Cantante a la fuga

CAP. 2

*Narra Zaida*

Desperté al oir mi nombre, al principio pensaba que era mi padre pero no, era la televisión, lo sabía, Luis ya se había enterado de todo, Zaida Márquez, es decir, yo, estaba saliendo en televisión aunque no era la primera vez que salía, esta vez estaba muchísimo más nerviosa. Me levanté de un salto del sillón y me senté abriendo muy bien los oídos para enterarme de todo.

NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA:

-Estamos en Hollywood y Luis Becker, unos de los productores más famosos de Holywood nos acaba de informar de que Zaida Márquez ha desaparecido esta mañana, se le vio por última vez anoche a la 1.00 h de la mañana cuando se fue a su habitación a dormir, esta mañana ya no estaba en su casa y se le está buscando por todas partes ya que esta tarde tiene un importante concierto por sus diecisiete. Por favor les rogamos que si la encuentran llamen al 658905691 y tendrán una recompensa, es muy importante. Conectamos con Luis y la madre de Zaida...

No podía creer que ya me estuvieran buscando, sabía que Luis era capaz de mucho con tal de no perder nada de dinero, pero lo que más me importaba era que me encontrase alguien, podría ser arriesgado y podría acabar muerta después de haberme escapado de allí. Intenté mirar el lado positivo pero en este caso no lo encontraba. Vi el reloj de la cocina que se veía desde el salón y solo eran las 16.00 h, volví a tumbarme en el sillón pero esta vez no conseguía dormir, en ese momento en el que estaba algo perdida en mis pensamientos oí sonar el teléfono.

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2 horas antes en el restaurante

*Narra Amanda*

Ya eran casi las 14.30 h y gracias a esa niña nos iba a caer una buena bronca de Santiago, ahora se ponía todo mucho más complicado, la niñata rubia esa echaría a perder mi relación con Rubén y haría más difíciles nuestros planes con Santiago; Rubén y yo teníamos un negocio algo complicado, hacíamos negocios junto con Santiago, el jefe, y más componentes. Nos dedicábamos a negociar con un banco de estafas con tal de que nosotros ganáramos 50% del dinero del banco, nosotros ideábamos los planes y ellos los estafaban con tal de que solo nosotros ganábamos ese dinero. Nuestro plan más complicado iba a ser este, el resto habían sido fallos de la caja fuerte o empleados que robaban, claro que era mentira, la estafa consistía en que nosotros nos haríamos pasar por ladrones e iríamos a robar el banco sin gente dentro, nuestros únicos testigos serían las cámaras. Este plan era de lo más arriesgado y por eso Rubén iba a necesitar un "secretario" que le protegiera en caso de que pasara algo, estaría con nosotros en la misión e iría con nosotros a todas partes, nadie podía saber el plan, solo Santiago, Rubén, los componentes del banco de estafas y el "secretario"; no estábamos para que una cría arruinara nuestros planes porque si lo hacía perderíamos dinero y la vida.

Llegamos al restaurante que estaba alejado de la ciudad, no iba mucha gente y así nadie descubriría nuestros planes.

-Buenos días Santiago.- dijo Rubén.

-Creo que llegan tarde y no estamos para perder tiempo.- dijo Santiago enfadado. Iba con dos guardaespaldas que trabajaban en el banco de estafas.

-Lo sentimos, no ocurrirá más.- dije yo.

-Bien y contarme, ¿cuál es el plan que tanto dinero nos va a dar?- dijo Santiago sonriendo con malicia.

-Es peligroso pero podremos ganar hasta 1.000.000 de euros con este plan.- dije yo.

-¿Y a qué esperáis a contármelo?- dijo él.

-Esta bien, nosotros y algunos de tus chicos entraremos al banco cuando no haya nadie, es decir, por la noche, cuando esté cerrado y robaremos todo el dinero que haya en la caja fuerte, podemos ganar muchísimo si todo sale a la perfección.- dijo Rubén en tono algo bajo para que nadie lo oyera.

-Perfecto, contadme todos los detalles, pero, mejor vamos a mi despacho que tendremos más intimidad.- dijo Santiago muy contento con la idea.

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Salimos del restaurante, la verdad es que Santiago y sus guardaespaldas llamaban mucho la atención pero a pesar de todo, estaba segura de que nuestro plan funcionaría perfectamente si Zaida no nos lo arruinaba.

Pasaron las horas, eran ya las 16.00 h y nos dirigíamos a casa, ya lo teníamos todo planeado y el día para atracarlo sería pronto.

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Mientras tanto...

*Narra Zaida*

Cogí el teléfono, miré el número pero era privado, no sabía si cogerlo o no, tenía miedo de quien podría ser, iba a descolgar pero justo colgaron. Volví a sentarme en el sillón aún con algo de miedo y entonces oí la puerta.

-¡Zaida!, somos Amanda y yo, ábrenos el pestillo.- dijo una voz a través de la puerta.

Miré por la mirilla y abrí el pestillo, eran Amanda y mi padre.

-Hola Zaida.- dijo Amanda con esa voz tranquila que me sacaba de quicio.

-¿Qué tal has estado?, espero que no hayas salido de casa.- dijo mi padre que ya estaba un poco más tranquilo que la última vez que hablé con él.

-No, no he salido.- dije yo relajada.

-Vale, ahora si te parece nos vamos a ir a comprar ropa más normal para ti y luego, a las 20.00 h iremos a cenar a algún restaurante, ¿vale?- me dijo mi padre, que parecía algo contento con la idea de que yo estuviera aquí.

-De acuerdo, voy a cambiarme.- dije yo, y me fui a mi habitación.

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Me puse mis pantalones largos vaqueros, mi camisa de cuello redondo sin botones y una americana azul cielo de lana que resaltaba mis ojos. Me ricé un poco mis extensiones rubias, pinté mis ojos y mis labios y nos fuimos hacia el centro comercial, no sin mis gafas de sol blancas de marca.

Llegamos allí, había muchísima ropa pero ninguna tan lujosa como la que solía llevar en Hollywood. Me compré muchísimas cosas a las que mi padre me ofreció su dinero para comprarlas y después de 3 horas allí nos fuimos a un restaurante lejano de la ciudad, era muy elegante y cogimos una mesa que ya estaba reservada para nosotros.

-Esto es precioso papá, pero aquí invito yo.- dije sacando mi tarjeta de crédito que me hice hace unos meses en Hollywood.

-No hace falta querida.- dijo él sacando la suya, Amanda miraba a mi padre diciéndole con la mirada que me dejase pagar a mi.

Cenamos de lujo en ese restaurante y tenía unas vistas preciosas a la cuidad iluminada, por supuesto, pagué yo la cena.

Llegamos a casa a las 22.00 h de la noche, me duché y me fui a mi habitación a dormir, mañana sería otro día.

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Hollywood 22.00 h

*Narra Luis (productor)*

Después de estar todo el día buscando a Zaida averiguamos que tendría que estar fuera de la ciudad, no se porque se había ido pero la íbamos a encontrar. Después de haber perdido tantísimo dinero en el concierto por su culpa no le iba a dejar pasar ni una. Era tarde y estaba cansado pero vino mi salvador.

-Hola papá, ¿qué necesitas?- dijo él.

- Tienes una misión, necesito que busques a Zaida Márquez, si es necesario hasta debajo del mar, pero encuéntrala aunque sea lo último que hagas, esa niña pagará caro por lo que ha hecho.- dije yo con una sonrisa, sabía que mi hijo no me fallaría.

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Aquí ha llegado el segundo capítulo, espero que os guste y espero subir esta semana o la próxima nuevos capítulos.

~Alicia💕~