Tom Riddle fanfic; Entre las sombras tú y yo

Un plan mortal para Riddle

La noticia  se expandió por todo el colegio, La cámara de los secretos había sido abierta.
Muchos eran los que mantenían una postura escéptica al respecto, no creían en la existencia del heredero de Slytherin. Pero había algo que era innegable, un alumno había sido petrificado.

Una semana había pasado desde la noche de Halloween. Marie no le había dirigido la palabra a Tom desde la disputa. Bajó a la sala común donde un grupo de estudiantes de primero hablaba
con excitación:

El heredero de Slytherin debe de estar entre nosotros, tiene que ser alguien de nuestra casa.
Ya era hora de que alguien pusiese orden y nos liberase de todos los sangre sucia.
Ojalá supiera quien es, así podría ayudarle.

La joven los escuchó, se quedó perpleja. La situación había ido demasiado lejos debía derrocar al tirano de Riddle antes de que cometiera algún asesinato, lo cual no resultaría tarea fácil.  Fue a clase de pociones acompañada de Sarah:

Como mejor amiga tuya que soy, exijo que me cuentes por qué Tom y tú no os dirigís la palabra, no lo entiendo.
Ya te he dicho que fue un malentendido, no es nada. Lo importante es que Nott y tú estéis bien.
Me alegra haber hecho las paces contigo Marie, eres una buena amiga.
Eso sí como me entere de que Nott anda ligando con otras tendrá que vérselas conmigo. Y creeme no quiera verme enfadada...
Vamos date prisa o el profesor Slughorn nos castigará a las dos.

Las dos amigas entraron apresuradamente en la clase de pociones.  Todos los alumnos ya estaban colocados en sus respectivos asientos. El profesor Slughorn miró a las dos jóvenes con ánimo de regañarlas, pero al ver que una de ellas era Marie se limitó a hacer una pausa y continuó con la clase:

