Disclaimer: Los personajes de Naruto son propiedad de Kishimoto.
Summary: A Sasuke le gusta el cabello de Hinata.
SasuHina Month Día 8
xxx
Jugando con el cabello
Desde que se casaron hace ya 3 años, tenían la tradición de acurrucarse en el sofá después de la cena. Y esa noche no fue la excepción. Una vez terminada la comida y limpiado la cocina, Sasuke y Hinata se dirigieron a la sala de estar para acurrucarse juntos y pasar el rato. Estaban tranquilamente viendo un programa de televisión, estúpidamente romántico en opinión de Sasuke, que le gustaba a Hinata.
Un poco cansado de ver a unos idiotas melosos en la televisión, el Uchiha comenzó a jugar distraídamente con la larga cabellera de su esposa. ¡Ah! Como le gustaba pasar sus dedos por las largas y sedosas hebras de cabello de Hinata.
Estaba tan inmerso en jugar con el cabello de su esposa, que apenas registro que ella le estaba hablando.
—¡Eh! —exclamó con ligera confusión—. ¿Qué dijiste? —él preguntó.
Hinata sonrió divertida, era muy raro ver a Sasuke distraído o confundido, pero verlo con esos dos estados de ánimo simultáneamente, eso ya era algo inaudito.
—Te decía que tengo el cabello algo maltratado —ella mencionó—. Y que p-por eso es que he estado pensando en cortarlo.
Espera, ¿él había oído mal o ella realmente había dicho eso? El Uchiha abrió los ojos en shock. Por qué ella querría siquiera cortarse el cabello... Es que acaso no notaba lo mucho que a él le gustaba que tuviera el cabello largo, es más, le encantaba tal como lo tenía y le quedaba bien.
—¿Cortarlo? —le consultó solo asegurarse de que ella había dicho tal blasfemia.
—B-bueno, sí —ella respondió con suavidad—. Aparte de que no sería la primera vez —pensativa, se puso un dedo en la barbilla—. Durante nuestra época en la Academia y cuando éramos genin, yo solía tener el cabello corto.
El Uchiha hizo memoria y trato de recordar como lucia ella durante sus años en la Academia Ninja y como genin. A su mente vino la imagen de una pequeña y tímida niña de cabello corto, ridículamente corto, desdeñosamente corto.
—Sí, lo recuerdo —él comentó—. ¿Y piensas hacerte ese mismo corte de cabello? —inquirió por mera formalidad, sin embargo, no quería saber la respuesta a aquella pregunta.
La Hyūga sentía curiosidad ante las consultas de su esposo. Además, ¿era impresión de ella o Sasuke realmente parecía estar ofendido y un poco horrorizado con la idea de que ella llevara el cabello corto? Sacudió la cabeza para alejar esos tontos pensamientos. Él era Uchiha Sasuke, ciertamente, no le importaría algo tan banal como el largo de su cabello, ¿verdad?
—P-pero aún no sé cómo o cuánto cortar —expresó—. Estuve p-pensando en ir con Ino-san y Sakura-san para que e-ellas me aconsejaran.
Sasuke estaba perdido en sus pensamientos, por más que intentaba, no lograba hacerse a la idea de que ya no podría jugar más con su largo cabello. Ese no era un cambio que él quisiera, y no era porque prefería el cabello largo en las chicas, no, era más porque no quería cambios en su vida. Desde que su clan fue injustamente masacrado, su vida había caído en un infinito espiral de cambios e incertidumbres. Y fue así hasta que se volvió cercano a Hinata, ella representaba una constante en su vida y no deseaba alterar el estatus quo que había logrado obtener.
La Hyūga vio como el Uchiha fruncía cada vez más el ceño. Incluso se atrevería a decir que él lucía molesto, aunque no podría entender el porqué de aquello.
—¿Te encuentras bien, Sasuke-kun?
