Tom Riddle fanfic; Entre las sombras tú y yo

El expreso de Hogwarts

Mis queridísimos lectores,

Hoy es el primer día de curso en Hogwarts. Y la estación de King Cross está aborratada de estudiantes que dejan sus casas una vez más para embarcarse en una nueva aventura. Una lechuza me informa de que Sarah Carrow volvió sola a casa ayer por la tarde... Dicen que vieron al señor Riddle con una chica de pelo platino, su nombre, lo desconocemos, pero parece que va a dar de que hablar esta temporada.

Recordad que las muros del castillo no pueden ocultarme ningún secreto.

Mágicos saludos.

Mrs Hogwarts.

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Hogwarts, 1 de Septiembre 1943.

- ¿Se puede saber por qué no viniste ayer? Espero que tengas una buena razón... - Dijo una chica muy snob de pelo rojo.-

- Tenia asuntos que atender Sarah. -Dijo Tom con gesto aburrido.-

- ¿Asuntos con pelo plateado? Mrs Hogwarts dice que te vieron con una chica ayer.

- No sé de que me hablas...- Respondió hasta que contemplo una imagen que le llamo la atención.-

La estación se encontraba plagada de gente. Muchos corrían de un lado a otro. Pero para desgracia de Marie, todos parecían ser muggles. ¿Cómo encontraría el andén nueve y tres cuartos? Dumbledore no le había dado instrucciones de ningún tipo.

Se dispuso a preguntar a un empleado:

-Disculpe señor ¿Dónde puedo encontrar el andén nueve y tres cuartos?

-¿Nueve y tres cuartos?, señorita debe de estar usted confundida, mire ahí están los andenes nueve y diez seguro que debe de ir a uno de los dos. Buenos días.

- Gracias.- Sonrió.-

-¡Anda! pero si está la sangre sucia perdida otra vez.- Se burló Tom dejando sola a Sophie.-

- Muy gracioso.¿Tú vas a Hogwarts?¿Dónde está el andén nueve y tres cuartos?-Preguntó desesperada.-

- Atraviesa la pared que está entre los andenes nueve y diez.

- ¿Que atraviese la pared? ¿Tengo cara de fantasma?-Tom ignoró la pregunta.-

- Oye quería pedirte un favor.

- ¿Un favor? Disculpa pero ¿No eras tú quien me amenazó ayer? Creo que no te debo nada.

- Entonces, te lo advierto, no digas nada del diario, no comentes nada de que nos viste en Borgin & Burkes, o lo pagarás muy caro. ¿Lo has entendido?

- Uy! Qué miedo... -Dijo con tono irónico- aún así ¿por qué querría contar yo lo de la otra noche? No creo que a nadie le interese lo de tu estúpido diario.

- Está bien. Ahora vete, no quiero que me vean hablando contigo sangre sucia.

- No soy una sangre sucia- Susurró con ira.-

Esperó un buen rato sola frente al muro, temía que Tom la hubiese engañado, y caer en una triquiñuela de un desconocido era algo que Marie concebía como decepcionante. Vio como una familia traspasaba la pared, por lo que se dispuso a hacer lo mismo. Una vez allí se montó en el tren, miró nostálgica como todos los niños se despedían de sus familias. Su madre jamás se había ocupado de ella, excepto para enseñarle oscuros maleficios. Muchas veces Marie, se había planteado si su madre en realidad le quería o si simplemente se esforzaba tanto en enseñarla para deshacerse de ella en cuanto alcanzase la mayoría de edad. Casi todos los compartimentos estaban ocupados por los alumnos. Aunque le habría gustado ir sola, se sentó al lado de un chico rubio. Estaba callado y miraba por la ventana pensativamente.
-¿Te importa que me siente? Los demás están ocupados.- El muchacho se giró.-