¡Bendito Whatsapp! (EDITANDO Primera parte)

Cap.64

Narra Willow

 

— ¿Qué estás haciendo en Londres, Ethan?—lo miré realmente sorprendido, no esperaba encontrármelo—Si mi memoria no me falla, la última vez dijiste que te irías a Glasgow, Escocia—fruncí el ceño y me crucé de brazos.

—Mira quién lo dice, ¿Tú no estabas en Tokyo?— dejó las cajas de pizza que le había entregado en una especie de mesita a un lado de la puerta. Y después me devolvió la mirada tratando de intimidarme.

—Una palabra Ethan, IN-TER-CAM-BIO—dije resaltando cada una de la silabas, sé que odia que haga eso— ¿Pero tú que estás haciendo por aquí? ¡Déjame adivinar! ¿Viniste sólo para asistir a una de esas convenciones súper exclusivas o algo asi?

—Eso no es de tu incumbencia Willow—desvió la mirada y eso me hizo sonreír de medio lado. Estiré mi mano y sujeté su mentón con mi dedo índice obligando a que me mirara, acercando mi rostro a escasos milímetros del suyo.

— ¿Qué no es de mi incumbencia Ethan?—soplé suavemente sobre sus labios provocándole un escalofrío— Créeme que esto me concierne más de lo que crees. Ya que nuestras hermanas te enviaron a Escocia con la esperanza de que te alejaras de todo el bullicio del imponente Londres.

—No creo que tengas el derecho a decirme algo. Después de todo tú te fuiste antes que yo—frunció aún más el ceño y con un movimiento de su mano se soltó de mi pequeño agarre.

—Oh, ya veo que es lo que pasa. Este molesto por que no te lleve conmigo cuando me fui de casa—dije con un poco de cinismo en mi tono de voz.

—Por favor, si entre más lejos pueda estar de ti es mejor para mí—bufó con diversión—Y en todo caso no fui yo quien le fallo a nuestro hermano menor, Willow.

—Asi que,  ¿Ahora me vas a culpar a mí de haber dejado solo a Arian? Sé que fui yo quien se fue primero, pero al final fuiste tú quien lo dejo completamente solo y a merced de nuestras cinco hermanas mayores—di un paso hacia atrás, tenía que irme ahora o mis jefes no estarían contentos por mi retraso—Pero bueno, si pensar de esa manera te hace sentir mejor, adelante.

— ¿Por qué estás trabajando si tenemos el dinero que nuestros padres nos dejaron?—parecía estar irritado y eso me satisfacía de sobremanera. Siempre fue una gran diversión molestar a Ethan.

—A diferencia de ti y nuestras hermanas no me gusta vivir del dinero que no me he ganado a base de mi esfuerzo—me acerqué a la moto y tomé el casco.

—Tú más que nadie sabes que estaba en su testamento, fue el deseo de nuestros padres que gastáramos el dinero que juntaron solo para nosotros.

—Ethan ¿Tú de verdad crees que querían que nos quedáramos en la calle después de haber gastado todo su dinero?—negué con la cabeza—Por cierto, siguen siendo 44 libras y no tenemos sistema de crédito.

—No eres tan importante como para tratar de darme un consejo—dijo y me extendió un billete de cincuenta libras—Guarda el cambio, aunque el servicio haya sido pésimo.