Capítulo 8

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Narrador Omnisciente

Frollo salió de la iglesia y cerró la puerta detrás de él. Los ojos de Cedric se abrieron como platos ante sus palabras y corrió hacia la puerta y la abrió para ver soldados afuera.

XX: Órdenes de Frollo: Un guardia en cada puerta

Dijo un soldado.

Cedric cerró la puerta con frustración y se deslizó hasta el suelo con las rodillas contra el pecho. Su cabra se acercó y se sentó a su lado.

Cedric: No te preocupes Djali. Si Frollo cree que puede mantenernos aquí, está equivocado

Arcediano: No actúes precipitadamente, hijo mío

Aconsejó

Arcediano: Creaste un gran revuelo en el festival. No sería prudente despertar aún más la ira de Frollo

Cedric: Viste lo que hizo ahí afuera, dejando que la multitud torturara a ese pobre niño e ignorando el grito de ayuda de esa pobre niña

Se puso de pie y caminó con frustración.

Cedric: ¡Pensé que, si una sola persona pudiera enfrentarse a él, entonces-!

Dejó escapar un suspiro.

Cedric: ¿Qué tienen en contra de las personas que son diferentes, de todos modos?

Arcediano: No puedes corregir todos los errores de este mundo por ti mismo

Cedric: Bueno, nadie por ahí va a ayudar, eso es seguro

Arcediano: Bueno, quizás haya alguien aquí que pueda.

Le dijo el Arcediano antes de alejarse.

Los pensamientos de Cedric inmediatamente se dirigieron a la joven y la buscó a su alrededor, pero no la vio por ninguna parte. Debió haberse escabullido cuando él estaba hablando con el archidiácono.

Cedric: ¿Hola? ¿Adónde has ido?.... ¿Por qué sigues huyendo de mí, ángel?

Sonrió con picardía.

Cedric: Bueno, si no quieres salir, está bien. Estaré atrapada aquí por un tiempo. Eventualmente te encontraré, y cuando lo haga, ¿finalmente me darás tu nombre?

No obtuvo respuesta.

Cedric: No estoy escuchando un 'no'

Él sonrió.

Cedric miró a su alrededor y notó que todas las personas oraban y su sonrisa se desvaneció. Sus ojos se elevaron hacia una estatua y suspiró.

Pongan la canción

Cedric:

Creo que no querrás oírme
por yo gitano ser

Se acercó lentamente a la estatua.

Creo que no sabré implorarte
No te puedo ver
Siempre me hallo imaginada
No vivo con virtud
Veo tu cara y me pregunto
Lo que fuiste acaso tú

Se alejó de la estatua y caminó por los pasillos de la iglesia.

Dios les ayude
Viven con fe, clemencia
Te piden
Amor quieren ver

Mi Angel De Notre DameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora