October Diary | byler

Día 22🍂

El primero en despertarse fue Will, aún tenía los ojos cerrados, pero no quería moverse de donde estaba, se sentía calientito mientras abrazaba a esa cosa.

Sentía como cosa se movía, no sabia que era, no le importaba, el único pensamiento con sentido que podía formular era que sentía que se podía quedar ahí para siempre.

En un punto, Mike también despertó, medio abrió los ojos y casi grita cuando ve a el castaño acostado sobre su pecho mientras lo abrazaba.

Y no solo eso, que el mismo también tenia un brazo envolviéndolo.

Will respiraba tranquilo.

Sigue dormido. —pensaba el pelinegro—No nos pueden ver así...

Intento moverse un poco, pero sintió como su amigo se aferraba más a él.

Mike no sabía si preocuparse porque sus amigos se podían despertar en cualquier momento o porque le gustaba estar así con Will.

¿Y sí finjo demencia y me vuelvo a dormir? —se preguntó a si mismo, era la mejor opción, no quería despertar a Will y que todo fuera incómodo.

Y probablemente sus amigos ignoraran cualquier cosa que vean, asi que esto nadie lo mencionaría y todos fingirían demencia...

Si, Mike intento volverse a dormir.

En ése momento despertó la pelirroja, cosa que era raro, por lo general en la pijamadas era la última en abrir los ojos.

Se sentó y estiró los brazos. Se frotó los ojos intentando despertarse del todo.

Miro a su lado derecho.

Se volvió a frotar los ojos.

Enfocó bien su mirada en eso.

Se volvió a frotar los ojos, no estaba viendo bien, no era posible que lo que estuviera viendo fuera real.

Miro una tercera vez, sus ojos se abrieron como plato.

¿Y estos dos que?... —no sabía que pensar viendo esa posición en la que dormían Mike y Will, se veían tiernos, sí. ¿Pero porque carajos están durmiendo así?

Oh. Ya. Wow.

Rápidamente Max empezó a recordar todos los momentos de ésos dos que había visto, las miradas, abrazos...

Tal vez no le sorprendía del todo que estuvieran así. Pero... ¿Desde cuándo eran...?

Will abrió los ojos, automáticamente vio en la posición en que estaba, miro a Max, después a Mike.

Mike. Max. Mike. Max.

Se levantó abruptamente.

Mike seguía "durmiendo".

—Yo... —el castaño no sabía que decir, ni siquiera era como si tuviera que decir algo.

—¿Desde cuánd- —Max se calló, ¿Para que preguntar?, ni Will parecía entender lo que estaba pasando.

Segundos después Lucas también se levantó.

Parece que el tema quedaría hasta ahí.

...

El tema no quedo hasta ahí.

Will ya conocía muy bien a su amiga.

Intensa, habladora, si quiere saber algo, lo averiguara sea como sea.

No era de extrañarle que lo hubiera invitado a su casa y solo a él. Ya sabía lo que vendría, una bomba de preguntas que ni él se podría responder a sí mismo.

—¿Te gusta, no?

Directa. Al punto.

Bueno, Max ya era consciente de su gusto por los chicos, no sería extraño llegar a ésa conclusión después de haber visto eso.

—No se, Max. —y de verdad no sabia, estaba demasiado confundido, desde que conoce a Mike siempre se ha sentido igual por él.

El problema es que eso que siempre a sentido se siente diferente a lo que siente por sus otros amigos.

Y Mike era muy lindo.

Odiosamente lindo.

—Yo creo que sí sabes. —dijo con seguridad.

El castaño se quedo reflexionando unos segundos mientras miraba hacia la ventana.

—No quiero arruinar las cosas.

—¿Y se arruinarían las cosas por qué...? —le sonrió esperando que confirmara lo que ya sabía.

—Me gusta. —ya estaba, lo había dicho. Lo había aceptado.

Max soltó un gritito de emoción.

—¡Pero eso es genial Will!

—¿Un amor no correspondido?, Uff, claro.

La chica rodeó los ojos.

—¿Pero por qué piensas que es no correspondido?, ¿Se te olvida la forma en que durmieron?, Porque déjame recordarte que él también estaba abrazándote. —el castaño se sonrojó.

—Eso no significa nada.

—Ay Will... —suspiró la chica—Tu... ¿Tú no eres consciente de la forma en que te mira, verdad?, Ustedes- ustedes no son conscientes de la forma en que siempre que estamos juntos de una forma u otra terminan siempre ustedes dos atrapados en su burbuja. No notas éso, ¿Verdad?

El castaño no sabía que decir.

¿Si quiera a Mike le gustaban los chicos? —pensaba un poco triste.

Nunca ha tenido novia, y jamás lo ha oído hablar de alguna chica.

¿Pero eso significaba que Mike era gay?

—Es mejor dejar las cosas así, Max.

La chica quería objetar, pero al fin y cabo, era mejor no interferir. Mientras no fuera extremadamente necesario, dejaría que esos dos terminen juntos por su cuenta.

—Ya tú veras que haces... —terminó diciendo.