Matt.

Me quedo estática ante el comentario de Luisa, alzo la mirada lentamente notando como la pequeña sonrisa de Aidan comienza a vacilar.

—¿Matt? —repite su nombre en tono de pregunta.

Le indico que dejé a mi tía en su cama, intento jalarlo fuera de la habitación, pero Luisa es más rápida al hablar.

—Su ex novio de la universidad, se creía el chico más apuesto y era un completo tonto —dice Luisa, acomodándose en la cama —. El año que él y T/N duraron se me hizo una tortura.

Aidan me observa y yo solo le doy una sonrisa tímida, veo como Luisa comienza a quedarse dormida y celebro mentalmente. Vuelvo a jalar a Aidan fuera de la habitación, los dos nos encaminamos a la pequeña sala y yo me masajeo el cuello.

—¿Quieres un poco de agua? Cargar a Luisa debió dejarte sediento —me dirijo a la cocina con el castaño siguiéndome —. ¿O prefieres un poco de jugo?

—¿Quién era Matt realmente? —pregunta.

Quisiera poder fingir que no oí su pregunta y hacerme la loca, pero mi mirada le indica que lo he oído perfectamente y que me siento nerviosa por dar una respuesta. No me apetece hablar de mi ex de la universidad con el chico que quiero.

—Él... fue un chico con el que salí en la universidad —respondo —. S-solo duró un año la relación.

Me convenzo a mí misma de que esa respuesta debe ser suficiente, pero tal parece que para Aidan es poca información.

—¿Te gustaba mucho?

Me muerdo el labio en un gesto nervioso, mientras observo el rostro serio de Aidan, no entiendo su actitud. Parece molestarle el hecho de poder creer que Matt me gustaba mucho, pero aún así sigue preguntando por él.

Eres lenta para captar las cosas.

Me recrimina mi consciencia y yo no la entiendo.

Es más que obvio que se siente celoso.

¿Celoso de un ex amor de universidad? No puedo ni siquiera imaginarlo.

—La verdad no lo sé, creo que solamente accedí a una relación con él porque llegué a sentir una pequeña atracción —digo con sinceridad.

No es que sintiera todo el amor del mundo por Matt, muchas veces llegué a pensar que jamás hubo esa conexión de pareja y que no me importaba si la relación terminaba o no. Cuando estaba con él, esperaba sentir lo mismo que sentí estando con Aidan, pero jamás surgió y me sentía mal cada vez que lo comparaba con el ojiverde sin que él lo supiera.