Bien, como iba diciendo, señoritas, deberán realizar una poción, al margen de las clases. Como pueden observar todos sus compañeros se han colocado por grupos.- Alguien entró en clases repentinamente.- Buenos días señor Riddle.
Disculpe el retraso, estaba reunido con el profesor Dippet.
Sí el profesor me ha mantenido informado no se preocupe.   Señorita Carrow usted realizará el trabajo junto con la señorita Black y usted señorita Kyteler, póngase con el señor Riddle.- Marie miró con decepción a Tom.- Podrán utilizar la clase de hoy para organizarse.
Nos limitaremos a hacer el trabajo individualmente, cada uno por su cuenta, no quiero que me dirijas la palabra - dijo Marie con indiferencia - cada uno hará su poción respectivamente, y la mejor de las dos será presentada al profesor Slughorn. ¿De acuerdo?
¿ Sigues enfadada? -Preguntó sorprendido-
Intentaste matarme.
Vamos, estábamos jugando...- Musitó acariciándole la pierna.-
Prometiste que me dejarías en paz si te lo pedía - recordó apartando con brusquedad la mano del muchacho -
Y lo haré si así lo deseas. ¿Pero estás segura de que es eso lo que quieres?
Sí absolutamente.
Entonces obedeceré, pero no porque yo quiera. Pero te advierto Kyteler, la amistad de Lord Voldemort no se desprecia tan a la ligera.
¿Lord Voldemort? No me hagas reír.
Será un nombre que todos teman, que nadie se atreverá a pronunciar.
Vale, ¿puedo llamarte Voldi? - Marie soltó una carcajada y el profesor Slughorn la miró con severidad.-
Yo no me lo tomaría tan a broma, has visto lo que soy capaz de hacer... Incluso de matarte.
Creo que no estás en posición de amenazarme, conozco tu secreto heredero.- Susurró.-
¿Vas a delatarme?
Sí. Esta tarde se lo diré al profesor Dumbledore, el único que no confía en ti.
No tienes pruebas.- Dijo con calma.- Tampoco sabes dónde está la cámara.
Las encontraré, no te preocupes. Te expulsarán Tom. Tengo entendido que Hogwarts es como tu casa. Bueno, en realidad no sabes lo que es tener un hogar...- Lo provocó pero Tom supo mantener la compostura a pesar de que ardía en rabia.-
No vas a hacerlo- Pronunció con tono chulesco- no podrás soportar la idea de que te separen de mí, estarás tan perdidamente enamorada de mí que demostrarás mi inocencia.
Menos mal que soñar es gratis...
Elaboraremos la poción Felix Felicis.- Disimuló el muchacho al ver que venía el profesor.-
Es una poción extremadamente complicada, señores. No dudo en sus capacidades, pero en fin, es magia muy avanzada para alumnos de sexto curso.
Confíe en nosotros profesor, somos capaces de hacerlo.- Exclamó Tom con seguridad.-
Está bien. Hagan lo que estimen conveniente.- Pronunció el profesor dirigiéndose a ver como iban Sophia y Sarah.-
¿Pero estás loco? El libro dice que es endiabladamente complicada de elaborar. No voy a ser capaz de realizarla sola...
Ese no es mi problema, has sido tú la que ha dicho que quería trabajar sola. Yo cumplo con lo pactado y dejo que hagas las cosas por tu cuenta.
Muy bien la elaboraré yo sola, no debe de resultarme tan difícil... soy una Kyteler.
No, señorita Marie.- Slughorn la había oído.- Este es un trabajo colectivo, no individual, cooperen los dos, ambos son alumnos brillantes cuando trabajan en solitario, pero deben aprender a cooperar. Estoy convencido de que saldrá algo maravilloso de este trabajo, no me cabe la menor duda. No les he puesto juntos arbitrariamente, no me decepcionen.- El profesor se marchó tras el sermón.-
Te odio.- Exclamó Marie.- ¿Por qué no me has dicho que lo tenía detrás?
Porque ahora estás obligada a quedar todos los días conmigo. Me ha divertido ver como te dejabas tú solita en ridículo.
Seis meses contigo... Menuda tortura. Ojalá te expulsen antes.- Tom mostró una sonrisa sádica.-
Ya veremos Kyteler... Te lo advierto, no te va a resultar fácil ganar este juego.
Me lo tomaré como un reto.- Sentenció, y se levantó, la clase se había acabado.- Me voy corriendo, he quedado con el profesor Dumbledore. Hasta luego Tom.
Buena suerte.- Dijo con tono desafiante.-

Entró en el humilde despacho del profesor de encantamientos.
Buenas tardes profesor Dumbledore .
Adelante señorita Kyteler.
Señor fue Tom Riddle, él abrió la cámara de los secretos.
¿Tienes pruebas?
No... Pero lo sé.
Marie, se trata de una acusación muy grave.
Lo sé y lo comprendo, pero estoy convencida de que fue él.
Por favor, siéntate. Tom es un alumno modélico ¿Qué te hace pensar que él es el heredero de Slytherin?
Si no me equivoco, fue usted quien le notificó que era un mago.
Sí, así es. ¿Te lo ha dicho él?
No, lo he visto en su mente.Pudo comprobar que no era como los demás niños, a su temprana edad ya controlaba sus poderes, manipulaba y lastimaba a sus compañeros. ¡Ah! y habla lengua parsel.
Durante la estancia en el colegio Tom no ha mostrado jamás ninguno de esos comportamientos.- Dijo con tranquilidad el hombre, aunque su rostro denotaba preocupación.- De todas formas, le haré una recomendación, no se deje seducir por el encanto de la oscuridad.
¿Señor?
La magia ancestral, la magia del amor, es la más poderosa, la única con suficiente fuerza para combatir al mal.
Pero yo no sé nada acerca de eso. Usted sabe que siempre he vivido rodeada de maleficios, oscuridad y tinieblas.
Busca dentro de ti, solo podrás vencerle si la utilizas. Puedes irte.
Gracias... Supongo.- Se despidió.-

Tom tenía razón no tenía pruebas, por lo que de momento no podría delatarlo. Tampoco había podido obtener información acerca de Dumbledore,era un experto en oclumancia. Se dirigió a la sala común decepcionada. ¿Por qué tenía tan mala suerte?

