Más allá de querer, es amar Taekook/Vkook

¡Tierra trágame!

— ¿Taehyung, a dónde vamos? —pregunté con calma ya que estábamos en la ciudad y no a las afueras.

—Te voy a llevar a un lugar donde vamos a estar seguros —respondió con las manos en el volante.

— ¿Qué lugar? —volví a preguntar mientras miraba a través del vidrio.

—Un motel —mis ojos se abrieron tanto que parecía que se me iban a salir.

—¡¿Qué?! —grité.

Mire que salto en su sitio y freno para mirarme.

—No es lo tú piensas —trato de explicar.

—Ay, si como no —respondí girando los ojos.

—Lo prometo, lo que pasa es que ese es un lugar seguro donde nadie nos va molestar, pero te juro que no te voy a poner un dedo encima —dijo con ¿preocupación? Lo mire tratando de encontrar algo de mentira en sus ojos o en sus gestos pero al parecer decía la verdad. Me rejale y lo mire.

—Te creo —respondí más calmado.

Taehyung sonrió y siguió conduciendo.

— ¿Te puedo preguntar algo? —desvié mi mirada hacia mis zapatos.

Después de estar minutos sin una respuesta alce mi vista encontrando un Taehyung completamente serio, la mandíbula apretada, unos ojos que transmitían escalofríos y las manos apretadas en el volante mientras conducía.

Creé un debate mental de si debía hablarle o no, Taehyung se veía muy enojado y no lo conozco así que no sé cuál podría ser su reacción, además que se ve capaz de asesinarte con ese semblande oscuro. Decidí no abrir la boca y mantenerme completamente callado incluso ni me moví, todo el tiempo estuve rígido en el asiento.

Cuando llegamos me baje del automóvil al mismo tiempo que Taehyung. Mire que aún tenía ese semblante sombrío. Taehyung acomodo su camisa y entro en el motel, rápidamente lo seguí y él le dijo algo a la empleada que estaba en la recepción atendiendo.

Cuando vi que comenzó a caminar en dirección a un pasillo lo seguí sin decir nada. Se siente tan incómodo, aquí es cuando digo "tierra trágame" o "ojalá no haber nacido".

Salí de mis pensamientos cuando sentí una mano agarrando mi brazo y jalándome dentro de una habitación, casi grito si no fuera porque vi a Taehyung.

—Me asustaste —dije con una mano en el pecho. Taehyung me ignoro completamente y solo alzo las cejas con desinterés e hizo una mueca de aburrimiento, esa acción solo me hizo sentir completamente avergonzado. Rápidamente cambie de tema —. ¿Y para qué me trajiste aquí? —pregunté mientras en mis adentros deseaba desaparecer.

—Quería pasar un momento contigo, ya sabes hablar y conocernos —dijo mientras caminaba en dirección a una cama y se quitaba la camisa. Mi reacción no fue nada más que quedar totalmente rígido en mi sitio.

—Bueno pues... me gustaría saber en que trabajas —me miro completamente serio. Maldición, ¿y ahora que se supone que le diga? Mi cerebro se quedó totalmente en blanco —. Bueno ¿Y en qué trabajas? —insistió mientras me miraba con toda la atención del mundo, de seguro ya lo sabe y por eso me está mirando con esa cara.

—Bueno... yo pues... y-yo la verdad tengo muchos trabajos, vivo del día a día, hay veces que trabajo como niñero, otras como mesero de medio tiempo y así —respondí mientras en mis adentros rogaba para que Taehyung me crea.

Mire su cara a la espera de alguna reacción de su parte, pero su cara no tenía ninguna expresión — ¿Taehyung? —pregunté no muy convencido.

—Que bueno que ya no vas a llevar esa vida, ahora que aceptaste casarte conmigo vas a vivir como un rey —dijo para después acercarse. No pude evitar mirar su pecho desnudo.

Desvié la mirada hacia el piso, al instante sentí como una mano pasaba por mi hombro, hacia un leve apretón y me acercaba a su pecho, lo siguiente que sentí fue su mano en mi cintura, alce la vista encontrándome con un Taehyung que me veía un tanto raro.

— ¿Por qué me miras así? —pregunté con curiosidad.

—No es nada, solo que... vamos a ser muy felices juntos —me soltó y al segundo acerco su rostro al mío en un beso, seguí el beso mientras mis manos fueron en dirección a su cabello, donde metí mis manos entre sus cabellos.

Al instante sentí como su mano comenzó a acariciar mi abdomen. Dios, este hombre no se cansa ya le he dicho que no quiero nada sexual y lo primero que hace al llegar a este lugar es quitarse la camisa y venir a besarme.

Pare el beso y me separe.

—Dijiste que ibas a respetar mi decisión de no tener sexo por ahora —dije mientras mis manos acariciaban sus hombros grandes y musculosos.

—Solo te estoy besando, ¿o ahora también me vas a prohibir besarte? —me tomo de la cintura con fuerza haciendo que de manera automática bajara mi mirada a sus manos que me agarraron y no pude evitar mirar eso que se escondía entre sus pantalones, Dios mío ¿acaso eso es una erección? Ya no podía hacerme él que no había visto nada porque mi cara había expresado todo, alce mi mirada sin saber que hacer, retrocedí unos pasos pero su firme agarre me impidió retroceder más.

Mire como se acercó y comenzó a besar mi cuello. Dios, está tan cerca que puedo sentir su erección en mi pierna.

—Taehyung, para —dije con nerviosismo. No me hizo caso.

—Relájate, no te voy hacer daño. ¿Aceptaste casarte conmigo pero no confías en mí? —preguntó con evidente sarcasmo.

—Te dije que no quiero —intente retroceder de nuevo pero su mano apretó mi cadera con tanta fuerza que dolió.

—Y yo ya te dije que todavía no va pasar nada —lo dijo con un tono de voz entre molesto e irritado, también sentí como apretó mi cadera con tanta fuerza que me hizo soltar un chillido de dolor y querer huir de sus garras.

—Taehyung, por favor suéltame —suplique y a la vez trataba de hacer que me suelte, al ver que no cedía y que se hacía más fuerte me removí como gusano intentando liberarme. Al momento sentí como me soltaba de golpe y se separaba con brusquedad mientras soltaba un gritó de frustración.

—¡Ya cállate! —gritó con desesperación mientras pasaba sus manos por su rostro en señal de frustración —. ¡Ya te he dicho qué no te voy hacer nada! Carajo, si tanto desconfías de mí ¿para qué aceptaste casarte conmigo? —me miro con unos ojos molestos, mire como se acercó amenazante —. Dime Jungkook, ¿acaso lo hiciste por plata? —me tomo de los hombros con fuerza y me sacudió, justo antes de que me diera algo por no saber que hacer alguien toco la puerta de la habitación con intensidad.

—¡Patrón, nos cayó la tomba! —gritó alguien detrás de la puerta.

[CAPÍTULO CORREGIDO].

De nuevo quiero decir que si ven algún error de ortografía me avisen. A las pocas personas que ven esta historia les quiero agradecer.