7.2: Ya no soy Humana(Ruta mala de aquí en adelante)

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Sammy despertó antes que sus parejas. Estaba pensativa. Recordaba todo lo ocurrido hasta el momento. Simplemente ya no era la misma chica tímida sin ganas de vivir. Actualmente era fuerte, más segura de si misma, ya no estaba sola. Sonrió de lado y se levantó. Caminó por la casa sin rumbo aparente. Terminó viéndose desnuda en el gran espejo de la sala de estar. Su cuerpo era totalmente diferente. Ni siquiera podrían asociarse la Sammy de antes y la actual.

Sonrió satisfecha. Se volteó y entonces vio el paquete que había llegado el día anterior. Lo abrió para revisar el contenido. Revisó el grimorio en su interior. Y comenzó a leer con atención los pasajes que le interesaban. Su psique había cambiado también. Y aunque quedaba un poco de humanidad en ella su pensamiento y personalidad había sido corrompida por los instintos demoníacos de su maldición. Sonriendo malvadamente cerró el libro y lo guardó para más tarde, ahora podría aprender magia aparte de poder tener una mínima guía para sus nuevas capacidades.

Una idea llegó a su cabeza. Para terminar su transformación y que no quedará rastro de la vieja Sammy, era hora de un cambio de imagen, quizás un nuevo corte cabello y ropa nueva.

Desde ese día Sammy cambio su estilo, tenía otro corte de cabello, usaba ropa de cuero ceñido que hacía resaltar su cuerpo. Comenzó a asistir al gimnasio para mantener su figura y quizás ganar algo más de músculo. Además había comenzado un periodo de abstinencia sexual, todo para maximizar su intensidad la próxima vez que follara. Su semen se estaba concentrando en su interior, más espeso más fértil, más adictivo.

Por otro lado Nelly no había cambiado mucho era muy sumisa con su alfa y las consecuencias de lo que podría ocurrir a partir de ahora no le preocupaban. Había adoptado un estilo de vida más nudista, llegando a pasear por su casa sin ropa, o salir a las calle sin bragas ni sostén. Su libido se desbordaba por la falta de sexo, provocando que se comenzará a masturbar con regularidad cuando no la veían.

Amanda se había convertido en el sujeto de pruebas de juguetes sexuales. Casi como una mascota para Sammy, era abusada por parte de las otras dos. Su rutina diaria comenzaba las mañanas con un dildo en su vagina. De ahí, iba a trabajar después de que se le colocaban vibradores con forma de huevos en pezones y ano. Estos eran encendidos aleatoriamente durante el horario laboral. En los horarios de almuerzo y cena la comida era servida sobre su cuerpo desnudo de donde sus dos parejas se comían sin usar las manos. Antes de dormir probaban un nuevo juguete sexual cada día. Poco a poco se fue haciendo más adicta al sexo, más dependiente del placer.

Entonces llegó la siguiente luna llena las tres salieron al bosque a correr libres. Después de que la luna estuviera brillando comenzaba la primera caza.

- Hoy es una gran noche. Disfrutemos de esta nueva experiencia. - Dijo Sam, como ahora se hacía llamar para todos excepto Nelly que era la persona más especial para ella.- regresemos con más chicas a casa.
- Si mi alfa- dijo vistiendo el collar para perros que compró para ella y su pareja. Comenzó a retirarse la ropa mientras sentía la luz de luna que la bañaba. Comenzó a masajear sus enormes pechos haciendo que soltaran leche materna, ya habían descubierto su poder

Amanda gruñía con la lengua afuera con dildos llenando todos sus huecos . Le importaba muy poco su ropa, la cual comenzaba a romperse por su transformación. Entonces la milf atrapó su cabeza para darle de chupar de sus pechos. Otra polla cazaría esta noche.

Sam se pegó del otro pecho haciendo que su miembro casa vez más grande se duplicara. Nelly gimió por las fuerte succión de los labios de las otras dos, mientras los cambios afectaban a las tres. Pronto ya eran tres enorme lobas monstruosas con los ojos rojos totalmente fuera de sí.

Se lanzaron a correr por el bosque. Aullando a la luna. Se sentían más libres que nunca. De hecho Sam se sentía más cómoda así que en forma humana.

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