♡᯾𝘋𝘪𝘮𝘦𝘭𝘰 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘣𝘦𝘴𝘰᯾♡ Biyinplay

12~El inicio de la agonía

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Sara:

Me desperté con un dolor de cuerpo horrible. Pero no como aquella vez que había hecho eso con Raúl, era un dolor distinto. Lo primero que vi nada más abrir los ojos fue a Raúl, quién nada más notó que me había movido un pelín se giró.

-¡Sara! -dijo con un brillo en sus ojos que mostraba felicidad con un ligero toque de preocupación.

Me encontraba tumbada en la cama y él de pie con el móvil en la mano.
Me ayudó a sentarme. Justo ahí vi que la falda y el top que había llevado el día.. ¿anterior?.. estaban en la silla del escritorio. Por lo visto llevaba una de sus camisetas que me quedaban lo suficientemente largas  como para que no se me viera nada.

-¿Qué sucedió?.. ¿Cómo acabé aquí? -dije con la voz entrecortada. Una parte de mí sabía con certeza lo ocurrido, pero la otra no.

-Fue Mateo. Se coló en tu casa y esperó hasta que volviste. Te agredió y cuando regresé a tu piso porque te habías dejado el móvil.. huyó -contestó él mientras agarraba mis manos y se sentaba a mi lado.

-Aquellas notas fueron suyas.. fui tan putamente ingenua..

-Ey, tranquila, eso ya pasó. Ya me encargué de llamar a la policía y lo están buscando. Les di las notas que recibiste, pero desean hablar contigo.

Asentí sabiendo que era lo mejor. Estaba en búsqueda y eso me aliviaba bastante. Pero volví a recordar lo tonta que había sido al recibir las cartas y no dar por hecho que se trataba de Mateo. La misma persona que llevaba desaparecida unos días. Me puse tensa al recordar también lo sucedido en mi casa, aunque fuera todo borroso ya que aún sentía que se me caía el mundo encima.
Raúl pareció notarlo y me abrazó. Apoyé mi cabeza en su pecho y sentí su calidez.

Cuando me separé de él caí en la cuenta de otro pequeño detalle.

-¿Y las clases?

-Otra cosa por la que no debes preocuparte, ya me encargué de eso -dijo con tranquilidad.

Asentí. No sé lo que habrá sucedido durante todo aquel tiempo que estuve.. ¿inconsciente? Pero confiaba en Raúl plenamente.

-Oye, quería decirte algo.. o más bien pedirte -dijo este sacándome de mis pensamientos.

-Veamos.. ¿qué me quiere pedir el chico que tiene o puede conseguir de todo? -le dije de broma.

-Es algo que debí decírtelo antes y nos hubiésemos ahorrado incidentes.

Lo miré sin entender.

-Puede que suene raro pese a que llevamos poco estando juntos, pero quería preguntarte si te gustaría que te vinieses a vivir conmigo aquí -me dijo con una sonrisa.

¿Qué si me gustaría? Obviamente. No dudé ni un segundo y asentí feliz cuando vi aquella forma en la que me miraba.

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Ahí me encontraba, mirándome en el espejo entero que había en la habitación de Raúl. Mis ojos recorrieron mi piel desnuda y me fijé en cada marca que tenía en el cuerpo. Mateo definitivamente se había vuelto loco.
Me dirigí al baño de la habitación y me di una ducha rápida. Después de aceptar la propuesta de Raúl, este había bajado a hacer unas cosas y preparar la comida para cuando regresaran Abril y Juan de la universidad. No sin antes comentarme que se encargaría de que todo lo que quisiera conservar de mi piso lo traería aquí. Hasta me ofreció una habitación para mí solita con un tocador para poder tener ahí todo mi maquillaje y mi estantería con perfumes. No tenía tampoco demasiados, pero con el tiempo quería conseguir más.

Bajé cuando me vestí y vi que Abril y Juan salían justo del garaje.
Se acercaron enseguida nada más verme.

-¡Sara! ¿Cómo te encuentras? -dijo mi mejor amiga mientras me abrazaba.

-Bien, con un par de moratones y marcas, pero mucho mejor.

-Voy a matar a ese hijo de su chingada madre -dijo Juan.

-Vamos -le corrigió Abril.

-Eso, hablemos en plural -siguió Raúl, quién había aparecido por el pasillo justo en ese instante.

-Vino un policía y todo a hablar con el director esta mañana -me dijo Juan.

-Yo me estoy encargando de todo, o bueno, mi padre. Es lo que tiene tener contactos..

-Y dinero -afirmó Juanito.

-Detalles sin importancia.. En fin, ya está la comida lista.

Los cuatro nos dirigimos al gran comedor y nos sentamos.
Mientras comíamos, hablamos más profundo sobre el tema y ya que iba a vivir con Raúl y Juan en la misma casa, Raúl pensó en que se viniera Abril también, al menos hasta que terminasemos la universidad y ellos se marcharan. Ambos tenían muy claro que querían seguir juntos el resto de sus vidas, al igual que nosotros. Ya tenían un montón de cosas planeadas para su futuro. Con eso, comprarse una casa cerca de la playa. Algo que muchos desean en la vida.

Raúl y yo, de mientras, teníamos planeado quedarnos o en esta mansión o tener otra en una ciudad o país distinto.

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-¿Te tocó? -me preguntó el policía. Habían venido para hacerme unas cuantas preguntas y ver cómo proseguir en el asunto. Raúl me observó, sentado a mi lado en el sofá del salón.

-No -le contesté. No recordaba muy bien lo que pasó, pero estaba muy convencida de que no lo había hecho.

El policía lo iba apuntando todo mientras otro hablaba por teléfono.
No me gustaba estar en aquella situación y deseaba que encontraran a Mateo y esta pesadilla acabase de una vez.

-Solo la agredió un poco -dijo Raúl.

-Sí, pero ya me encuentro bien.

-Vale, nosotros seguiremos investigando y buscándolo. Si sabemos algo los llamaremos enseguida, pedimos que ustedes hagan lo mismo. Cualquier pequeño dato nos podría ser muy útil.

-Perfecto, gracias -le dijo Raúl al policía y le tendió la mano.

En cuanto se marcharon Raúl se acercó a mí y me abrazó al sentir la agonía que recorría mi cuerpo.

-No te preocupes Sara, seguro lo encuentran.

-Ya.. pero no me voy a sentir segura hasta que eso ocurra.

-Te prometo que no te va a suceder nada. Pondré más vigilancia fuera de la casa si es necesario-me dijo mirándome a los ojos.

Sabía que estando con él me protegería, pero ya me había pasado algo terrible, y quién sabe lo que me podría suceder de ahora en adelante.
No me hacía mucha gracia volver a clases el lunes, pero no tenía más remedio.

-Mira, pensemos en otra cosa, ¿sí? Halloween está a la vuelta de la esquina.

-Ya, es una de mis épocas favoritas del año. Y las fiestas que hacen son increíbles -admití.

-¿Se sabe ya en qué casa la harán? -me preguntó.

-Lo más probable es que sea en la de Aro.

-Pues seguro se viene fiestón.

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Esto se debería de haber subido hace más de un mes, pero bueno, cositas.

Ya subiré el de Halloween cuando pueda.

Besitos ^^