Capítulo 1

84 8 1
                                    

Después de conquistar la ciudad de Qianyang el emperador Jiangxi se llevó cautivos a algunos sobrevivientes para su servicio, entre ellos había mujeres y niños.

Una vez ya en el palacio, se seleccionó y se separó a las mujeres de los niños para darles sus nuevos deberes.

Jiangxi decidió darles esclavas a sus dos mejores generales como recompensa por la conquista lograda, diez jóvenes a su servicio para cada uno. Cuando se seleccionaban a las jóvenes, el general Ji Hong mejor conocido como el general Ji, miró con curiosidad a una joven. Estaba en condiciones lamentables debido al asedio vivido. Su pelo era negro como la noche y sus ojos grandes y brillantes.
Pero la joven estaba en el grupo de las que servirían al general Hao Dou. De modo que el general Ji pidió al sirviente encargado de ellas que cambiase a la joven al grupo de las esclavas que le servirían a él. Hao Dou dándose cuenta de este cambio razono que había sido por la bella esclava, así que dirigiéndose a Ji preguntó :

- ¿Porqué has hecho esto? No será que quieres protegerla ¿verdad? -.

De modo que Ji astutamente respondió con tono indiferente lo siguiente, para evitar ser descubierta su verdadera intención.

- ¿Cuándo me han importado los esclavos? No son más que migajas de pan. Hice el cambio porque parece ser una rebelde y yo quiero ser el que le enseñe quién manda aquí ahora -.

Tras la respuesta, Hao Dou se marchó y de inmediato les gritó, - ¡Caminen! -. Entonces las esclavas desfilaron una a una con sus respectivos amos.

Aquellos dos capataces eran muy diferentes el uno del otro. En el pabellón del general Ji los esclavos eran tratados con dignidad, mientras que en el de Hao Dou los trataban con severidad. Por ello el general Ji quiso rescatar a la joven de la cual realmente se interesó.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La esclava del pabellón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora