2: Sentimientos a la luz de la Luna

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- Vemos películas? Así nos distraemos de todo.- Dijo la mayor considerando los numerosos momentos incómodos que se habían dado a lo largo del día.
- De acuerdo. Ve poniendo cualquiera, voy al baño.- la menor un poco más relajada dijo rápidamente para luego correr al baño ya que su cuerpo se empezaba a sentir raro y su miembro se había puesto duro sin más.

Al entrar al baño trancó la puerta. Liberó su miembro nerviosa. No quería repetir lo de antes. No quería volver a violar a su vecina. Deseaba que la atracción que sentía por ella fuera recíproca. No quería obligarla a nada. Entonces notó que por la ventana entraba la luz lunar. Entonces sintió a la bestia en su interior. Al contrario que la noche anterior no se comenzó a transformar en el instante. Pero ahora su animal interno corrompía su mente. Entonces junto con un cambio de color de ojos, de marrón a amarillo, su enfoque sobre todo cambió.

Salió del baño con una sonrisa pícara mientras se acomodaba el miembro en la ropa. Se sentó en el sillón junto a la milf notando como sus pezones se habían vuelto duros y que no llevaba ropa interior cubriendo sus pechos debajo de la ropa. Esto la excitó más.

Nelly se sentía excitada. Su vagina chorreaba. Intentaba concentrarse en la película para olvidarse de su estado,  estaba distraída, tanto así que ni siquiera notó la llegada de Sammy, una Sami con ojos amarillos y una sonrisa pícara y confiada, nada propia de ella.

- Nelly...- dijo sin hacer contacto visual con la mayor mientras ponía su mano en uno de los muslos de esta.
- Kyah- soltó un pequeño gritito por la sorpresa. No la había notado. - oh, Sammy,¿ pasa algo?.
- Claro que si. Estamos calientes.- dijo lamiendose los labios. Desde donde estaba lograba olfatear los jugos que manchaban las bragas de la milf.
-Qué?- dijo sorprendida y confundida. la menor nunca había tenido ese comportamiento era demasiado introvertida. Entonces una mano invadió su área púbica comenzando a jugar con su sexo. Rápidamente intento detenerla pero un corrientazo de placer la hizo detenerse. - Ngaaahh~~~.
- Estás empapada- dijo Sammy mirándola mientras mostraba sus ojos y una sonrisa llena de dientes afilados. - Nos deseamos - le robó un beso mientras con la mano libre comenzó a masajear uno de los pechos de la mayor.

La lujuria nubló la mente de ambas. Nelly no lograba pensar. Sammy estaba borracha de poder y lujuria. Quería dominar a la mayor. Necesitaba hacerlo. La iba hacer convertirse en su perrita sumisa.

Los pechos y las caderas de Sammy crecieron lentamente haciendo que su ropa le quedara ajustada. Su miembro rompió sus shorts y bragas haciendo espacio para crecer y volverse sin más grande rojo que lo que había mostrado antes. Pelaje comenzó a cubrir lentamente el cuerpo de Sammy rompiendo la ropa que la cubría.

- Me siento genial - gruñó con una voz excitada y distorsionada por su transformación. rápidamente se colocó frente a Nelly y desgarró la tela que cubría ambos pechos   para luego poner su miembro en medio. La punta del falo golpeaba los labios de la mujer madura, la cual comenzó a lamer esta mientras sonrojada miraba la transformación de Sammy. Esta última comenzó a darse placer con los pechos.

Nelly comenzó a tocarse muy excitada. Sammy cada instante era más alta y musculosa. Igualmente su miembro se volvía más grueso y largo. Poco a poco una cola emergió al final de su espalda, la cual comenzó a agitar. Cada cambio enviaba una descarga de placer justo al cerebro de Sammy lo cual provocó que, junto con la cubana que estaba recibiendo, no aguantará más y soltara gruesos disparos de semen que mancharon la cara de la mayor, quien no tardó en sufrir su propio orgasmo.

Jadeando ambas se miraron. La lujuria corrompía sus mentes. Nelly le resultaba hipnótico todo el hedor del semen sobre su piel. Simplemente lavaba su mente, sometiéndola, haciéndola dependiente del viscoso líquido el cual comenzó a llevarlo a su boca con sus dedos para lamerlos luego. Entonces estaba lista. Lo necesitaba, necesitaba aquel monstruoso miembro en lo profundo de su ser.

- házmelo no resisto más. Hazme tuya.- gimió mientras abría sus piernas con sumisión.
-Grrr ya estaba impaciente por hacerlo.- gruñó excitada Sammy para entonces con su miembro aún duro comenzó a penetrar la vagina de la mayor lentamente. Aquel miembro avanzó cm a cm. Al acabar , la forma de este se ponía ver haciendo relieve en el abdomen de Nelly.
- Es demasiado grande... Lo amo. - aulló mientras su vagina se cerraba violentamente alrededor del falo.

Entonces comenzaron las embestidas. Sammy era ahora más alta, musculosa y peluda. Tenía gran fuerza y eso se notaba en cada embestida. Nelly enloquecía al sentir aquello. Abrazo la cara de la loba poniéndola contra su pecho mientras sus ojos se volvían amarillos. Una bestia lujuriosa en ella luchaba por salir y no tardó mucho en perder el sentido comenzando a jadear con una lengua inhumanamente larga. Cruzó las piernas apresando la cadera de su pareja mientras estas cambiaban de forma a las de unas patas con garras.

Sammy agarró su cadera más fuerte y los levantó del sofá embistiéndola en el aire sin dificultad. Su boca comenzó a lamer los pechos de Nelly, que, increiblemente, se hacían más grandes de lo que ya eran. Podía sentir las garras de la mayor creciendo contra su piel ya que está se había abrazado su espalda con fuerza. La lujuria de ambas se desbocaba.

Las embestidas se volvieron más rápidas. Nelly aulló mientras su orgasmo se detonaba con cada embestida. Sammy ya no resistía más. Su leche invadió el útero de la más madura. Ambas jadearon cansadas pero la luz de la luna que pasaba por la ventana les hizo recobrar la fuerza. Técnicamente sus energías se desbordaban.

Nelly lamió la cara de Sammy mientras su rostro tomaba la forma de lobo, entonces fue apoyada contra la pared y las embestidas regresaron haciéndole gemir de nuevo.

El apareamiento apasionado duró toda la noche. Por toda la casa habían charcos de semen y cosas rotas.

A la mañana siguiente Nelly despertó primero, los recuerdos la asaltaron y terminó más que sonrojada. Había sido el mejor sexo en toda su vida. Sammy recuperó la conciencia su cuerpo no era del todo humano todavía y su miembro tenía una erección matutina.

- Fue una noche loca...- dijo mirando el techo llamando la atención de la mayor.- creo que estoy enamorada de ti.
- No digas eso, no lo sabes... Lo de anoche fue solo sexo.- dijo apenada mientras notaba el falo erecto- parece que no tuvo suficiente anoche. Yo te ayudo con eso- dijo agarrándolo en sus manos para luego comenzar a lamerlo.
-Ah~~ creo que soy adicta a ti- dijo con placer para que luego sus miradas se cruzaron. En ese momento preciso ambas supieron que entre ellas habían surgido sentimientos. Eran la parte que le faltaba a la otra.

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Buenas. Aquí dejo el segundo capítulo. Al principio pensaba no esforzarme por darle mucho sentido pero quiero reeditarlo e intentar hacerlo más interesante. Acepto sus comentarios

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