Capítulo 2

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Tal parece que ya no podría ser más surrealista de lo que pudo ser. Si alguien pasará por lo mismo, por coherencia estaría igual de sorprendido/ida por lo que ocurrió. Muchos aseguran que los fantasmas son solo rumores o mitos que es difícil poder demostrar su existencia, pero también es fácil sacar algo de provecho en esto de crear historias basadas en ello, ya sea películas, libros, series o hasta alguna clase de anécdota que haya pasado en dicho lugar.

Annie llegó a tal punto del que ya no sabía si todo esto era porque jugo con algo que nunca debió de ser tocado o porque si había hecho algo malo en su vida como para que estuviera pasando por esto.

— ¿Y bien? ¿No piensas decir algo?— Preguntó el chico confundido.

— Déjame ver si entendí... T-tú eres un f-fantasma. Eres ese famoso espíritu de la Tragedia o como se llame... ¿N-no es así?.

— Exacto.— Le guiño el ojo en aprueba de su respuesta mientras mostraba el pulgar hacia arriba.— Yo soy aquel del que todos temen y...

— Por favor dime que esto es una broma de mal gusto. Claro eso debe ser, o tal vez estoy soñando. Dime, ¿Esto es un sueño?

— Por supuesto que no.— Arrugó el entrecejo el rubio.

Todavía con la duda en la cabeza, Annie se acercó hasta él, levantando su brazo y en un intento de querer tocar el rostro del chico con su dedo índice solo obtuvo en atravesar su cara con el dedo. Eso generó que se sorprendiera un poco más la rubia, dándose cuenta de la verdad.

Esto estaba pasando, en realidad nada de eso era creado por su imaginación y aquel espíritu que estaba con ella en el baño era real.

Mierda, ¿Por qué?

— Sé que esto es algo repentino, pero esto está pasando. Te lo voy a explicar.— Se aclaró la garganta un poco mientras sacaba un papel. Lo desdobló y empezó a leer— Yo soy uno de los grandes espíritus que habitan en esta escuela, con la capacidad de poder concedir cualquier cosa a aquel desdi-... Digo, cualquier afortunado que este interesado por mi poder. Mi propósito es proteger cualquier orden y peligro que presente el colegio por cualquier causa natural, desorden colectivo, bla,bla, bla.
Mejor nos saltamos todo eso, no creo que estés interesada en escuchar las 70 clausulas que tiene todo este papeleo.

— ¿Puedo hacerte una pregunta?— Dijo Annie.

— Por supuesto.— Le contesto con una sonrisa.

— ¿Por qué estás aquí? Digo, ¿Por qué te presentas aquí, en este momento, conmigo?

— ¿Qué acaso no es tan obvio? Porque tú me invocaste. Tú misma dijiste que querías saber quién era y pues... Aquí me tienes

— Se suponía que esto no debería de estar sucediendo. Era más real que supuestamente Historia estuviera interesada en Reiner que esto— Dijo Annie

— No sé quién es él, así que voy a fingir que te entiendo.— Ríe.— Bueno, ya que estoy aquí sería excelente que te conceda tu deseo o lo que piensas pedir.

— ¿Deseo?

— Si, por eso me presenté. ¿Qué no escuchaste los rumores de mí?

— Preferiría no escucharlos, ya quedo claro eso.

No sabía con exactitud si Annie podía entender lo que le estaba diciendo aquel ser. Todo eso la estaba abrumando más, no sabía si cualquier persona ya había pasado por algo similar— que era muy probable que no— como para decirle: que hacer en caso de que un fantasma se te haya aparecido luego de jugar en querer ver uno. Si, se veía mejor en su mente.

Two Worlds Connected- (Aruannie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora