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♡Capítulo 14♡

Darién llegó a la casa, se sentía agotado emocionalmente, tenía que hablar con su rubia, no podía perderla sin siquiera haberlo tenido

Entró y se encontró con Neherenia en el salón, lo que menos quería era tener un enfrentamiento en ese momento, intento seguir de largo pero no pudo 

-¿No pensas preguntar cómo estoy?- recriminó Neherenia apenas verlo 

Estaba enfurecida, nada salió cómo ella quería, ahora estaba más qué convencida que Darién ya no quería saber nada más con su matrimonio, pero iba a averiguar sí había alguien más, y sí era así se iba a encargar de destruirla

-Ahora no Neherenia, tuve un día muy intenso- pidió Darién

-Claro, el señor esta cansado, tan cansado qué no tiene ni el menor interés de ver cómo sigue su esposa- dijo furiosa

-No pienso seguirte el juego, eso sí, te recuerdo que sí sigo acá, es por que me lo pediste, y tambien te deje bien claro que era hasta que te recuperarás- aclaró Darién 

Neherenia se asombro, pero no lo demostró, era mejor no seguir con los reclamos

-¿Y Serena?- decidió preguntar para cambiar de tema 

Darién se dio vuelta para volver a mirarla, estaba seguro que Serena había ido directo a la casa 

¿Dónde estaría?

-No sé, se fue antes de la clínica- respondió sin mostrar interés 

-Seguro se fue a lo de alguna amiga- respondió Neherenia 

Darién no contestó, subió a su habitación, aunque frente a Neherenia demostró desinterés, por dentro se sentía inquieto 

Neherenia vio cómo el pelinegro subía las escaleras, pensaba en como habían llegado a estar así

Estaba tan abstraída que no sintió que le hablaban

-Neherenia…-

Setsuna había entrado aprovechando un descuido de la empleada, justo escuchó lo último que dijo Darién, sonrió

-Neherenia…- la volvió a llamar 

Neherenia miró a su amiga sorprendida

-¿Setsuna? ¿ Cómo entraste?-

-Me abrió la empleada - Mintió 

Neherenia suspiró, agradecida que su amiga llegara justo en ese momento

-Setsuna necesito saber si pudiste averiguar si hay alguna mujer en la clínica-

Setsuna esa tarde se había dado cuenta de la mirada de Darién cuando Serena los había visto, se iba a aprovechar de eso

-¿Esta tu hija?- preguntó Setsuna

-No, ¿pero que tiene que ver ella con lo que te pregunte?- dijo Neherenia desconcertada

-No se como decirte esto, pero tú hija no lo mira como su padrastro-  

-¿Por que lo decís?-

-Nehe espero estar equivocada, pero una mujer sabe cuándo otra mira a un hombre con amor, y te puedo decir que Serena lo mira así-

Neherenia no podía creer lo que estaba escuchando ¿ su hija estaba enamorada de Darién?

¿Ese podría ser el motivo del distanciamiento de su marido?

No, era una locura, seguro Setsuna se equivocaba 

-No puede ser Setsuna, es mí hija, y aunque no la crié yo, se que Apolo hizo un buen trabajo con ella- dijo negando con la cabeza

Setsuna la miraba atenta, pudo ver que tenía duda, eso era bueno

Por ahora no iba a insistir, pero iba a utilizarlo y así matar dos pájaros de un tiro 

Quería a madre e hija fuera de la vida del pelinegro 

-Tenes razón amiga, seguro la malinterprete,  igual voy a seguir intentando averiguar algo- dijo Setsuna fingiendo arrepentimiento

Siguieron hablando, mientras en el piso de arriba en una de las habitaciones de invitados, estaba un Darién guardando toda su ropa en una maleta 

En todo el tiempo que estuvo encerrado no dejo de llamar a Serena sin éxito, eso lo estaba volviendo loco

Aparte el enfrentamiento que había tenido con Neherenia lo ayudó a decidirse, ya era hora que se fuera de ahi

Se había dado cuenta que Neherenia tenía la esperanza que las cosas volvieran a como estaban antes

Ahora entendía que casarse con ella había sido un error 

¿Pero quién iba a imaginar que encontraría a la mujer que lo volviera loco de amor?

Una vez que terminó de guardar todo, salió de la habitación

En la sala se volvió a encontrar con Neherenia, y vaya sorpresa se llevó a ver a Setsuna 

Las dos giraron al sentir su presencia 

-¿Que significa esto Darién?- preguntó Neherenia angustiada

Setsuna miraba disfrutando de ese momento 

-Lo que tenía que haber hecho hace tiempo- respondió ignorando a Setsuna 

-Darién, amor… se que no tenía por que reclamarte nada, perdóname por favor- suplico Neherenia 

-No Nehe, este matrimonio fue un error desde el principio-

-¡Seguro tenes otra mujer y por eso me estás dejando!- dijo furiosa 

-No sé qué vino a decirte tú amiga, pero te doy un consejo, no confíes en ella- 

Setsuna iba hablar, pero prefiero callar

-Prometiste estar conmigo hasta qué me recupere- Neherenia estaba usando su último recurso 

-Lo siento- dijo Darién y salió de ahi

Ahora sólo tenía que encontrar a Serena, aclarar lo que vio y conquistarla