P A R A D I S E (Aidan y T/N)

Fingir Un Poco Más.

T/N Parker.

Limpio mi parte del mostrador, mientras que Blake termina de atender a los clientes que acaban de llegar. Es medio día y el lugar está un poco lleno, podría asegurar que vendrán más personas a lo largo del día.

—Te ves más tranquila —dice Blake, mirándome.

—Algo así, ayer pude hablar con Aidan —informo.

—¡¿Te arriesgaste a verlo?! Ese chico si que no entiende la gravedad del asunto y te llama para verse —bufa.

Dejo el trapo por un lado.

—Yo lo llamé.

—¿Por qué? Alguien pudo haberlos visto y difundir tu identidad.

—Me encargué de que nadie nos viera, él fue a mi departamento —me recargo en el mostrador —. Quería saber cómo estaba, puedo imaginar lo terrible que es para él todo esto.

Blake me mira como si no creyera lo que estoy diciendo.

—Me sorprende que te preocupes más por él que por ti —niega —. Es tu identidad la que está en juego.

Lo sé y siento miedo, pero también sé que en algún momento saldrá a la luz quien soy, porque si Aidan informa que ha terminado con Madd y después descubren algo entre los dos, mostrarán fotos con mi cara, mi único consuelo es que al menos no me tacharán de entrometida.

—No hay nada que pueda hacer ahora, solo esperar.

Blake suspira y se gira para atender a los clientes que llegan. Veo a una chica entrar a la cafetería y me preparo para atenderla.

—Moonlight' coffee, ¿qué desea ordenar? —pregunto.

La chica se me queda viendo, lo cual me pone un poco nerviosa. Disimuladamente reparo su aspecto, trae un enorme abrigo que debe ser más grande que su talla, una bufanda junto a un sombrero. Su cabello rojo cae por sus hombros, mientras que ajusta sus lentes negros.

—Vaya, él te describe bonita, pero veo que eso no te hace justicia —comienza a decir —. Eres más hermosa en persona.

Arrugo mis cejas por sus palabras.

—¿Nos conocemos?

Ella baja un poco sus lentes.

—Soy Madd —dice en voz baja.

Yo cubro mi boca para ahogar un grito de la sorpresa. Ella me hace una seña para que no haga ningún ruido y después se ríe.

—Dios mío, no te reconocí con ese disfraz —admito.

Madd mira su aspecto.

—Quería ocultarme, pero creo que llamo la atención al hacer creer que soy algo extravagante —sonríe —. Sé que no debía, pero no pude aguantarme las ganas de conocerte.

Le doy una sonrisa, siempre quise conocer a Madd y ahora tengo la oportunidad.

—Lamento lo que está pasando, yo prometo que voy a solucionarlo —afirma.

—Descuida, los que me preocupan son tú y Aidan.

—Deja de hacerlo, aquí la que importa eres tú —me reprocha y yo me rio.

Estoy a punto de hablar, pero alguien se me adelanta.

—¿Y ella quién es, T/N? —pregunta Blake —. Llevan rato charlando y no pide nada.

Madd mira a mi amigo, sus ojos fijos en él y puedo notar un cambio en su semblante, uno como si se hubiera quedado hechizada. Una pequeña sonrisa se le dibuja en la cara y noto como se cohibe un poco ante la mirada curiosa de mi amigo.