AMAR, CORRER O MORIR [Newt Y Tu]

Cap 5: Déjame salvarte

Quiero dedicar este capítulo a Lizzy_Lovegood1980 por ser mi primera lectora en comentar, votar y animarme en seguir publicando.

EL ÁREA: SEXTO MES.

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Extrañamente los roles se habían intercambio, durante el último mes Newt me había estado evotando desde aquel encuentro que tuvimos en la sala de mapas, de hecho ahora evitaba a casi la mayoría de habitantes. Pero eso se acabaría este día: hoy sería el día en que finalmente hablaría sobre lo que realmente sentía por Newt. Después de pasar días recapacitando sobre que sería correcto me había dado cuenta de que se nada servía ocultar lo que sentía. Y así, armándome con un coraje que no sabía que poseía, me dirigí hacia la Sala de Mapas donde seguramente estaría preparándose para salir a correr en el laberinto.

Pero cuando llegué a su entrada, algo se sintió extraño: inquietantemente silencioso en comparación con el bullicio habitual dentro de estas paredes hechas por varas de madera. Con vacilación arrastrándose en cada paso que daba, abrí la puerta solo para descubrir que Newt no estaba allí después de todo. En cambio, una pequeña nota estaba sobre un la mesa donde diariamente hacia los mapas de su área en el Laberinto.

"Durante semanas, he luchado contra mis propios temores, luchando contra la desesperación y el miedo que amenazaba con consumirme por completo. Pero realmente ya no puedo, me he cansado ya y no quiero seguir sufriendo. Para cuando encuentren esto será demasiado tarde, solo no se sientan culpables por mí."

Cada palabra se clavaba en mi pecho somo si de dagas se tratasen, abrumada por el dolor y la confusión, las lágrimas corrían por mis mejillas mientras presionaba aquella carta.

¿Cómo no lo había notado? ¿Cómo no había notado que se estaba hundiendo? ¿Cómo no había notado que se estaba perdiendo a si mismo?

Tantas preguntas inundaron mi mente, dejándome perdida y sin dirección. Y luego me golpeó: una determinación repentina que ardía en mis venas. No podía renunciar a Newt tan fácilmente; no cuando se había convertido en una parte tan integral de mi existencia.

Las palabras parecían hacer eco dentro de mi mente, sentía las miradas de los habitantes mientras corría por el Área y entraba en el Laberinto, la desesperación me impulsaba hacia adelante. Nunca antes había sentido tanta urgencia, como si el tiempo mismo se estuviera acabando. La idea de perder a Newt para siempre envió olas de pánico corriendo por mis venas.

Estaba sin aliento mientras corría por el Laberinto, mi corazón latía con fuerza en mi pecho. Mis ojos se movieron de izquierda a derecha, buscando cualquier señal de Newt. El aire estaba lleno de tensión y podía sentir la adrenalina corriendo por mis venas. Mi mente estaba enfocada en una cosa: salvar al chico que amaba. Cuanto más corría por los pasillos del Laberinto, imágenes de él pasaron ante mis ojos. Su sonrisa, su risa, la forma en que me miraba cuando nadie más estaba mirando. Seguía corriendo, cada vez más rápido, el sonido de mis pies golpeando el suelo dejaba un eco detrás de de mí, ya estaba en la zona que Newt exploraba, la había memorizado cuando iba a la sala de mapas con el pretexto de saber que pasaba dentro del Laberinto cuando en realidad lo hacía para poder ver al rubio de cerca.

Cuando doblé una curva, escuché el leve sonido de un sollozo. Mi corazón saltó de esperanza mientras me acercaba a la fuente del ruido. Allí, acurrucado en un rincón oscuro, estaba sentado Newt, con el rostro lleno de lágrimas y los hombros temblando de emoción. Corrí hacía él, cayendo de rodillas a su lado.

-Newt, está no es la solución- balbuceé, tomando sus manos entre las mías.

-Ya no puedo, ______, de verdad lo intente.