Capitulo 12

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Helena

—¿Que paso hija? — me pregunta mi madre confundida —¿Por qué te quedaste paralizada?

—No es nada, solo… — pienso en una mentira —Me estaba acordando que mi jefe me pidió que este mañana a la tarde en la oficina.

Mi corazón se parte en dos cuando veo la reacción de mi madre.

—¿No alcanzarás a ver a tu madre? — dice con tristeza.

—Prometo que vendré a verlo apenas pueda — sonrio evitando que me carcoma la tristeza.

—Al menos… — toma el celular en sus manos —Podrias llamarlo. Está en su hora de descanso y le gusta hacer videollamada.

Me entrega su teléfono celular, con el contacto de mi papá en la pantalla.

—Llamalo — me sonríe asiosa.

Hacia tanto que no veía a mi padre. El nudo en mi garganta volví a apoderarse de mí, y no alcanzaba a ver el botón de "videollamada" por mis ojos llorosos.

Verlo de lejos y no abrazarlo, se que será una angustia enorme para mí, pero la vida me enseñó a ser fuerte y está era una de las cosas que debía enfrentar.

Presionó aquel botón y mi rostro inchado se refleja en la cámara del celular, junto a un "conectando".

Mi corazón da un vuelco cuando mi padre contesta y veo su rostro paralizado al otro lado del teléfono.

—Hola papá — lo saludo.

Puedo ver a lo lejos que mi mamá no para de llorar en silencio.

—He… He… ¡Helena! — comienza reír de la emoción.

—¿Como estás? — mis lágrimas caen sobre el cristal de la pantalla.

—Emocionado de verte al fin — se resfriega los ojos con su mano libre.

—Yo también estoy muy emocionada — agachó la cabeza —Y triste de que estés allá, y no aquí conmigo y mamá.

—No sabía que irías hija mia. De haberlo sabido hubiera cancelado todo.

—¿Como ibas a hacerlo? — sonrió —No puedes cancelar algo importante como eso.

—Nada es más importante que mi princesa — su puchero y sus ojos llorosos me rompen en pedazos.

—Te extraño tanto papá — no puedo evitar llorar frente a el —Te necesito conmigo.

—Pronto estaremos juntos mi princesa — toma aire por el llanto —Yo voy a regresar y te abrazaré muy, muy fuerte, como cuando eras pequeña.

—Ahora tengo que volver a España — cierro los ojos intentando calmarme —Pero vendré pronto y vamos a estar juntos.

—Espero que sea así hija — me tira un beso —Cuidate mucho.

—Tu igual papá — imitó su acción —Te quiero.

—Te quiero mi princesa.

Le devuelvo el celular a mi madre y se despiden con todo el amor que se tienen.

La despedida con mi madre fue tan dolorosa como la imaginé, sentía que nos estábamos abrazando como si ya no nos volviéramos a ver. Y tenía miedo de que realmente fuera así.

—Se fuerte — me toma de la mano —Y no te dejes vencer por nada del mundo.

Fue lo último que me dijo al despedirnos y me dejó con la piel helada, sin saber por qué.

MUÑECA DE LA MAFIA #2 || Steve RogersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora