Ellie y la Llave del Misterio.

7

Latidos y Miradas:

Chicos, necesito contarles algo— dije con un tono entre nervioso y emocionada—

Melisa inclinó la cabeza, intrigada. —¿Qué pasa, Ellie? Pareces un poco fuera de lo común hoy.—

Inhalé profundamente antes de comenzar a narrarles la historia. Les conté sobre cómo había visto la misteriosa llave caer de las manos de Richard en el parque, y cómo había sentido la inexplicable necesidad de tomarla y esconderla.

Carlos arqueó una ceja, sorprendido. —¡Espera un momento! ¿Tomaste la llave de Richard?—

Asentí, sintiéndome aliviada por finalmente compartirlo. —Sí, lo hice. Sé que suena extraño, pero en ese momento no pude evitarlo.—

Sophie parecía asombrada. —Eso es arriesgado, Ellie. ¿Tienes idea de lo que esa llave significa para él?—

—Lo sé—, respondí con sinceridad. —No tengo ni idea de su significado exacto, pero definitivamente tiene un gran valor para él.–

Carlos soltó una risa nerviosa. —¡No puedo creerlo! Nuestra Ellie, la chica tranquila, robando la llave de un tipo misterioso. Esto parece sacado de una película.—

Mis amigos compartieron una risa, pero la tensión en el ambiente estaba presente. Sentía que había cruzado una línea, y aunque no sabía qué me depararía el futuro, sabía que tenía que lidiar con las consecuencias de mis acciones.

Sophie frunció el ceño, preocupada. —¿Qué planeas hacer ahora, Ellie? No puedes quedarte con la llave para siempre.—

Melisa asintió en acuerdo. —Tienes razón. De alguna manera, tendrás que devolverla o averiguar qué hacer con ella.—

Asentí, sintiendo la gravedad de la situación. Mis amigos siempre me habían apoyado, y sabía que podía contar con ellos mientras enfrentaba el enigma de la llave y las complicaciones que había traído consigo.

Mientras mis amigos escuchaban mi relato sobre la llave, el peso de mi decisión comenzó a hacerse más evidente. Estaba atrapada en una situación que no sabía cómo manejar, pero al mismo tiempo, sentía una curiosidad insaciable por descubrir la verdad detrás de ese misterioso objeto.

Sophie rompió el silencio con una sugerencia cautelosa.

—Ellie, si realmente quieres saber más sobre esa llave, tal vez deberías considerar ir a algún lugar donde puedan ayudarte a descifrar su significado. ¿Has pensado en visitar una tienda de antigüedades o incluso una cerrajería?—

Miré a Sophie con interés, asimilando su consejo. —No había considerado eso. ¿Crees que podrían tener información sobre la llave?—

Carlos asintió. —Podría ser una buena idea. Las tiendas de antigüedades a menudo tienen objetos con historias y significados detrás de ellos. Tal vez puedas obtener alguna pista sobre por qué Richard valora tanto esa llave.—

Melisa agregó:
—Y si no puedes encontrar respuestas en una tienda de antigüedades, tal vez una cerrajería podría ayudarte a identificar el tipo de cerradura que la llave podría abrir. Eso podría darte alguna idea de su utilidad.—

Sophie sonrió. —Además, sería una forma discreta de averiguar más sin involucrarte directamente con Richard.—

La idea de buscar respuestas en una tienda de antigüedades o cerrajería me pareció intrigante. Aunque tenía mis dudas sobre si encontraría algo relevante, también sentía que era un paso en la dirección correcta. Al menos, podría intentar entender por qué Richard estaba tan obsesionado con esa llave y qué papel podría tener en su vida.