My future life

Capítulo 11

Me desperté sudando y jadeando.

¿Qué había pasado?

¿De verdad tenia que volver?
No quería irme aún. Se que algún día tendría que irme pero no estaba preparado, no me sentía listo para regresar, no quiero separarme de Nu.

El sonido de la puerta me hizo salir de mis pensamientos.

*Knock knock*

-¡Voooyyy! -grite

Me pare y abrí rápidamente.

-Hiaaaa~ Estoy aquí - Nu salto sobre mi, sorprendiendome bastante.

Por ese maldito sueño había olvidado que hoy llegaría mi Nunew.

-Perdón, me tarde en abrir porque estaba dormido. ¿Cómo te la pasaste con tus papás? - espero su respuesta pero nunca llego.

Lo separe un poco de mi cuerpo para poder ver su carita.

-¿Paso algo cariño? ¿Por que no respondes? - seguí su mirada.

Joder, olvide por completo qué había dormido solo en bóxers, tuve suerte qué fuera Nu el que estuviera tocando o habría corrido peligro si era un vecino.

-¿Por que estas desnudo? - Se veía muy enojado.

-Puedo explicarlo, ayer llegue cansado, me quite todo y caí rendido. - no se veía totalmente convencido.

-Entiendo eso pero, ¿Por que no te pusiste algo para abrir? ¿Y si alguien más te viera? sabes bien que hay mucha gente aquí qué se muere por ti, podrían aprovechar y, y....

No deje que continuará y lo calle con un beso.

-Y nada, jamás dejaría que alguien más me tocará, soy solo tuyo. Perdón, como te digo, estaba dormido y no me acorde que estaba así, prometo ya no hacerlo, así que deja de fruncir tu ceño, o tendrás arrugitas.

Señale en medio de sus cejas y masajee suavemente tratando de calmarlo.

-Bien, pero por otro lado, tuve una bienvenida de lo más ardiente. Un sexy hombre, recibiendome casi desnudo, es una bendición. - salto encima mío para que lo cargará - te extrañe.

-Yo más pequeño - deje mucho besos por toda su cara.

De verdad lo extrañaría, sus besos, esos labios tan suaves y pomposos, siempre cubiertos de brillo labial, haciéndolos ver el triple de exquisitos.
Sus ojitos, esos ojitos qué cuando me miraban dejaban ver todo el amor que me tenía, qué cada que sonreía se achinaban como medias lunas.
Sus cachetitos, tan suaves y rositas, tan llenitos qué daban ganas de morderlos.
Su olor, como lograría sobrevivir sin olerlo cerca, esa aroma fresco y dulce, como a cerezas y fresas, extrañaría bastante tener su olor impregnando en cada una de mis prendas.
Su cabello, tan suave y lacio.
Sus piernas, tan delgadas y llenitas al mismo tiempo, era horrible tener que pensar que tendrían que borrar el recuerdo de sus piernas enganchadas a mi cadera.
Su pecho, tan suave, y que adornaba unos lindos pezones qué lo hacían retorcerse de placer con un simple toque.
Su cintura, joder, era tan diminuta y atractiva, ni siquiera sabía si era posible poder vivir sin tener mis manos pegadas a el todo el tiempo.
Su trasero, odiaba tener que olvidarlo, era tan bonito y sexy, tan blando qué era inevitable no estrujarlo en mis manos.
Y por último, su personalidad, el era una persona tan dulce, bondadoso, gentil, respetuoso, amoroso, juguetón, lindo, tan puro, en pocas palabras, tan PERFECTO.

Jamás había conocido a alguien igual, el era una edición limitada.
Era triste tener que despedirme y regresar a mi tiempo pero, también estaba emocionado porque, podría conocerte en "Mi vida futura" .