El Demoledor

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Un día más de tus aventuras transcurría y decidiste adentrarte en las cuevas, recogiendo minerales, algunas plantas extrañas, gusanos para pescar, algún que otro cofre, todo lo normal. Ya tenías tu camino lineal hecho y bien iluminado así te era más fácil recorrer las cuevas.

Al siguiente día volviste por el mismo sendero ya que te habían faltado llevar un par de gemas por falta de espacio, corriste a toda marcha pero en un momento te tomó de sorpresa un enorme hueco que antes no estaba ahí y caíste al vacío. Por suerte pudiste sobrevivir a la caída, te quedaste mirando hacia arriba mientras rascabas tu nuca, preguntándote cómo era posible que pasara eso. Al final tapaste la caída con plataformas y continuaste tu camino.

Y nuevamente, en el lugar donde se supone que habías encontrado las gemas había un cráter como el de antes, al fondo pudiste ver un brillo moviéndose, ¿tal vez una gema sobrante? Bajaste y te acercaste lentamente con tu pico en alto, de repente una sombra se giró hacia ti y una luz te dejó enceguecid@ por un momento. Te pareció escuchar una voz que te decía "¡Corre! ¡Quítate del medio!" pero no entendías lo que estaba pasando, segundos después la tierra debajo de tus pies explotó y la caída te dejó noquead@.

Al despertar lo primero que viste fue una sonrisa cubierta por un anaranjado pelo facial, siguieron unos ojos claros que te miraban y un casco linterna que te quemaba las retinas con la luz.

???: Hoy es un buen día para morir, no es así?

(T/N): ¿Cómo? ¿Quién eres y qué me pasó?

???: Soy Dolgrim y te traje a mi casa, te dije que te hagas a un lado pero parece que te gusta ver una bomba explotando de cerca.

Echaste un vistazo al lugar, no parecía ninguna casa, mas bien una simple cueva más, de no ser por una puerta colocada en una de las paredes, una mesa y una silla donde estaba sentado ese sujeto.

(T/N): ¿Tu casa? Pero si estamos en el subsuelo... además, ¿por qué eres tan bajito?

Dolgrim: Es que soy de raza enana, ¿y qué tiene de malo el subsuelo?, ¿a dónde quieres que viva sino?

(T/N): Emm... ¿arriba, en la superficie, en unas de mi habitaciones?

Dolgrim: Eh? Claro que no. -te lo negó rotundamente con la cabeza, diciéndote que allí él estaba muy a gusto, al segundo siguiente ya te estaba ofreciendo explosivos para que compres.

Lo miraste con cara de confundid@, tocaste tu espejo y te volviste a casa enseguida.

La siguiente semana te encargaste de recrear tu sendero para el lado opuesto así no tendrías el mismo problema de que a alguien se le ocurra deformarlo a bombazos, aunque durante el proceso tenías la extraña sensación de que te estaban observando. En eso, escuchaste algo metálico rodando contra el suelo, te giraste con fastidio y >boom< una bomba reventó todo tu trabajo y te mandó a volar contra las piedras.

(T/N): Dolgriiiim!!!!!!!! Sé que eres tú!!!

Dolgrim: Ah! Parece que me recuerdas! Qué alegría verte de nuevo, human@! -salió de su escondite mirándote con una gran sonrisa que se asomaba por entre la barba y la suciedad de su rostro.

(T/N): No es precisamente un gusto verte... -levantaste una ceja.

Dolgrim: Oye, ¿qué te parece si usamos dinamita para hacer el camino? Tardarías un día en lo que te llevó toda la semana, más vale maña que fuerza, no?

Aunque te gustaba tu estilo prolijo, decidiste aceptar su propuesta de una vez, sino, sabías que el enano destruiría tus caminos cuando te descuides. Tiraste la primera bomba y... sentiste cierto alivio, al final entendiste el encanto en destruir el entorno. Tras horas pasándotela genial con Dolgrim, éste último admitió que admiraba tu delicadeza al arrojar los explosivos y cómo tu tez se iluminaba con cada resplandor.

NPC!Terraria x Player!Reader -·- Viví tu historia~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora