Tenoch Huerta ___ One Shots

La candidata [Tenoch Huerta]

Paula Melendez Galicia estaba dando su discurso final en el Estadio municipal de su estado de origen.

--Aquí cóndor 1.--Tenoch miro al rededor las personas en su mayoría mujeres aplaudieron a lo que la morena decía.--Dime que tienes cóndor 2.-- la línea parecía estar muerta.--Cóndor 2 verifica ubicación.

Nada. Algo iva mal Agustín siempre contestaba y fue ahí que vio el lacer rojo apuntando al pecho de Paula.

--Las mujeres somos capaces de llevar esta nación no a la cima, no a la altura de las superpotencias pero si por un camino que nos veneficie. No más hermanas muertas, no más hermanas desaparecidas. No más violencia contra las mujeres que sacan adelante esta nación.

Tenoch corrió y se abalanzó sobre ella el sonido de un disparo se escucho enseguida, la multitud corrió dispersa. La prensa al contrario se acercó a ver aquello.

--Tenoch. --Paula le tocó para moverlo.--Tenoch háblame...

El moreno no se movió.

--Esta bien...

--Señorita.

--No se queden ahí traigan una ambulancia.--Paula tomo a Tenoch en su regazo y con su saco hizo presión para evitar que se desangrara. La bala le había dado cerca de la columna.--Aguanta hermano, la ayuda viene en camino.

--Agustín...

--Busquen a Agustín ya.

--Le dije que la protegería.

--No hables.

--Será una gran Presidenta por eso la quieren eliminar.

Los parámedicos no tardaron en llegar y estabilizarlo. Paula se fue con el en la ambulancia apesar de que su equipo se lo prohibió.

--Tiene un pulmón perforado.

--Presión en picada.

--Prepara adrenalina y desfibrilador.

--No te atrevas a morir Tenoch Huerta Mejía. Me escuchas, tenemos un país que dirigir.

Paula vio como le daban descargas a su amigo y guardaespaldas.

--Lo tenemos de nuevo.

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Tenoch despertó, miró a su alrededor y vio la habitación más blanca que pudieron hacer. Estaba conectado a un aparato que emitía un molesto pitido y en su brazo izquierdo una manguera se conectaba a una bolsa de suero que colgaba del techo.

Asu derecha se encontraba Esther su hija mayor.

--Pa...pa estas bien.

--Igual que un domingo por la mañana.

La adolescente se levantó y lo abrazo.

--Y tu hermana?

--Gloria esta afuera con la señorita Paula. Les diré que despertaste y al doctor.

La chica salió y enseguida entró la candidata y la niña.

--Papi.

--Hola.--dijo tomando la mano de su hija.

--Es bueno verte Tenoch.

--Lo mismo digo.

--El doctor vendrá enseguida.

--Gracias.

--Gracias a ti estoy aquí.

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Poco después de las elecciones presidenciales el culpable de aquel horrible atentado salió a la luz. Su otro jefe de seguridad la había vendido a cambio de unos cuantos millones y al no cumplir su objetivo lo habían amenazado por lo que en un intento desesperado de salvar su cuello se entregó y con el a los que lo habían mandado.

Apesar de sus intentos de alejarla los resultados fueron otros pues Paula ganó con más del 60% de votantes a su favor.

El país necesitaba de un cambio y ella se lo daría, ella y su nuevo jefe de seguridad. Aquel que había confiado en ella y ella en él.