¡Marie! -Gritó Blair.- Una lechuza ha traído una nota para ti.-
Gracias Blair. ¿Por qué estás tan alterada?
Porque debe de ser una carta muy importante, está embrujada, sólo su destinatario puede abrirla.
Vaya, no sé quien me la puede haber mandado...-Dijo abriendo el sobre y lo leyó.-

Reúnete conmigo esta noche a las doce donde la última vez. G.

Marie ardía en deseos de citarse con el mago tenebroso, necesitaba conocer más detalles sobre la escabrosa vida de su madre. No tenía mucha información acerca de Dumbledore, pero no le importaba. Llegó hasta el claro del bosque donde había conocido al hechicero, él la estaba esperando:
Hola Marie.
Buenas noches Grindelwald.
¿Me has traído información acerca de Dumbledore?
Sí. Pero muy poca. Me he enterado que es uno de los candidatos para convertirse en el futuro director de Hogwarts, que defiende el uso de la magia ancestral sobre el uso de la oscura. Y he leído en la prensa que le han instado numerosas veces para que vaya a Europa Continental a luchar contra ti, pero por alguna extraña razón se ha negado. Lo siento se que no es de mucha ayuda.
No te preocupes con eso me basta. Necesitaba conocerte. No eres una chica común.
Tampoco lo es Tom Riddle y sin embargo no le has prestado la misma atención.No me fío de ese Tom Riddle aléjate de él. No quiero que hables con él. No es buena gente.
Ojala fuese tan sencillo.
No volverás a verle, vendrás conmigo al continente.
No pienso hacerlo. Dices que no es buena gente, pero ¿sabes cual es tu problema? No te das cuenta de lo mucho que os parecéis el uno al otro. Ambos sois oscuros, siniestros y manipuladores. Estáis cegados por el poder.
Hay una pequeña diferencia, mi querida niña, yo lo hago por el bien mayor. En cambio él actúa por placer, lo he visto en sus ojos. Si no te alejas de él acabará haciéndote daño.
Entonces me andaré con cuidado. Pero no puedo hacer lo que me pides.
¿Por qué?
Odio decir esto, pero no puedo hacerlo porque le quiero, estoy enamorada de Tom Riddle. A demás ¿quién eres tú para darme órdenes?
Tu padre.- Marie se quedó inmóvil, era lo último que habría esperado oír.- Y por ese motivo sé lo que es bueno para ti y lo que te conviene.
Lo siento pero durante toda mi vida he tomado mis propias decisiones, nada va a cambiar ahora...-Musitó con pesadumbre- Aun así me gustaría pasar más tiempo con mi padre, yo también quiero conocerte mejor.
Ven a Ucrania conmigo,  yo te enseñaré a utilizar la magia, te enseñaré a llevarla a unos niveles inconcebibles para muchos. Te convertirás en una de las brujas más poderosas de la tierra.- Los ojos de Marie relampaguearon.- ¿Vas a rechazar la oferta de tu padre?
En verano, quiero que me enseñes todo cuanto sabes, iré contigo al continente. Pero hasta entonces permaneceré en el colegio.
Está bien.  Pero no quiero que te juntes con Tom.
Que le quiera no significa que no le odie. Deseo su muerte, tanto o más que tú, padre. Acabaré con él, sólo tengo que encontrar el modo. Como he aprendido de ti, es por el bien mayor.
Eso es lo que quería oír pequeña. Ahora he de irme al continente. - Sacó una especie de colgante de su bolsillo y lo colocó en el cuello de su hija.- Guárdalo este es el emblema de las reliquias de la muerte, si alguna vez necesitas mi ayuda invócame a través de él y acudiré.- Dijo desapareciendo en una nube de humo negro.-
Adiós, padre.- Se despidió Marie con tristeza.-