Parte 4

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Después haber resuelto el asunto del faro, los Gillman regresan a su casa en Oceanside. Solo que Ruby entra la casa molesta siendo recibidos por Arthur y Sam que estaban adentro de la casa.

—Hola, ¿qué paso ranita? —Saludando a Ruby.

—No me preguntes, nadie me dice nada —Contesto Ruby a su padre.

—Ruby se metió al océano.

—¡Hay no! —Botando su taza de café.

—Deben saber que lo hizo para salvar a Connor que se estaba ahogando en el océano —Explica Zafiro a su padre y hermano menor.

—Oh, tiene mas sentido.

—¿Y no se murió por eso?

—¿Qué? —Brill entra a la casa—. —¿Por qué iba a morirse?

—Hay no.

—¿Y ese viejo quién es?

—¿Y se chamaco quién es? —Hablan al mismo tiempo Sam y Brill.

—Ah, ese es nuestro hijo Sam.

—¡Hijo! —Brill agarra a Sam alzándolo para arriba emocionado—. —Ósea que soy tío de nuevo.

—Yo nunca he tenido un tío.

—Y yo nunca he tenido un sobrinito —Dándose cuenta lo que dijo—, claro, además de ti Zafiro. No te ofendas

—No te preocupes, por cierto Sam. Vas adorar al tío Brill para que sepas.

—¿Cómo es que...?

—Papá, año y medio cuando nos fuimos, así que los recuerdo.

—Por cierto —Brill le susurra al oído a Zafiro—. —¿Por qué nunca nos dijiste de Sam a mi o a tu abuela?

—Quería que fuera una sorpresa en caso que los dos salieran del océano —Le responde.

Agatha se pone cubrir las ventanas, mete la comida de Nessie que estaba afuera, apaga las luces y cierra la tienda de Arthur.

—Ruby, respira muy hondo —Agatha lo lleva a unas bancas en donde se sientan las dos—, te voy a explicar. Hija, cuando entraste al océano a salvar a Connor, eso detono... eso libero...

—¡Al kraken! —Apareció Brill interrumpiendo a Agatha para después hacer sonar un espantasuegras.

Arthur se lleva Brill para hacerlo un lado.

—Ah, Brill se refiere que te conviertes a una kraken gigante.

Ruby se pone a ver sus manos observando que su mano derecha seguía siendo grande.

—Se que esto es alumbrador —Agatha agarra sus manos, y entonces igual la mano de Agatha le brilla las ventosas de su mano—, pero no estás sola. Yo también me convierto en una.

—¿Qué? —Impactando a Ruby que se va para atrás—. —¡Que! ¿Sabías de esto? —Agarra una botella de vidrio de barco—, es lo que soy, el horrible estereotipo de los krakens que inventaron los humanos.

—Como odio esas historias estúpidas que inventaron los humanos deveras.

—Lo mismo digo, ya que eso me ofende.

—Pero vende.

Debido eso Brill uso el espantasuegras con Arthur.

—¿En serio, papá?

—¿Y qué otra cosa es verdad, mamá? ¿Ahora hundo los navíos? ¿Aterrizo los marinos?

—No —Agatha le quita la botella a Ruby—, no, no tesoro, nada de eso.

Krakens y Sirenas: Conoce a los Gillman, Conozcan a Zafiro GillmanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora