Todo por culpa de esa app Mikey y tú

Cap 2

POV: ___

Estaba en mi trabajo súper distraída, lo que había pasado anoche fue increíble, la app está programada para guardar el perfil de las personas con las que hayas hablado por más de 10 minutos.

Cuando termino la llamada me quede completamente dormida, cuando desperté pensé que no se había guardado el contacto pero no fue así, gracias al algoritmo de la app ese no fue él caso.

Ahora que lo pienso, no sé su nombre, la app solo muestra las iniciales "M".

Ninguno de los dos mencionó nada de su vida personal algo que estuvo bien, es una app anónima, no podría hacer algo así si la persona con la que lo hiciera me reconociera, sería muy vergonzoso, puedo decir que soy una persona introvertida.

Aquel sujeto fue el dueño de todos mis pensamientos hasta que cayó la noche.

Que vida más aburrida tengo, del trabajo a la casa una y otra vez.

Lo único que me sacaba de esa rutina aburrida era esta nueva app, entre nuevamente pero aquel chico de anoche no estaba conectado.

No le di mucha importancia simplemente busque otra pareja en la app, pensé que todos serían igual de buenos que él, que mal estaba.

Me emparejaron con varios chicos, sólo escuchaba sus veces y en seguida cortada la llamada al instante, ni siquiera les di una oportunidad, la voz de ese chico había elevado demasiado mis preferencias.

Ninguno se ajustaba a mi gusto por su tipo de voz, al final me rendí con mi búsqueda y sólo me dormir.

Pensé que quizás mañana en la noche hablaría con él pero ese no fue el caso, así pasó una semana sin tener ninguna noticia de aquel chico.

Le di la oportunidad a otros chico sin importar su voz, en verdad lo intente pero no pude sentir con ninguno de ellos lo que sentí esa noche.

Las cosas buenas en mi vida no duran, ya no me extraña.

Esa noche Justo antes de dormir decidí entrar una vez más en la app por costumbre, ya me había acostumbrado a entrar a la app todas las noches antes de ir a dormir.

Cuando estaba a punto de salir de la app recibí una llamada de la misma.

"M"

—No puede ser— es lo primero que dije al ver la letra "M" en la pantalla.

No sé si debería responder o no, tardo una semana sin hablarme, tengo mi orgullo.

—Si... sólo vamos a ignorarlo— es lo que dije....

—Alo— no me juzguen, era inevitable.

—Pensé que no ibas a responder— su voz... como es posible que con tan solo escucharla me pongo mal.

—Porque no te respondería según tú— le tire una indirecta, no podía dejarme blandir solo por su voz.

—Te extrañe— eso fue trampa.

Que golpe más bajo, No sólo no respondió mi pregunta sino que hizo que lo perdonara fácilmente.

Con esto me doy cuenta que soy más del lado sumiso.

—¿Puedes gemir para mí esta noche?no... quiero que gimas para mí— tan directo como siempre.

Esto es una app para tener esos tipos de relación así que no estaba esperando nada más de su parte, en realidad me gustaba que fuera así, sólo darnos placer mutuamente, es lo único que cuenta, el sentimentalismo no tenía lugar aquí.

—Esperaba que me lo pidieras....

Esa noche lo hicimos aunque no físicamente, pensé que pasaría lo mismos que la primera vez, que tendría que esperar una semana para volver a hablar con él pero no fue así, después de esa noche pasó un mes, hablábamos casi diario, pero no para tener una conversación normal, siempre lo hacíamos por teléfono.

POV: Mikey

Salí del baño luego de darme una ducha, acababa de tener una llamada caliente con aquella chica que lo único que sabía de ella era las iniciales de su nombre.

Quiero más, ya no me es suficiente con solo escuchar su voz, no importa ser egoísta la quiero en mi cama.

Me estaba volviendo loco, ni siquiera conocía su rostro pero ella ya me tenía a sus pies.

No creo que quería que nos conozcamos en persona, esta última semana trate de hacerle algunas preguntas personales pero ella siempre evadía la pregunta cambiando de tema.

—Mikey ¿aun sigues despierto?— Koko entro a mi habitación.

—Si ¿qué pasa?— estaba completamente desnudó secando mi cabello está con la toalla.

—Tenemos trabajo que hacer— era casi la media noche.

—Estaré listo en unos minutos— le respondí, koko se dio media vuelta para irse pero antes de eso volví a hablar —¿Sabes cómo rastrear la ubicación de una persona tan solo usando los datos de una App?

No podría pregúntale directamente a ella porque ya sabía la respuesta. Se iba a negar a que nos conociéramos en persona, cuando pienso en ella no sé qué rostro imaginar, por lo menos quiero saber cómo es ella visualmente.

—Tenemos un equipo para eso ¿por qué preguntas?— hizo una pequeña pausa —vas a buscar a la chica de la App— era inevitable que koko no supiera de ella ya que él pasa mucho tiempo cerca de mí.

—Así es, quería que todo siguiera siendo anónimo pero ya no puedo.

—No lo hagas— lo mire —puede que la persona que encuentres no seas la que te imaginas.

—Me da igual quién sea, no voy a interactuar con ella, sólo quiero saber quién es— aunque quisiera más que solo conocerla no sé cómo reaccionaría ella si apareciera de repente invadiendo su privacidad.

—Que tal si no te gusta lo que vez, si es horrenda de cara y apariencia— no había pensado en eso.

—Se que es preciosa, lo puedo saber con solo escuchar su voz— ya parecía adolescente enamorado.

—La voz no define a una persona, sólo piénsalo, aquella chica debe de pensar que eres una persona común y normal aunque la realidad es otra, eres el líder de la Toman, una organización criminal que está en el top 1 de los más buscados no sólo en la lista de este país— fruncí el ceño.

—Solo cállate y haz lo que te digo— lo amenace con la mirada —búscala— le di mi celular.

Tan sólo quiero ver su rostro.

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