VENDIDA AL REY (Mafioso)

Matar o Morir

Después de decirle que es mía, ella se inquietó y puso mucha resistencia, pero además de eso note que su mirada irradiaba rabia pero a la vez tristeza, no sé si quería llorar o explotar de ira.

Se zafó de mi agarre ya que me quedé observando su expresión, ella es muy escurridiza y como es pequeña pudo salir de la posición en la que la tenía.

Pero antes que siguiera hacia donde estaba su padre arrodillado la atrapé por la espalda y la abracé, puse sus manos delante de ella tomándolas por las muñecas. Ella seguía tratando de soltarse, pero eso solo hacía que se arrinconara más hacia mi cuerpo.

—Papá dime qué no es cierto, ¿esto es una broma papá?, ¡Por favor dile a este imbécil que me suelte!—exclamó con una voz jadeante, algo que me excito demasiado...

—Pues no niña, no es ninguna broma, tu padre te vendió y ahora eres mía completamente —susurré cerca de su oído con voz ronca

—¿Señor Keer ya me puedo ir ? —pregunto el viejo con su rostro apagado

~¿acaso todos creen que esto es un juego? ¿me toman por un tonto?~

—No, quédate ahí donde estas, a ver niñita ¿Tú crees que yo estoy feliz por esto? Tu padre me debe mucho dinero y tú eres mi paga, así que deja de hacer berrinche y quédate quieta —le dije abrazándola está vez de la cintura y de su torso para que dejara de moverse como un gusano.

—Noo, ¡no lo voy a aceptar! —soltó con ira.

—Ah entonces, ¿prefieres que lo mate?—

Le hice seña con mis ojos a Bruno para que apuntará al tipo que estaba arrodillado y así lo hizo

—No, no señor por favor no me mate, mire le estoy dando algo muy preciado para mí, tenga piedad —suplicó este poniendo nuevamente su cabeza en el suelo.

—¿Preciado?, ¿me llamas algo preciado?, ¿Acaso soy un objeto que puedas vender a tu antojo papá?, ¡Estás demente! —le gritó, luego hizo una pausa para mirarme virando su cabeza diagonalmente hacia arriba —Y tú tipo rudo y estúpido, ¿crees que te voy a servir de algo?. Yo solo soy apenas una estudiante universitaria, sin dinero y sin nada que darte, ¿Cómo piensas que yo sería un pago?, ¿me ves cara de lingote de oro o que? —su expresión llamaba mucho mi atención...

—Pues ahora que lo mencionas, estoy pensando en el gran uso que te daré y de ahora en adelante no aguantaré ningún insulto de tu parte, ¿acaso no sabes quién soy preciosa?—

Le dije todo esto en el oído y agarrando su quijada, ella seguía forcejeando por supuesto y muy descaradamente admitió.

—No, no sé quién eres y me importa un bledo —

—Ja, pues hoy me conocerás preciosa —Le dije mientras intenté levantarla así como estaba, aunque ella pataleaba tanto que no me dejaba ver el camino entonces, gritó :

—Noo, ¿Estás loco?. Yo soy menor de edad, ¡te puedo hundir en la cárcel por lo que me quieres hacer! —reí por lo bajo ante su comentario.

—Eso nadie lo va a saber además, yo manejo todo el país a mi disposición, nadie le hará caso a una niñita como tú —terminé de decirle

De tanto discutir con ella me hartó, intenté voltearla para cargarla en mi hombro pero, la muy estúpida me golpeó en las pelotas apenas le di la vuelta sin embargo, antes de que escapara Bruno rápidamente saco su arma y la apunto en la cabeza.

—Vuelve dónde está el señor Keer —ordenó severamente haciéndole una señal con el arma para que volviera a mi.

~Se ve que le tenía más miedo a Bruno que a mí ja, pero pronto verá lo que es realmente el miedo...~