[Bajo La Presión Del Mar] {Chelby}

Un Chapuzón En El Pasado

Hace más de un año...

-Chelsea se encontraba en su primera noche en aquella jaula, había pasado un día desde su captura, estaba furiosa debido a su derrota contra esas tres krakens gigantes, ¡casi pudo saborear la victoria!, si tan solo no hubiera dejado a Ruby viva, ella hubiera podido acabar con Agatha Gillman usando el tridente de Oceanus, el cual ella había codiciado tanto, hasta el punto de manipular a Ruby para obtenerlo, y luego destronar a la reina de los krakens de una vez por todas y por fin gobernar los siete mares, pero eso no pasó, ella fue derrotada y el tridente estaba destruido en varios pedazos en lo más profundo del océano. Ya no había nada que hacer, ahora estaba en aquella jaula, como si fuera un animal. Aunque no niega que estuvo mordiendo los barrotes, intentando cortarla con sus garras de sirena para lograr abrirla, aún así todo fue inútil, ni un rasguño. La pelirroja escucharía como unos pasos se acercaban hacia el barco, sonaban como unos tacones de mujer.

—Quien quiera que seas...no estoy de humor para cometer homicidio, pero si te acercas más a lo mejor agregó otro crimen a mi expediente. «Soltó Chelsea en tono burlón».

- En cuanto dijo eso, la risa de una mujer se hizo oír mientras que esta misma salía de las sombras, mostrándose que era la mismísima Agatha Gillman quien le hacía su primera visita a la sirenita cautiva. Cosa que no le hizo mucha gracia a Chelsea, pero prefería mantener la compostura enfrente de ella a verse vulnerable ante su enemiga.

—Es increíble que aun estando en el estado que estas, te sigas creyendo la gran cosa, no te parece eso gracioso?~. «Con esas palabras logro obtener un gruñido de molestia por parte de la sirena». Vamos Nerissa, ¿Por qué no te ríes?, antes lo estabas haciendo muy bien cuando nos contabas a todos cómo acabarías con los krakens, con tu poderoso tridente que habías obtenido tras haber engañado y manipulado a mi hija, que por cierto, ¿Dónde está?, ¡Oh!, ¡Es verdad!, ¡Que lo hemos destruido en pedazos!...cielos, se me olvidaba, perdóname~. «Comentó Agatha con cierto tono de soberbia».

-Lo único que pudo hacer Chelsea fue aferrarse con fuerza a los barrotes de su jaula mientras apretaba los dientes en un intento de no perder los estribos ante las burlas que recibía de la mujer que más odiaba en el mundo. Aun así, ella alzó la mirada y relajo su rostro, miró a Agatha con una sonrisa relajada en su rostro mientras se ponía cómoda en su jaula y le soltaba unas palabras.

—Es increíble que estés aquí ahora mismo, desperdiciando mi valioso tiempo en escuchar las tonterías que salen de tu boca. «Comento Chelsea mientras jugaba con su pelo». ¿Acaso viniste a terminar el trabajo o algo así?, ¿o ahora serás la guardia de mi celda?. Solo pregunto para asegurarme de que no tienes a nadie más a quien joderle la existencia o algo así.

-En cuanto dijo eso, Agatha le soltó un puñetazo a la jaula de la pelirroja, sacudiéndola y haciendo que por poco y se cayese, para Chelsea era una pequeña victoria poder hacer que la kraken adulta perdiera los estribos de esa manera.