Sasuke asintió mecánicamente en respuesta. No hablaron más del asunto aquella noche y solo se dedicaron a ver ociosamente la televisión. Cuando fue la hora de dormir, ambos subieron a su habitación en silencio. Tal nivel de mutismo le pareció extraño a Hinata, pero Sasuke no era un hablador, por lo que no le dio mucha importancia. Realizaron sus rutinas nocturnas y se metieron en la gran cama.
—Buenas noches, Sasuke-kun —se inclinó hacia él para darle un beso en la mejilla.
—Hmp... —fue la escueta réplica de Sasuke.
Espero hasta que ella se durmiera para, nuevamente, comenzar a jugar con su cabello. Pese a que no era su lugar decidir que podía o no hacer Hinata con su cuerpo o aspecto físico, él no permitiría que ella se cortara su larga cabellera. La decisión ya había sido tomada. Y si llegase a ser necesario, iría con todos los peluqueros de la aldea e incluso barberos, porque uno nunca sabe, y los amenazaría para que no atendieran a su esposa. Incluso estaba dispuesto a volver cenizas todas las peluquerías y centros de estética de Konoha. Hasta se rebajaría e iría con Ino y Sakura para que ellas le aconsejaran que no se hiciera tal cambio de look. Bueno, en realidad no iría donde la rubia y la pelirosa, ya que eran unas chismosas y él no quería que toda Konohagakure supiera de sobre esto, tenía una reputación que mantener.
Se dio vueltas en la cama un par de veces, tenía que hacer algo y tendría que hacerlo ahora. Suavemente, sacudió a Hinata por el hombro para intentar despertarla. Ella se volteó hacia él con los ojos medios abiertos.
—¿Q-qué pasa Sasuke-kun? —dijo con voz adormilada—. ¿Tuviste un mal sueño?
—No lo hagas —expresó seriamente.
Ahora totalmente despierta, Hinata estaba completamente confundida, qué era lo que no debía de hacer. Definitivamente, algo andaba mal con Sasuke.
—Has estado actuando extraño esta noche —mencionó con la voz llena de preocupación—. ¿T-te sucedió algo? P-puedes decirme lo que sea que te p-preocupe.
—No cortes tu cabello —la Hyūga lo miro como si de repente se hubiese vuelto loco. Si tuviera que ser honesto, hacer una rabieta solo porque su esposa estaba pensando en hacerse un corte nuevo, bueno, era una absoluta locura, incluso un tanto fetichista de su parte.
—¿Era eso? —ella preguntó divertida—. Y yo que estaba suponiendo lo peor —comenzó a reír.
—Hmp, no es gracioso —él dijo, sus orejas ardían por la vergüenza—. Es solo que... —hizo una pausa, no quería admitir ese gusto culposo—. Me gusta jugar con tu cabello —termino en un susurro.
Hinata sintió que la embargaba la ternura, ver a Sasuke sonrojado y admitiendo que le gustaba hacer algo tan inocente como jugar con el cabello fue algo demasiado lindo. Conmovida, ella se lanzó hacia él para darle un enorme abrazo.
—De acuerdo —proclamo—. No cortaré mi cabello. Aunque, ¿tal vez podría cortar solo las puntas? —ella ofreció
Sasuke lo medito por un momento.
—Tsk, bien —accedió a regañadientes— Pero solo las puntas.
Con el problema solucionado, ambos se acurrucaron para finalmente poder dormir. Mañana sería un nuevo día para que Sasuke pudiera seguir jugando con el cabello de Hinata.
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Notas: Este salió un poco más rápido que el anterior, parece que mi bloqueo de escritor esta desapareciendo. Realmente agradezco todos los comentarios que me han dejado en estos oneshot, por un momento pensé en dejar esto hasta aquí, pero sus comentarios me daban ánimos para seguir con los oneshots. Aun quedan varios, así que nos estaremos leyendo.
Naoko Ichigo
