Paraíso

Matar

Despierto y noto que estoy acostada, muevo la cabeza a la derecha y veo que Jenn esta acostada a un lado de mi. Esta sobre una malla de metal, debajo de ella hay un estanque de agua como de medio metro de profundidad.

Miro debajo de mi y veo la malla sobre el estanque debajo mío, tengo las muñecas y los tobillos atados a la malla. Comienzo a forcejear y a hacer ruido lo que hace que Jenn abra los ojos.

Escucho un ruido a mi izquierda y giro la cabeza, veo que esta Antoni atado de igual forma que nosotras.

-Antoni- hablo bajo pero lo suficientemente alto para que escuche- Antoni, !despierta¡- abre los ojos y me mira.

-Mad, ¿Qué paso?

-No se, ¿está Trevor a tu izquierda?- gira su cabeza y regresa su mirada a mi.

-Sí, ¿dónde esta Jenn?

-!Aquí¡- grita Jenn- ¿ya despertó Trevor?

-!Ya desperte¡- responde Trevor y Antoni gira su cabeza hacia Trevor y creo que le esta diciendo algo.

Escucho un sonido chirriante y volteo a ver la puerta que esta frente a Jenn, Entran los tres hombres ancianos y al final entran ocho guardias sin ninguna arma, cuatro de ellos caminan detrás de nosotros y los otros cuatro se quedan al frente. Escucho como si presionaran botones y como puedo giro la cabeza de forma que puedo ver hacia arriba y ver de donde proviene el sonido. Los cuatro hombres están detrás de unas consolas donde hay una palanca grande y un teclado a un lado. Después de un minuto de silencio los guardias terminan de teclear y toman la palanca para después mirar al hombre calvo.

-Bueno, solo queremos respuestas- dice el hombre calvo- pero si nos dicen alguna mentira les ira mal ¿Verdad?- y mira al hombre que fue por nosotros al barco y recuerdo que dije el apellido de Laura mal.

-Claro que si- y sonríe el hombre al responder la pregunta- amm... solo vengo a cumplir una promesa que hice, ¿puedo hacerlo?- pregunta el hombre y me mira.

-Claro, ¿con quien de los cuatro?- pregunta el anciano calvo.

-Con ella, solo me llevara unos segundos- me señala y camina hasta los controles que están detrás de mi.

Escucho unos sonidos agudos y siento como la malla donde estoy se empieza a mover hacia arriba. Siento el pánico y la adrenalina en mi cuerpo y comienzo forcejear contra las ataduras y a moverme descontroladamente cuando la malla baja sumergiéndome en el agua de abajo que esta muy fría, intento mantener el aire dentro de mi pero se acaba y trato de levantarme para poder respirar por que el oxígeno se me acaba. levanto la cabeza de tal manera que mi nariz esta fuera del agua y puedo tomar un poco de aire, alcanzo a respirar profundamente dos veces antes de que me sumerjan mas y no pueda respirar.

Creo que ha pasado mas de un minuto cuando siento como se me acaba el oxígeno y comienzo a sentir como mis pulmones se agrandan de tal manera que duele y comienzo a tener convulsiones. La camilla se eleva y puedo tomar aire otra vez, el pecho me duele pero por fin puedo respirar. Volteo a ver a Jenn y se ve asustada así que le digo que estoy bien sin hacer ruido. Giro la cabeza y busco a Antoni, y tiene las muñecas rojas, supongo que estuvo forcejeando.

Respiro hondo varias veces antes de hablar.

-¿Qué quieren saber?, se los diré pero no les hagan nada, por favor- digo en tono de suplica y el hombre calvo se voltea y les dice algo a los otros dos ancianos.

Todo permanece en silencio durante unos minutos hasta que el anciano calvo voltea y se dirige directamente conmigo.

-Si están dispuestos a hablar esta bien, primero haremos unas preguntas que podamos comprobar para saber que dicen la verdad y después iremos a las preguntas reales- dice el anciano calvo.