Él no lo sabe, pero va a ser mi esposo

Capítulo 12. Vamos a Casarnos

-¿Es definitivo? -preguntó mientras leía el resultado una y otra vez.

-Si, es la prueba más fiel.

Izuku levantó la mirada, Denki le sonreía, miró a su costado, Gogo estaba completamente en blanco.

-Un bebé... -dijo -¿estás esperando... Un bebé?

-Desde hace casi un mes -respondió Denki.

Cuando Izuku volvió a verlo su mirada cambió ligeramente.

Las dudas le llegaron una tras otra, todas al mismo tiempo. Un bebé. Estaba embarazado. Iba a tener un bebé... De Katsuki.

"¿Cómo reaccionaria él? ¿No pensara que es muy pronto?" pensó.

"Todavía ni nos casamos. ¿Qué hay de sus padres? Ellos no lo saben aún, ¿qué va a decir mi padre? Se va a querer morir. ¿Y el trabajo? Tendré que tomar licencia y no llevo ni un año trabajando. ¿Cómo será? ¿Puedo con esto? No sé si estoy listo para esto, ¿qué tal si no me quiere? ¿Y si me odia? Hay tantas cosas que arreglar cuando un bebé viene al mundo, ropa, comida, pañales y cuando comience a ir a la escuela ¿podré seguir trabajando? ¿Katsuki me pedirá que deje el trabajo? Así, y ¿ya? ¿Esa será mi vida? ¿De verdad puedo con esto?"

Volvió a la realidad cuando Denki le tomó del rostro. Miró directamente los ojos ámbar del rubio que le sonreía con calidez.

-Sé que esto da miedo, sé que es difícil, las cosas cambiarán pero... Izuku, no estás solo en esto.

Dejó de contener la respiración y suspiró. Era cierto.

"No estoy solo, Katsuki estará conmigo"

Entonces devolvió la sonrisa.

-Además no es la única alternativa, pero deberías pensar con calma qué es lo que quieres y conversar con Katsuki.

Izuku abrió los ojos al entender a lo que se refería. Ser consciente de las opciones le dio miedo, él no podría no querer a ese bebé aunque estuviera asustado. Entonces las palabras de Katsuki le vinieron a la mente.

"Mientras sean tus hijos, serán perfectos"

Suspiró una vez más. -Debo decírselo a Kacchan.

-Pero... lo tendrás ¿cierto?

Preguntó Gogo algo tembloroso. Cuando Izuku se volteó para mirarlo pudo ver que además de la sorpresa en sus ojos había un brillo particular, diferente. Sonrió.

-Por supuesto, no podría no quererlo.

Entonces Gogo se puso en pie y lo levantó en un abrazo muy fuerte.

-Estoy feliz -le dijo al oído -Izuku, voy a ser tío.

-Lo dices como si me estuvieras avisando.

Las risas inundaron la estancia.

-Tengo que hacerte una receta y una cita, debes comenzar control prenatal ahora que sabemos de esto, sobre todo debes dejar de tomar los anticonceptivos. Tienes que comenzar a cuidarte, el primer trimestre es de los más riesgos, así que no te excedas ¿de acuerdo?

Izuku asintió a cada una de las instrucciones de Denki, la alegría de sus amigos alrededor por su embarazo le transmitía felicidad.

Cuando salieron de la consulta ya pasaba de medio día.

Feliz como estaba, Gogo lo invitó a almorzar en el centro comercial.

-Te compraré lo que tu quieras elige.

Ver a Gogo así de emocionado lo emocionaba igual. Aunque le ofusco un poco, el alfa lo obligó a entrar en una tienda de artículos para bebés, todo era azul, rosa y amarillo pastel, había peluches, cunas, mantas tan suave que no se lo creía y olía delicioso también. Gogo se quería poner a llorar de tanta ternura.