¿Le gusto?
Todos los estudiantes se encontraban en sus respectivas aulas de clase después de su receso, aún no había llegado el docente correspondiente y los jóvenes se encontraban charlando al unísono haciendo ininteligibles sus palabras.
Por un lado, las chicas decidieron intercambiar números y así comunicarse durante fuera de clases.
—Y bien Melissa... Alguien no te ha despegado el ojo —informa coqueta la morena.
—¿Ah, sí? ¿Quién? —pregunta con confusión mirando a su alrededor. La castaña oscura le da un codazo.
—Disimula, chica... —susurra entre dientes.
—Ay, perdón... Pero dime quién es —queja acariciando su brazo.
—Mira hacia mi lado derecho como si me estuvieras mirando —manda la chica, y la castaña rojiza asiente obedeciendo la orden de la morena. Da una mirada rápida y vuelve hacia ella. —¿Y bien?
—Sigo sin saber —responde encogiéndose de hombros.
La rizada se golpea la frente con desesperación.
—Es el chico que te ayudó con Tania —Le explica haciendo pausas mientras hablaba. La castaña rojiza abrió su boca con asombro.
—¿Alexander? Mmm... No lo sé —Melissa reflexiona disminuyendo su voz. La morena enarca una ceja. —¿Tú crees?
Ella le asiente como respuesta.
—Me refiero a que he estado en este instituto desde secundaria y nunca lo he visto siendo tan amable con una chica o hablándole más que no sea por tareas, así que... Tengo mis suposiciones —informa la chica de ojos oscuros sosteniendo su cabeza con su mano izquierda dejando en duda a la de ojos cafés oscuros.
Después de unos segundos pasa por el umbral de la puerta un docente listo para enseñar después de unos minutos de retraso. Se presenta ante el salón e inicia a dar su clase.
[...]
Habían pasado tres horas de clases llegando la hora de irse lo cual estremecía a Melissa por el simple hecho de su transporte, sentía como su corazón amenazaba con salirse de su pecho ante la idea de irse por su cuenta a casa en una nueva ciudad, aunque conocía el camino de regreso. Optó por hablar con Jake antes de que se perdiera entre los transeúntes desesperados por partir fuera del lugar.
—Oye, Jake... —Lo nombra al estar detrás de él.
—Melissa, ¿Qué sucede? —pregunta el castaño terminando de colocar su mochila en su hombro.
—Me preguntaba: ¿Si... después de clases vas a casa de tu tío? —comenta la castaña rojiza esperando a que sea cierto.
—No, de hecho no —contesta haciendo que las esperanzas de Melissa se desplomen como un edificio de soportes baratos. —¿Por qué preguntas? ¿Querías que te acompañara? —pregunta curioso inclinando su cabeza a la izquierda. La chica asiente. —Vaya... Lo lamento, pero solo voy seguido a casa de mi tío en las vacaciones.
—Oh... lo entiendo. Gracias Jake —responde con una sonrisa desanimada.
—Oye... ¿Qué tal si les preguntas a tus nuevas amigas? —Le sugiere el ojimiel.
—Mmm... No lo sé, aún no nos conocemos mucho, yo me las arreglo para irme, adiós —Se despide con un gesto de mano caminando hacia fuera de su aula y estar afuera del instituto.
[...]
Cuando se encuentra en la entrada del instituto escucha a alguien llamarla, mira hacia los lados y no había nadie haciéndole señas, mira detrás y se encuentra con Alexander agitando su mano en dirección a ella, la chica se señala a sí misma para asegurar y lo ve asentir.
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Amor a primera vista [PAUSADA]
Teen Fiction[Versión 2019] Hay magia en los nuevos comienzos y eso es lo que Melissa aprenderá al enfrentarse al mayor de los desafíos, el amor. Por motivos del trabajo de su padre, Melissa se muda a una nueva ciudad sin conocer a nadie, ni un amigo, ni familia...