ヅ E N E M I S I Ó N
◡̈ ;; ❛ El matrimonio Kang se encuentra en decadencia. Taehyun era distante, frío y no hacía más que despreciar al hombre al que le había jurado amor eterno. Por el contrario, Beomgyu era afectuoso y servicial con su esposo, pe...
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— Buenos días, mi vida — saludó el menor, yendo a abrazar a su lindo esposo que cortaba fruta para el desayuno — dame un beso.
— No — fríamente, el mayor se negó.
— Por favor~ — suplicó, juntando sus manos y mirando fijamente a su esposo con un puchero.
— Ash — el mayor dejó un beso veloz y seco en los labios del más alto — ahí está.
A pesar de haberle parecido muy distante, el menor aceptó el beso con una sonrisa — gracias, bebé.
El menor abrazó a su esposo por la espalda (ya estaba acostumbrado, Beomgyu ni siquiera lo miraba) y le apoyó su cabeza en el hombro.
— Deja de ser tan asfixiante — el peligris se negó a ello, pues no quería despegarse de su pareja — bueno, ¿vas a querer jugo de naranja?
— Sí, por favor, amor — el mayor asintió, mientras fruncía el ceño porque su marido le daba múltiples besos en la mejilla derecha — mío, mío, mío.
— No soy tuyo — el peligris sonrió y asintió.
— Mío — recalcando cada letra, el más alto declaró mientras jugaba con el cabello negro y largo de su pareja, usando la mano derecha para esto — solo mío.
— Basta — el mayor terminó de acomodar el desayuno en los dos platos y suspiró — ¿me puedes soltar?
— No~, no quiero — el más bajo, tratando de esconder su sonrisa, se soltó del agarre y se dirigió hacia la jarra para poder servir el jugo de naranja — ¿tomarás café, verdad?
— Sí, ¿por qué? — el menor sonrió y se acercó a la cafetera, no sin antes dejar un beso en la mejilla de su esposo.
— Entonces te ayudaré con eso, ¿sí? — el pelinegro asintió y agradeció, mientras se acercaba a la mesa para poder ordenar todo.
Colocó una cesta de pan en el centro de la mesa, seguido del pote de mantequilla. El menor, después de un momento, terminó el café y lo dejó en la mesa, viendo a su marido ordenar las cosas allí y sentarse en su silla.
— Gracias por el desayuno, mi vida — Kang dejó un beso en la frente de Choi, viéndolo asentir con desinterés y empezar a comer del desayuno.
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