Parte 9

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La luz atraviesa la ventana siento que me quema, su mano en mi cintura, la noche se hizo larga pero yo quería que fuera eterna, mirar a Crowley dormido es una tortura, me ama enserio y yo le ilusiono de tal manera que yo igual me lo creo.
En pocas horas estaré en el altar tomando su mano y declarando ante Dios una mentira, yo... Le quiero Crowley, más de...
Me separo y me siento, acaricio mi frente para distraerme de mis pensamientos. Veo como aún sigue dormido, así que me paro y camino por el alrededor, me cambio y me arreglo, me voy a preparar un café hasta que escucho la puerta, frunzo el ceño -es muy temprano- digo bajo, miro el reloj de mesa que marcaba las seis am, intento arreglar mi pelo y abro la puerta, el olor demoníaco hace que frunza el ceño, Hastur y Belzebu estaban con cajas en sus manos. -Buenos días- digo fingiendo tranquilidad.

-Buscamos a Crowley ángel- dice Hastur, lo último lo dijo con un tono despectivo, yo sonrió falsamente.

-Me lo imaginé, pero me temo que mi... Él está dormido en esté precisó instante, así que si desean...- intentó cerrar la puerta.

-Le venimos a salvar- yo abro los ojos -debe estar abrumado de tanto ángel ángel boda boda- Se burla, yo ruedo los ojos.

-Entren si quieren da igual- bufo y les dejo entrar, -¿Me podrían decir qué es lo que llevan allí?- Señaló a la caja.

-Cosas de demonios- aclara Belzebu yo asiento.

-Pueden dejar las cajas allí entonces- señaló el suelo, van y la apoyan, -¿Les puedo ofrecer algo mientras esperan?- Me miran indiferente -o no- finjo una risa -le iré a despertar así hablan... Ya vengo- me apresuro al cuarto, exhalo pesadamente, llego hacia él que sigue aún acostado y le toco el hombro. -Crowley, vinieron a buscarte Hastur y Belzebu- este abre sus ojos perezosamente -te necesito, no sé que decirles o hacer, no soy buen anfitrión- digo bajo, me sonríe y niega.

-Si lo eres, ahí me levanto- se estira, yo asiento -déjamelo a mi- se sienta, -pero antes- nos miramos -buenos días- se acerca y yo le doy un corto pero suave beso. Se levanta y yo le sigo.
-¡Mis padrinos que sorpresa que estén aquí tan temprano!- Les dice alegre, ellos no se ven igual.

-Tampoco es que hayamos querido- espeta Hastur, -teníamos que traerte las cosas y acompañarte como dijiste- yo miro la situación y la tensión que hay en en aire, lo que me espera esta noche.

-Bueno espero que me disculpen pero me retiraré así hablan tranquilo- digo, solo Crowley me dirige la mirada y me asiente.

-Vengan así les doy whisky- los demonios se movieron rápido y salieron de la entrada, dejándome solo, camino hacia la salida hasta que visualizo las cajas, respiro agitado pero las tentaciones nunca fueron mi fuerte, miro a los costados cerciorando que no haya nadie viendo, me siento y con sumo cuidado la abro, exhalo y me muerdo el labio aguantándome, era su traje. Era blanco, hermoso tenía una rosa, combinaba perfecto como el mío, es como si hubiéramos decidido como vestirnos, una lágrima traicionera aparece, me la secó rápido. La culpa me carcome, mi labio empieza a temblar, rápido guardo la prenda y salgo de la librería que me estaba sofocando, me pido un taxi directo al lugar... En el que me casaré, ni siquiera tengo apetito, esto no me pasaba nunca, solo antes del dos mil cuando probé mi primer alimento.
Pongo mi cabeza en el vidrio, estoy asustado, de que todo salga mal e igual lo estoy de que todo salga bien. Me siento un cobarde. Al llegar veo a mucha gente del catering acomodando cosas, terminando de acomodar, todos me felicitan, el patio está más decorado, el altar está rodeado de rosas rojas y amarillas, y una tela blanca de un lado y negra del otro que en el centro que mezclan y crean un moño gris, camino nostálgico hasta allí, los recuerdo de aquella charla en el 1941 vinieron, sonrió a aquel moño y lo que representa para mi el gris.

