Deja que salga la luna (Parte 2)

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Febrero 1911

Al grito de "Sufragio efectivo no reelección." Se levantó el pueblo en nombre de la democracia.

Escuché de ello en Francia. Me había establecido ahí hace unos años. Y al leer los periódicos comprendi que debía volver.

Él estaría ahí.

Tenoch y yo nos separamos hace cincuenta años. Nuestras ideologías no eran las mismas.
El quería ayudar a los demás,no sólo matando a lo más bajo. El quería cambiar el rumbo de la nación. Matando a figuras importantes dentro de la politica del país. Yo sólo quería una vida tranquila,lejos de lo que una vez me hizo daño.

---Escuché que vuelves a tu país.--Gustaf era un hombre increíble,me ofreció asilo cuándo me vio comer ratas de una alcantarilla, él era unas décadas mayor que yo.

--Debo hacerlo. Tengo que hablar con él.--le contesté preparando mi baúl.

--Volverás algun día?

--Te prometo que te buscaré.

--Buen viaje.--Dijo abrazandome.

Tome mis cosas y salí de la finca.
Zarpe en el primer barco que se dirigía a América.

Cuando toque tierra supe que no había vuelta atrás.

Lo rastre de frontera a frontera. Entre campos militares y campamentos rebeldes hasta que di con él .

--Dos guerras en cien años. Quien lo diría?--le dije al verlo de espaldas sentado sobre una piedra al filo de la barranca.

--_________!!!--dijo sonriendo y se levantó a mi encuentro.

--Para tener ciento treinta y cinco años no te ves nada mal.

--Pensé que nunca volvería a verte después de la última vez.

--Me enteré de la revuelta.

--Supongo que querías ver que no interfiera.

--A cuantos has matado?

--Eso no se pregunta.

--Me refiero a influyentes.

--Sólo tres.

--Y en esta guerra?

--A ninguno. Creo que entendí tu punto. Yo no soy nadie para manipularlos. Deje de ser humano hace mucho tiempo.

--Entonces que haces aquí?

--Darles apoyo...terminar con los heridos. Y uno que otro bandido.

--Los transformas.

--No. Si algo aprendí de ti fue a no compartir nuestro don con cualquiera.

--Ven conmigo.--le dije tomando sus manos.

--No puedo. Ellos me necesitan.

--No es verdad. Ellos no necesitan de nosotros. Vámonos tomemos un tren en la mañana y haber donde nos lleva.

--Soy lo único que evita que bandas de criminales les quiten lo poco que tienen.

--Entonces me quedaré contigo.--el tomo mi cara entre sus manos.

-Sigues tan hermosa.

--Y tú tan apuesto.

Se acercó y medio un beso.--Te prometo que será la última.

Evitamos tantas masacres esos años,el tenía razón. En esta guerra había tres bandos. Ricos,pobres y ladrones.

Hablamos con Zapata en el sur y con Villa en el norte.

Estuvimos presentes cuando se firmó la Constitución oficial de la República.

Y después de eso la gripe española invadió a medio mundo.

Seguida de una gran guerra en Europa.

Tenoch y yo nos mudamos al sur en Argentina y más tarde nos mudamos a Hawaii. Y fue ahí donde por fin nos casamos. Nunca olvidariamos ese horrible día.

Los japoneses atacaron Pearl Harbor y después Estados Unidos entraría a la guerra. Y nosotros también.

Ayudamos como podíamos en labores de rescate.

Y después vimos como el hombre construía su propia muerte: el armamento nuclear.

Volvimos a América en 1950, pero las crisis y el comienzo de la guerra fría nos hizo dejar Estados Unidos y volver a nuestro País en 1976.

Y cambiamos de lugar cada cierto tiempo.

--Perdón por llegar tarde.--Tenoch se disculpa al entrar.

--Descuida...--le doy un beso en los labios.--Estaba contando nuestra historia.

--Continúa...

--Donde estaba a sí... nos mudamos cada cierto tiempo. Para no levantar sospechas.

Olvide decirte que esta no era una historia de amor juvenil con vampiros blancos y lobos musculosos. Nuestra historia además de ser una de las más antiguas también es...como dicen ahora tóxica. Peleamos por todo y nos separamos por años, sin embargo él no podría estar sin mi ni yo sin él. El mundo a cambiado,las personas con él. Y nuestro propósito se vio afectado por ello. Ahora hay más personas malas,para no aburrirte con cada término específico.
Asi que a veces,  sólo un par de veces cada década al reunirnos nuevamente nos complace comer a un par de enamorados como ustedes.--digo pasando mi dedo por el cuello del chico que asustado miraba a su novio en brazos de Tenoch --Que mejor que morir enamorado.

--Buen provecho...--Tenoch me mira antes de clavar sus dientes en el cuello del muchacho.

-Deja que salga la luna...--dice mirándome la sangre del chico le escurre por los labios.

--Deja que se meta el sol...--Deje caer a mi chico y corrí a sus brazos.--Te extrañe...--el sonríe y me besa.

200 años han pasado y no me cansaré de besar esos labios jamás.




Nota:

Actualización fuera de lugar.
Pero wey es cumpleaños de Tenoch así que a festejar.

Tenoch Huerta ___ One Shots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora