Capitulo 4

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Evitaré toda la palabrería de cuando me despierto y tomo mi desayuno. La cosa se pone buena de ahora en adelante. Let's go to the good stuff.

Mientras voy hacia mi cubículo, no puedo evitar llamar la atención de algunas compañeras de trabajo las cuales comienzan a hablar entre si. Al parecer, muchas chicas que mueren por su jefe, me vieron ayer hablando con el señor Smith, lo que provocó que esas miradas, fueran donde mí. Eso hizo que me pusiera más nerviosa de lo normal y sentía cómo mis mejillas se iban enrojeciendo, pero cuando llego a mi cubículo, comienzo a trabajar y el sentimiento se va. Luego de unos minutos me llega un nuevo correo, decido abrirlo y es de mi jefe.

De: Derek Smith

Para: Annie Collins

Hora: 8:52 a.m.

Asunto: Inicio de trabajo.

Buenos días:

Necesito que me ayudes en algunos asuntos. Necesito que llames al señor Frederick y le digas que la venta quedó anulada por no pagar a tiempo (#0087), necesito que llames al señor Rodríguez y le digas que la reunión se tiene que hacer un poco más tarde, a eso de las 10:30 a.m. (#0055), y necesito que llames al señor Corniff y le preguntes qué opina acerca de la venta que le dejé en mente, él te explicará (#0091)

Necesito que hagas esto pronto.

Derek Smith, jefe de "Internacional Services Inc."

De: Annie Collins

Para: Derek Smith

Hora: 8:56 a.m.

Asunto: Inicio de trabajo.

He recibido su e-mail y cumpliré con lo que debo lo más pronto posible.

Annie Collins, secretaria de "Internacional Services Inc."

Luego de hacer todo lo que tenía que hacer, voy por un café latte a la cafetería y vuelvo a mi lugar de trabajo.

- Hola -dice un chico asomándose por mi cubículo-.

- Hola -respondo sonriente-.

- He escuchado mucho de ti, ¿eres la nueva no? La del cubículo 69.

- Si, soy nueva, la del cubículo 69 -digo con una pequeña sonrisa-.

- Y también la chica que no deja de llamar la atención -dice en una sonrisa y yo frunzo el ceño-,  Mucho gusto, soy tu compañero, del cubículo número 71, si necesitas algo, no dudes en pasarte por allí.

- Gracias -digo con una sonrisa-.

- De hecho, iré a la cafetería a comer algo, si quieres me puedes acompañar... -dijo sonriendo-.

- No lo sé, ya tengo un café en mano.

- No importa, puedes picar algo de comer y listo, puede ser al medio día... vamos que solo quiero una amistad... soy gay.

Suelto una carcajada.

- No dije que pensaba otra cosa -ruedo los ojos-, ¿a qué hora piensas ir?

- A las 11:00 a.m.

- Vale, nos veremos allí.

Llega la hora de almuerzo y observo mi reloj, son las 11:00 a.m. Así que decido comenzar a recoger mis cosas pero el señor Smith aparece en mi cubículo.

- Esto solo tomará unos segundos señorita Collins, necesito que llene estos papeles -dice colocando unos papeles sobre mi escritorio-, sé que tienes planes, pero esto es sobre el código de salud de la empresa y esas cosas.

- Vale -respondo-, ¿y cómo sabe que tengo planes? -digo luego de unos minutos-.

- Los rumores de las citas corren rápidamente por la empresa.

- ¿Citas? -pregunto funcionado el ceño-, no es una cita, solo acompañaré a un compañero por un poco de comida.

- Pues él lo tomará como una cita... Eso tenlo por seguro -responde-.

No puedo evitar soltar una sonora pequeña carcajada.

- ¿Qué sucede?

- Tengo toda la libertad de ir con quien desee a almorzar, y si tiene alguna duda respecto a "mi cita" vaya y coteje si las cosas que le mencionan son ciertas...

- ¿A qué se refiere? -dice frunciendo el ceño-.

Termino de firmar el último papel y luego de acomodarlos, le tiendo los papeles al señor Smith.

- Mi cita es gay... y mi preferencia sexual es hetero... así que... buen provecho.

Y sin más salgo victoriosa de esa pequeña ¿controversia?

- Hey, aquí estas -dice el chico levantándose de la silla-.

- Si, aquí estoy -digo sonriendo-.

- Ven, vamos a sentarnos... Por cierto, no me presenté con mi nombre, soy Harold James, pero mejor dime James -dice tendiéndome la mano- mucho gusto.

- Annie, Annie Collins -digo aceptando su mano- mucho gusto también.

- Buscaré nuestra comida -dice el chico-.

- Claro, aquí te espero -respondo-.

Cuando James llega con la comida, le explico lo que sucedió con el jefe y se echa a reír.

- No muchos saben mi identidad, así que... -se encoge de hombros-. Me dio mucha gracia eso.

Reímos juntos y seguimos compartiendo y conociéndonos. Observo las paredes de cristal que rodean la cafetería que queda dentro del mismo edificio en el que trabajo y me encuentro con su rostro, con el rostro de Derek Smith... Me quedo observándolo fijamente a sus ojos hasta que James llama mi atención.

- ¿Estás bien? -dice mirando a la dirección a la que miraba-.

- Sí lo siento... -digo sonriendo-, ¿decías?

James comienza a hablar y sin darme cuenta comienzo a buscar a Smith con la mirada pero ya no estaba y algo se me hacía raro.

¿Qué onda con este tipo?

Enamorada de... ¿Mi jefe?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora