8~Una duda y un sueño

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Raúl:

No sabéis cómo me gustaría reventarle la puta cara al imbécil de Mateo, enserio. Pero tengo una reputación demasiado buena como para hacerlo.
El director nos llamó a su despacho el viernes diciendo que no había ni rastro de Mateo. Sara no sabía si estar aliviada o preocupada.
Por mí como si no volvía a aparecer en lo que le quedaba de vida.

Y en cuanto nos pudimos dar cuenta ya habíamos superado otra semana de clases.

Viernes por la tarde, ahí me encontraba yo, en el piso de Sara. Ella dando vueltas por su habitación indecisa porque no sabía aún que vestido ponerse para mañana por la noche. Y yo riéndome.

-Oye, esto es serio -me dijo cruzándose de brazos e intentando aguantarse la risa.

-Sí, súper serio. Sabes que igualmente, te pongas lo que te pongas, vas a estar guapísima, ¿no?

Ella sonrió y se acercó para besarme. No pude evitar ruborizarme al notar sus labios suaves junto con los míos.
Era la primera vez que estaba en su piso. No era especialmente grande, pero era suficiente para ella. Era acogedor y muy bonito. Su habitación muy bien ordenada y bonita.. se notaba que tenía buenos gustos a la hora de decorar.

Se separó sin dejar de sonreírme dulcemente y se puso a rebuscar en el armario. Empezó a sacar varias faldas, tops, chaquetas.. No pude evitar fijarme en un vestido rojo que tenía a un lado del armario. Era corto, de terciopelo y ajustado.

Por lo que me había enterado estos últimos días, es que la familia de Aroia tenía bastante dinero también. Podía tener en cuenta que su fiesta de algún modo iba a ser "elegante". ¿Por qué no aprovechar ese bonito vestido?

-¿Y ese vestido rojo? -le dije señalándolo.

Sara se volvió un segundo para mirarme y luego se volteó de nuevo al armario. Lo sacó y lo observó unos segundos.

-No sé.. No soy muy fan de ponerme este tipo de vestidos, los chicos pueden llegar a ser muy..

-Asquerosos, lo sé -terminé de decirle yo -. Sería una lástima no poder lucirlo, seguro que te queda increíble. Además, si algún chaval de los que esté presente se le ocurre decirte cualquier piropo inapropiado, me encargaré personalmente de que no vuelvan a abrir la boca en lo que les quede de noche.

Dudó unos instantes. Me daba pena pensar que por eso no se lo podría poner. Sara era muy atractiva y era entendible que los chicos se quedaran locos al verla. Ella seguro era la envidia de muchas.

-Bueno, pero antes necesito que me des tu punto de vista, porque hace bastante que no me lo pongo.

Asentí y me decidía a dejarla cambiarse a solas cuando me cogió del brazo y me miró con dulzura. «Que gilipollez, habíamos estado en una situación distinta y peor, ya que más daba, ¿no?»

Se lo puso y admiré lo jodidamente bien que le quedaba. Marcaba a la perfección su cintura, su pelo rubio claro y sus ojos azul grisáceos resaltaban y lucían increíbles.
Recorrí su cuerpo entero, de abajo a para arriba hasta cruzarme con sus espléndidos ojos.

-Te queda perfecto -fue lo único que me atreví a decir, aunque mi mirada podría decirlo todo.

Sonrió tímidamente y se volteó para verse en el espejo de cuerpo entero que tenía al lado del armario.

-La verdad, es que me moría de ganas por volver a ponermelo -admitió ella.

-Pues ya está, mañana te lo pones y lo luces. Te verás preciosa -le dije levantándome de la silla y acercándome a ella para ponerme detrás, apoyar mi cabeza en su hombro y posar mis manos en sus brazos.
Le di un beso en la mejilla y sonreí.

-¿Alguna vez pensaste en ser modelo? Presiento que se te daría bien -le dije aquello porque una chica como ella podría serlo perfectamente.

-De pequeña sí. Me guiaba por las revistas de moda más famosas que había en su momento. A día de hoy sigo teniendo varias. Pero modelar por una pasarela es algo que me aterraría. Es duro ese trabajo, y muchas pasan por.. la anorexia. No me gustaría revivir aquello.

-¿Tuviste anorexia?

Asintió con una pena en sus ojos que era imposible de disimular. No me quise imaginar lo duro que tuvo que ser aquello, era algo muy grave y que por lástima, muchas personas, sobre todo chicas jóvenes pasaban. No le iba a preguntar el motivo por lo que cayó en eso. No quería forzarla a que me lo dijese. Si algún día estaba dispuesta a contármelo, yo estaría dispuesto a escucharla.

-Bueno, nunca dije que se tuviera que tratar de ser modelo de pasarela. Hay muchas que se dedican solo a que les saquen fotos y salir en revistas. Se lucen por los carteles que ponen por la ciudad.

Volvió a mirarme con dulzura y yo la aferré hacia mi cuerpo.

-Eso es algo con lo que siempre soñé, estaría bien, pero lo veo difícil.

-Tal vez yo lo pueda hacer más fácil.

Esta arqueó una ceja sin comprender cómo podría hacerlo.

-Mi padre es el jefe de la mayor empresa y se mueve por muchos estudios de moda del país. Si quieres, le hablo sobre ti, estaría encantado seguro -le confesé.

Vi que era una de las pocas personas que lo sabían y me impactó que le gustase la moda y no supiera quién era. Pero así había demostrado ser más real que otras chicas.

Enseguida se le iluminó la cara y noté un brillo especial en sus ojos. Mostraba una alegría inmensa. Se separó un momento y fue hacia su escritorio. Abrió uno de los cajones y sacó una revista de las muchas que tenía ahí guardadas. Luego volvió hacia mí y me la mostró. En la portada se podía observar a mi padre con uno de los diseñadores de vestidos más importantes y famosos. Por supuesto, me sentí orgulloso de él. De pequeño aspiraba a ser igual. A día de hoy también.

-No sé porqué no me di cuenta antes, te pareces tanto a él -me dijo señalando a mi padre.

-Entonces.. ¿le hago la propuesta a mi padre?

Asintió de nuevo dando saltitos de felicidad y seguidamente la envolví en mis brazos.

-Gracias, cariño -me dijo en bajito.

Me alegraba verla así de contenta. Si ese había sido su sueño de pequeña, yo me encargaré de que se cumpla. Ahora, me tocaba hablar con mi padre. Mantenía una maravillosa relación con él y seguro que aceptaría al verla. Además, todavía no le había contado que tenía novia, la sorpresa sería doble.


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Tengo un montón de ideas que estoy deseando plasmarlas en esta historia.

Ahora que estoy teniendo tiempo es inspiración me pondré con ello.

Besitos ^^

♡᯾𝘋𝘪𝘮𝘦𝘭𝘰 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘣𝘦𝘴𝘰᯾♡ Biyinplay Donde viven las historias. Descúbrelo ahora