Enamorada de... ¿Mi jefe?

Capitulo: 9

- Lauren por favor necesito que te retires de aquí -dice Derek levantándose de la silla-.

- ¿Y si no quiero? -dice Lauren enarcando una ceja-.

Derek le hace una seña a alguien. ¿A quién fue? Luego de unos segundos, llega Bruce con un equipo de seguridad, claro, fue a él.

- Por favor señora Scot, necesito que me acompañe -dice Bruce tomándola del brazo-.

- No -responde Lauren en un grito, haciendo que todas las personas dirijan sus miradas a nosotros- vamos Derek ven con...

- No -responde Derek- por favor Bruce, sácala de aquí.

- Por favor señora Scot necesito que me acompañe -responde Bruce seriamente-.

Otro guardia toma a Alex del brazo y los intentan sacar de allí.

- Tenemos que hablar -suelta Alex-.

Miro a Derek y tiene la mandíbula tensa.

- Annie, sal de aquí -dice sin aún mirarme-.

- ¿Qué? -pregunto confundida-.

- Vete para la habitación, ahora. Bruce, llévala, luego vienes.

- Si señor -responde Bruce-.

Suspiro. ¿Qué sucede? Me levanto y miro a Derek, él aún no me mira. Miro a Alex y él me está mirando. Un escalofrío recorre toda mi espalda. Salgo del restaurante y Bruce sale detrás de mi. Me abre la puerta del auto y yo le doy las gracias. Llegamos al hotel y Bruce me acompaña a la suite, una vez en la suite suspiro. Estoy sola, completamente sola, no hay nadie. Un miedo se apodera de mi.

- Estarás bien -me digo a mi misma-.

Voy a la habitación y retiro mi traje, y lo cambio por una camisa azul manga larga, y unos pantalones de dormir. Me pongo unos zapatos y voy a la cocina. Decido servirme un poco de agua y me siento en el taburete de la cocina. Hay mucho silencio aquí. Voy de nuevo a la habitación y voy a mi bolso, tomo un poco de dinero, voy al ascensor y salgo en pijamas a comprar un mantecado. Salgo del hotel y observo a ver si hay algún guardia vigilando, no hay nadie, así que voy a una pequeña tienda de helados que se encuentra a unos 5 minutos de allí. Pido un mantecado de vainilla y chispas de chocolate, y me siento en una de las mesas que hay allí. Suspiro. ¿Qué diablos es lo que quiere Lauren? Miro el reloj que se encuentra en la tienda y marca las 10:37 p.m., Derek aún debe estar con Lauren. Un puñado de decepción entra en lo más profundo de mi ser, ¿estarán haciendo algo? ¿a caso desconfío de mi esposo? Un auto que pasa a toda velocidad por la tienda, me saca de mis pensamientos. No le doy importancia y decido comer mi mantecado. Una vez que termino el mantecado, observo otra vez el reloj, esta vez, marca las 11:10 p.m., ¿tanto tiempo llevo aquí sentada? Salgo de la tienda y me dirijo al hotel. Hace mucho frío aquí afuera, por lo que me abrazo a mí misma para entrar en un poco de calor. Una vez entro, voy al ascensor y espero a llegar a mi piso. Una vez que llego, puedo escuchar unos ruidos, entre ellos son unos gritos.

- ¡NO SE PUDO HABER IDO! ¿CÓMO ES POSIBLE?

Eso es lo que puedo escuchar. Me acerco a la puerta principal de la suite y los ruidos provienen de ahí. Cuando estoy a punto de mover la manija de la puerta, el sonido de una copa rompiéndose en el suelo me sobresalta.

- Derek -suspiro para mis adentros-.

No lo pienso más y abro la puerta. El equipo de seguridad de Derek me observa.

- Señor, está aquí -responde Bruce sin despegar la vista de mi-.

Derek se encuentra sentado en el sofá. Cuando escucha las palabras de Bruce, se levanta de un golpe del sofá y camina hacia mi. Su mirada se ablanda un poco pero sé que sigue molesto. Estoy en problemas.