Hoy y siempre ~Gally y Tú (Libro II)~

~CAP. 7~

Estuvimos un rato en el laboratorio y cuando acabé fui a hablar con Ava sobre lo de las sangres. Teresa estaba muy cansada así que se fue directamente a dormir. Llegué a dónde Ava y entré. Me senté en el sillón que era realmente cómodo. Ella estaba sentada en su escritorio y cuando me vió se levantó y se acercó a mi.

-¿Que tienes para mí?- preguntó ella.

-Investigamos las sangres como nos pediste. La mayoría actúan de igual forma, infectandose completamente, pero hay una que es diferente. Primero parecía que se infectaba, pero después la mayor parte del virus desaparecía. Pasado un minuto el virus volvía a extenderse, pero esta vez completamente.-

-Bien, es increíble cómo estáis investigando. Nunca habíamos estado tan cerca de la cura y es todo gracias a ti. Me alegro de que tomases la decisión correcta.-

-Ava, ¿podría hacerte una pregunta?-

-Claro Lilibeth, dime.-

-El cuerpo de Gally, ¿lo habéis traído? Me gustaría poder verle y despedirme por última vez de él.- pequeñas lágrimas amenazaban con salir de mis ojos. Realmente aún tenía la esperanza de poder verle una última vez.

-No pudimos, lo siento mucho.- sus palabras me destrozaron. Me sentía muy mal y el vacío aumentaba más cada día. Sentía como si algo estuviera presionando mi pecho. Empecé a llorar inevitablemente. Ava no se movió de dónde estaba y lo agradecí. Estuve unos minutos llorando hasta que conseguí calmarme. Me levanté del sofá y me acerqué a la puerta.

-Estoy cansada, me iré a dormir.-

-Bien, buenas noches Lilibeth. Mañana puedes descansar, has hecho mucho hasta ahora.- salí por la puerta sin decir nada más. Tenía un nudo en la garganta que me impedía hablar. Me fui directamente a la habitación. Cuando llegué me tumbé en la cama. Me quedé dormida rápidamente.

Por la mañana me levanté y fui al baño. Me miré en el espejo y vi unas pequeñas lágrimas secas en mi cara. Me las limpié y me vestí. Sabía que no tenía que ir al laboratorio y eso me alegraba. Desayuné unas galletas y salí por la puerta. Decidí que daría una vuelta por las instalaciones, me apetecía estar sola pensando en mis cosas. Normalmente iba por el pasillo de la izquierda así que hoy iría por el de la derecha. Seguí caminando y al principio el pasillo era totalmente normal. Después de un rato siguiendo el pasillo este terminó en una extraña puerta. En ella ponía solo personal autorizado y se podía ver cómo había una cerradura en la que tenías que poner tu mano. Me entró muchísima curiosidad, así que puse mi mano en el escáner. Pensé que no se abriría, pero con mucha suerte si lo hizo. La puerta se abrió mientras un sonido se escuchó. Abrí completamente la puerta y detrás de esta el pasillo continuaba. Este pasillo era diferente a los demás. Tenía habitaciones iguales, pero las ventanas no estaban cerradas, lo que me dejaba una perfecta vista de cada habitación. Crucé la puerta y empecé a caminar por el pasillo. Miré hacia todas las habitaciones y las dos primeras estaban vacías, pero después había un crank en cada una de ellas. La imagen me daba ganas de vomitar. Intenté ir muy despacio para no hacer ruido, pero uno de los cranks me vió y empezó a darle golpes al cristal. Los demás parecían no escucharlo así que supuse que las salas estarían insonorizadas. Seguí caminando por el pasillo hasta que llegué al final. Pensé que eran todas las salas iguales, pero cuando me giré a la sala de la derecha me quedé atónita. No me lo podía creer. Rápidamente llevé mis manos a mis ojos y los froté con desesperación. Volví a mirar a la habitación y comprobé que lo que había visto era verdad. Estaba en shock. No sabía cómo reaccionar así que me acerqué lentamente hacia el cristal de la sala. Fue ahí cuando supe que era real. Era inconfundible. Estaba sentado en una esquina mirando hacia la pared. No le veía la cara ya que estaba de espaldas. Me acerqué rápidamente a la puerta y la desbloquee con mi mano. Hizo bastante ruido, pero el pareció ignorarlo. Me metí en la habitación muy lentamente, con miedo de que todo fuera un sueño. En caso de ser un sueño me gustaría no despertarme, porque ahí estaba él. El amor de mi vida. La persona a la que yo más quise. La persona a la que di por muerta después de haber caído en el suelo junto a mi. Me acerqué a él y pude escuchar pequeños sollozos. Él notó mi presencia y se giró hacia mi. Cuando me vió se quedó tan sorprendido como yo. No se movió ni hizo nada. Las lágrimas habían empezado a caer por mi cara, pero no eran lágrimas de tristeza, sino de felicidad. Él se levantó rápidamente y me envolvió entre sus brazos. Yo hice lo mismo y lo abracé lo más fuerte que pude, teniendo miedo de que pudiera irse de nuevo. Lloré mucho y el también. Cuando nos separamos agarré su cara entre mis manos y la acaricié cuidadosamente recorriendo cada facción suya. Había cambiado un poco, se le veía peor. Tenía unas grandes ojeras, a parte de eso, todo parecía completamente normal. Me acerqué a él con mucho cuidado y lentamente le besé. El rápidamente me correspondió. El beso era muy cuidadoso, pero estaba cargado de amor. Nos separamos por la falta de aire, pero nuestras frentes seguían apoyadas.

-Pensé que te había perdido.- dije mientras lloraba de nuevo. El vacío de mi pecho parecía haberse hecho más pequeño.

-Te prometí que siempre estaría contigo.- me dijo él mientras también lloraba.

-Te echaba tanto de menos Gally. Sentí como si mi corazón se destruyera cuando te ví caer al suelo.-

-Tranquila, estoy bien y eso es lo que importa.- volví a besarle.

-¿Has estado aquí todo este tiempo?-

-Si, ellos me rescataron para experimentar conmigo. Llevan todos estos días sacándome sangre y haciéndome pruebas mentales. He aguantado por ti, porque sabía que no permitirias verme caer.-

-Te quiero mucho Gally.-

-Yo también te quiero pequeña Lili.- dijo el para después besarme de nuevo.

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Espero que os guste este nuevo capítulo. Tenía muchas ganas de hacer por fin el reencuentro de Gally y Lili. Muchas gracias por votar y comentar.

Muchos besis🫶🏻