CAPÍTULO DIEZ

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El almacén estaba vacío, salvo por Zee, Boun, Prem, Bes, Eleanor, y, por supuesto, NuNew.

—¿Tú eres La Llave? —preguntó Bes, con los ojos abiertos. Miró a NuNew.

—Creo que sí. —Dijo NuNew.

—¿Qué significa eso? —dijo Bes. Parecía preocupado, incluso con miedo.

—No sabemos. —dijo Prem.

—Hay mucho que no sabemos. —dijo Zee.
—Oímos por primera vez noticias de clanes que escaparon de Egipto el mes pasado, con la advertencia de que la guerra estaba llegando. Tuvimos palabras en Londres y Moscú, preguntando si los rumores de guerra eran verdaderos. Tantas historias, pero poca evidencia.

—Te juro, lo que he visto es cierto. —dijo Bes. Su lenguaje corporal gritaba honestidad y desesperación. Era difícil creer que estaba mintiendo. —Vi a uno regresar. Yo sentí el olor... —Él negó con la cabeza. —Es carne podrida y mirra, canela y alcanfor.

Boun se adelantó y puso su mano sobre el hombro de Bes. En lo primero NuNew pensó que fue sólo un gesto tranquilizador, pero luego se dio cuenta de que Boun estaba usando su capacidad de leer el ADN.

—Creemos en ti. —Dijo, y Bes fue claramente aliviado. Boun dio un pequeño guiño imperceptible para Zee. Bes no lo había visto, pero NuNew sí.

—Dinos lo que sabes de ella. —preguntó Prem. —Esa mujer vampiro.

—Ellos la llamaban Keket. —Bes susurró.
—Reina Keket.

—¿Reina? —dijo Zee.

—Ella exigió condición real. —Dijo. —Nadie se atrevería a desafiarla.

Eleanor se sacudió.
—Veo una reina egipcia, pero sólo hay oscuridad alrededor de ella.
—Dijo la mujer mayor. —Esa ira y rabia. Pero ella está bien guardada. No sólo físicamente, sino también mentalmente. No puedo ver su pasado.

—Es joven. —dijo Bes. —Sólo cinco años de nuestra especie.

—¿Ha sido vampiro por sólo cinco años?
—pidió Boun.

—Es poco conocido de su vida humana. Algunos creen que fue médico, pero no puedo probarlo. —dijo Bes. —Eso es todo lo que sé. Por favor, te lo ruego. Debemos detenerla.
—Bes miró a NuNew. —No sé lo que significa para ti. Me temo... —Sus ojos se dirigieron a Zee y él dejó incompleto el hilo de sus pensamientos. Volvió a mirar a NuNew y bajó la cabeza. —Voy a ofrecer mi ayuda, mis conocimientos, y proteger su vida con la mía. Es lo menos que puedo hacer, para que un día pueda volver a casa.

NuNew dio un paso atrás. Jesucristo. Este hombre, este vampiro, acababa de ofrecer su vida por él. ¿Qué demonios le podía decir al respecto?

—Haces honor a tu clan. —Zee dijo en voz baja. —No va a ser olvidado. Espero que puedas volver a tu hogar, así como, y si está dentro de mi poder, lo verás hecho. Luego se volvió hacia Eleanor.

—Eleanor, toma a Bes y su familia, proporciónales el refugio que buscan, y familiarízalos con las zonas y las leyes, entonces pueden alimentarse en paz.

El egipcio inclinó de nuevo la cabeza, con reverencia. —Gracias.

Zee asintió también con reverencia.
—Vamos a hablar de nuevo pronto.

—Si llegan visiones. —Eleanor dijo, moviendo la cabeza solamente. —Voy a mandar un mensaje.

—Por favor, asegúrate de hacerlo.— dijo Boun.  No importa cuán insignificante puede parecer. Sabes dónde encontrarnos.

La llave de Zee (ZeeNuNew) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora