Tenoch Huerta ___ One Shots

Una Historia de Amor. (Namor)

Nota: La siguiente historia está basada en la pelicula: La forma del agua.

🌊

🌊

🌊

🌊

🌊

Te dolía verlo encerrado y encadenado en ese horrible tanque.

Así que hiciste lo más arriesgado y estúpido: liberar al mutante de su prisión.

--Te voy a sacar.

--Cómo?

--Te sacaré en la basura.

--Y estas cadenas. Si pongo un pie fuera del tanque me queman.

--Robare las llaves del collar y después tu harás el resto.

--Te estaré eternamente agradecido.

--Te veré mañana.--Te despediste de él a través del vidrio.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Causaste un apagón de cinco minutos para distraer a los guardias y adentrarte en la cámara. Liberaste a Namor del collar inhibidor y después el arrancó las cadenas que lo apresaban.

Lo metiste a uno de los botes de basura y lo llevaste a la parte de atrás donde Theo lo llevaría en el camión a tu casa.

Viste partir el camión y sonar las alarmas que indicaban que el Rey del mar había escapado. Fingiste correr y ordenaste a todos que se quedarán en su lugar hasta que Oliver el líder de seguridad llegó.

En pocas palabras Oliver entrevistó a todos y llegó a la conclusión de que tal vez alguno dé los países rivales lo habían capturado al conocer de sus poderes.

Llegada la mañana Oliver los dejo salir no sin antes advertir que si llegaba a saber quien había liberado al fenómeno se las iva a ver muy mal.

Te mantuviste lo más serena posible hasta llegar a tu casa. Donde Theo te esperaba asustado.

Namor estaba demasiado caliente y sudaba mucho.

Le pediste a Theo que te ayudará a llevarlo a la bañera y lo dejaron ahí hasta que abrió los ojos.

Le pagaste a Theo por su ayuda y lo despediste en la puerta, advirtiendo de las investigaciones que se llevarían a cabo.

--Como te sientes?

--Mejor.

--Te prometo que buscaré la forma de regresarte al mar.--le dijiste tocando su frente para comprobar que no tuviera fiebre.--Tienes hambre?

--Si.

--Pediré una despensa completa. Y Te pediré ropa.

--No es necesario.

--No puedo tenerte en ropa interior todo el tiempo.

-De donde vengo no usamos más que Lo necesario para movernos.

--Un par de bermudas te vendrán bien.
Te dejo para que descanses en cuanto llegue la comida te hablo.

--Por que haces todo esto?--Namor te tomo de la mano y no te soltó.

--Tu sabes por que.--el soltó tu mano y te vio salir.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Lo más difícil de vivir con el Rey del mar no era que estuviera mojado la mayor parte del tiempo, o que la comida no le gustará del todo. Lo más difícil de vivir con el era tener que verlo a diario y saber que no sentía lo más mínimo por ti.