MOUNT HELENA

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15 años antes

Los coches de los padres de las alumnas no paraban de llegar para llevarse a sus hijas para las vacaciones de primavera. Las alumnas del centro, cargadas con maletas y bolsas de viaje, salían entusiasmadas del centro y entraban a los coches para irse lejos de allí unos días. A algunas las habían ido a recoger sus padres en persona, teniendo así un emotivo encuentro antes de subirse a los coches, aunque a la mayoría sus padres habían enviado a su chófer a buscarlas.

Ajena a todo esto, una Lena de 16 años, vestida con el uniforme del colegio, se encontraba sentada en un banco haciendo dibujos en un cuaderno. Una chica de rasgos asiáticos cargada con una maleta se le acercó.

– ¿Qué pasa, Lena? ¿Tus familia tampoco te lleva de vacaciones este año? –dijo como mofándose.

Lena ni tan siquiera la miró ni dejó de dibujar mientras contestaba.

– Al menos, estaré una semana sin verte, Veronica.

Veronica Sinclair sonrió maliciosamente antes de continuar.

– Te vas a aburrir mucho aquí tú sola. Sabes que puedes venirte de vacaciones conmigo. A mi familia no le importe que invite a alguna amiga.

– Cuando veas a alguna amiga tuya por aquí, propónselo –respondió Lena con sarcasmo.

Veronica soltó unas pequeñas carcajadas antes de continuar.

– Aún estás invitada –su sonrisa se volvió más perversa –. Este año te iba a gustar, vamos de vacaciones a un lugar donde hay playas nudistas...

– No me van las playas nudistas. Los bañadores y los bikinis dejan más a la imaginación –volvió a responder Lena con sarcasmo.

Veronica volvió a reír.

– Siempre haciéndote la estrecha. Pero, si quieres pasar otro año más  las vacaciones de primavera aquí sola, allá tú.

– Mejor sola que mal acompañada.

Veronica soltó unas carcajadas por tercera vez.

– Tú siempre haciéndote de rogar –se inclinó más hacia ella y puso una voz más sensual –. Con la fácil que hubiera sido si nos hubiéramos llevado bien desde el principio...

Tras decir esto, le colocó una mano sobre uno de los hombros de Lena, a quién le hirvió la sangre al sentirla. Pero, tuvo que contener su rabia. Por mucho que le hubiera gustado sacudirse de encima a esa pesada, no podía montar un escándalo delante de los profesores y los padres de algunas alumnas. Si iba a pasar las vacaciones en aquel lugar, al menos, que no lo hiciera castigada.

Alzó su malhumorado rostro hacia Veronica para decirle que le quitara su pezuña de encima, pero no tuvo oportunidad de hacerlo.

– ¿Por qué no la dejas en paz de una vez?

Tanto Veronica como Lena miraron a la chica argentina de 16 años que se aproximaba al lugar mirando a Veronica con cara de pocos amigos. Veronica se puso ante ella con los brazos en jarras y una sonrisa de superioridad.

– Vaya, vaya... La chica nueva es toda una heroína... ¿Qué esperas? Si esperas que ella te lo "agradezca" cuando estéis en la intimidad, vas lista.

En esos momentos, el chófer del coche que había ido a recoger a Veronica la llamó diciéndole que tenían que irse ya.

– Te salvó la campana, zorra. Pero, te lo advierto, yo ya le eché el ojo a ella primero –señaló a Lena –, mucho antes que tú llegaras aquí. Si quieres tu propia putita, tienes un montón para elegir entre las chicas de primer año. De ella, mejor olvídate.

TOMB RAIDERS (Rojascorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora