las cartas del destino

Un tira y jale............

             CAPÍTULO DIESINUEVE


Ya a pasa algunos días desde que mi luna despertó no me he acercado mucho porque no quiero que se incomode pero es tan difícil siempre la veo trotando alrededor de las cabañas pero hoy la vi dirigirse al coliseo que es donde entrenan los deltas.

Me dirijo a allí y cuando llego mis ojos no podían dar crédito lo que veían todos estaban entrenando pero más mirando a mi mujer  dejo salir mis feromonas de alfa mirando con cara de asesino serial para que entiendan que no la pueden mirar mucho menos desear

Salieron despavoridos, ellos  sabe que no puedes enfrentarme y más sabiendo lo que Amanda significa para mí.

Ella se asombra pero al dar la vuelta me queda mirando fijamente

Subo al rin de frente a ella y le hago señal para empezar el entrenamiento primero me mira desconcertada pero cuando entiende me lanza dos puñetazos en e l abdomen doy dos pasos atrás y veo que su entrenamiento no es tan básico como creía.

-veo que sabes defensa me impresionas

-se algo mi abuela me enseñó.-me dice tomando posición de combate.

-bien pero si te inclinas un poco más el golpe en la quijada es más certero sin tanto esfuerzo.- la guío en una técnica que me enseñó ron.

La realiza muy bien se ve que aprende rápido y es cuando me doy cuenta que si no me  muevo su golpe será  en mi cara la tomo de la muñecas y la giro quedando a espalda de mi pecho muy pegada a mi ella trata de sacarse y en el forcejeo caemos a la lona yo encima.

-eres muy buena aprendiz -le dijo muy cerca de sus labios

Ella cierra sus ojos como invitándome a besarla
Pero me contengo quiero que nuestro primer besos sea inolvidable  y que después no se valla  arrepentir me levanto y la ayudo hacer lo mismo.

-muchas gracias por el entrenamiento Mandy eres una excelente alumna.-me despido de ella para luego salir corriendo

Me contesta algo que la verdad no alcance a oír bien  creo que me dijo cretino en latín.

Estoy en la laguna sumergido hasta más no poder a ver si se me pasa este empalme tan verraco que tengo no sé porque no la beses y ya tengo migraña de tanto oír a Volka reclamar.

Me arrepiento sí, pero en mi defensa pensé que había cedido por el momento y después se   arrepentiría.

Carajo estoy jodido no sé cómo voy a llegar a ella si sigo pensando pendejadas tengo que intensificar mi conquista.

Y aquí estoy en la fogata perdido en ella mirando cada paso que da y lo peor es que ella lo sabe y se aprovecha de eso.

Lo sé me está coqueteando y yo no me voy hacer de rogar esta vez haré lo que me dicta el corazón y las ganas.

Mirarla allí cerca de la fogata con su amiga y las demás cachorras bailando al son de los tambores moviendo esa caderas con ese vestido uff me tiene caliente y lo sabe porque me mira cada vez que gira y su falda se eleva, está tomada y la desinhibe un poco .

La veo ir al bosque después que uno de los cachorros trato de coquetearle me levanto y la sigo no sin antes marcar territorio con este.

Llego al claro y no la veo estoy por llamarla cuando una ráfaga me golpea contra un árbol

-me buscabas alfa Cristopher.- Me dice muy cerca.

-que intentas hacer cachorra.-le digo sin moverme de donde estoy pues la tengo bien pegada a mi

-tu qué crees-dándole una lamida a mi boca para después morderme el labio inferior

-oh Mandy no hagas eso vas a despertar la bestia y después no respondo.-le digo tratando de contenerme pero siento que mi amiguito quiere salir a jugar

-y si la despierto que-me dice restregándose en mis partes y metiéndome mano  dentro de la camiseta tocando mi pecho.

La apretó más a mí y la giro recostándola contra el árbol la besó Oohhhh y que beso le hago una exploración completa a su boca cuando tengo suficiente de ella desciendo a su cuello donde lamo y succionó a mi pasó.

La tengo bien sujeta con sus manos levantada y sujetada como una mía con la otra desabotono su blusa y sigo descendiendo besos sus pechos encima del brasier  amaso sus nalga apretándola para que sienta como la tengo por ella.

Gime…y es el sonido más gloriosos que he escuchado la sigo apretando tratando de llegar al orillo de la falda volviendo a subir a su boca para seguir comiéndomela.

Oohhhh!!!Esto es el puto cielo o el infierno no lo sé pero es lo más maravilloso y es sólo el comienzo
Cuando subo su falda y estoy a punto de llegar a su entrepierna me empuja caigo me mira todavía con los ojos dilatados y me dice:

-para que sientas lo mismo que  sentí esta mañana.

Y sale corriendo acomodándose la blusa.