-Es muy bello todo- me sobresalto y me doy la vuelta, Gabriel estaba parado con otro traje atrás mío, yo doy un paso asustado.

-No me lleves al cielo- digo asustado, me toco las manos y me las aprieto intentando controlar mi ansiedad.

-No vine por eso Aziraphale- me dice.

-¿Entonces? ¿Por qué has venido?- el pestañea repetidas veces -¿Cómo sabias que será aquí?-.

-Uno de tus invitados me dijo- yo aprieto mis labios -quisiera disculparme- yo abro mis ojos, -ahora veo las cosas de otro modo, y me arrepiento que hayas tenido que caer para verlo- mis labios tiemblan.

-¿Cómo caer?, Yo sigo siendo un ángel- digo exhalado.

-¿No te diste cuenta?- Inhalo -no puedes hacer bendiciones- niego sin entender, chasqueo los dedos para hacer aparecer luz y nada ocurre -tus alas seguirán pero como recuerdo de tu... Traición- siento un mareo confuso y toco mi cabeza -lo siento- yo intento controlarme, miro al alrededor y veo ese moño gris, el recuerdo de aquella noche me hizo tranquilizarme un poco. -Ahora te entiendo y creo que será una hermosa boda- le vuelvo a mirar -creo que es correcto lo que están por hacer- señala el altar -el final de la guerra- trago y me alejo sin decirle nada, intentando controlar mis emociones, camino rápido hasta chocar con Anathema, la abrazo sin pensar. Ella me llevo al cuarto donde me desahogue hasta quedarme sin lágrimas, ella me escucho sin decirme nada.

-Ya es en una hora- me recuerda yo aprieto mi traje -lo arrugarás- me regaña mientras lo acomoda, -¿Cómo te sientes?- Me pregunta afligida.

-Si te soy sincero no lo sé- me siento en la mesita en frente al espejo y me arreglo el pelo, veo mi mirada algo pérdida.

-Aun tienes tiempo de detener esto, antes que sea muy tarde y te arrepientas- yo le miro en el refregó y niego.

-Ya es tarde- ella bufa.

-¡No, claro qué no!- Dice enojada -al menos dile la verdad- yo desvío la mirada -¿aunque sea lo amás?- Me da escalofríos, pero no digo nada hasta que ella da una patada fuerte al suelo.

-No lo sé, siento afecto creo que si, con él todo es mejor- me paro hacia ella -pero no cambia nada, esta boda se realizará y Crowley no se enterará- Anathema bufa -¿Qué esperabas que le dijera?, ¿Cómo esperas que le diga qué la propuesta fue una mala interpretación suya?- No me dice nada, -no quisiera lastimarle- me doy la vuelta, busco mi rosa amarilla -¿Y la rosa?- Le pregunto.

-Esta en el baño- yo asiento.

-Dale, gracias- camino y abro la puerta para ir al baño del pasillo pero me quedo helado con Crowley parado en del otro lado, tenía una mirada asustada y muy aturdida. -Cro-ly- intentó llamarle, intento dar un paso pero el retrocede -mi amor no sé qué escuchaste- sus lagrimas empiezan a caer. Tenía un lindo ramo de tulipanes que suelta sin importancia haciendo que caiga al suelo.

-Soy un idiota- dice con la voz cortada mientras se da la vuelta y empieza a bajar las escaleras, mi corazón se acelera por miedo a perderlo.

-¡Crowley no, espérame!- salgo ni bien puedo a buscarle.

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Mañana nuevo cap ✨
Quedan entre 2/3 capítulos <3
Gracias por la espera

Casados por error  &quot;Good Omens&quot; (Libro en formato físico disponible)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora