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Clientes y clientes llegaban con el regreso de El Angel de la noche, el club en un domingo era muy frecuentado, pero con el regreso de ese candente bailarín que hacía que todos los hombres tuvieran una erección en sus pantalones de tan solo escuchar su nombre.

— Que bueno que regresaste. — Hablo Chaewon muy entusiasmada.

— Lo se, ya extrañaba estar aquí, bueno me tengo que ir, tengo una sesión.

— Bueno, te dejo, suerte angelito.

Jungwon caminaba por los pasillos alternos, con unas bragas negras, un saco desabotonado que hacía que se le mirara todo.

Entro y se encontró con un hombre más mayor que el, muy robusto, con aura muy dominante, sin duda de esos hombres les gustaba, le daban una buena cantidad de dinero y tenía sexo.

— Hola cariño.

— Hola Angel, vaya, estaba en lista de espera desde hace ya hace una semana.

— Ya no tienes que esperar más.

Jungwon se puso encima de el y le empezó a bailar, tocando su trasero con la erección del hombre.

— Me gustas Ángelito, wow eres increíble.

A Jungwon le gustaba que halagaran su trabajo, eso lo hacía feliz, lo hacía sentiste al menos valorado por un hombre, más que un maestro inteligente y bueno con los niños.

De pronto el hombre movió un poco el saco dejando en vista los lindos pezones de Jungwon y los empezó a lamer, y Jungwon empezó a gemir.

Poco a poco el hombre subía hasta toparse con los labios de Jungwon, literal le empezo a comer la boca, topando su nariz con el antifaz y sintiendo el bigote del hombre.

No se preguntaron nada y se comenzaron a desnudar los dos hasta quedar solo en calzones, jungwon acariciando los hombros anchos y gordos del hombre; era un completo oso, sentía todo el vello de aquel hombre en su lindo abdomen.

— Tenemos que parar un momento, le debo decir a mi guardaespaldas que tendremos sexo.

— Bueno, te espero aquí cariño.

Jungwon sentía algo distinto que no podía explicar, no podía dejar de pensar en Jay y que ojalá estuviera el ahí, le dijo a Hércules que tardaría mas con el cliente, el sabía que significaba.

Se regresó y el hombre estaba sentado, viendolo.

— Vaya, por ti pagaría todo el dinero del mundo.

— No necesitas todo el dinero del mundo para estar conmigo.

Jungwon inicio el beso, y el hombre lo abrazó con sus enormes brazos su cuerpo delgado y desnudó, se comían la boca, el hombre empezó a quitarle las bragas a Jungwon, se los quitó y sólo acariciaba su trasero.

— Que lindo trasero tienes.

— Gracias Ja- corazon.

— Te pongo nervioso eh. — El hombre se quito los calzones dejando su ereccion dolorosa al aire.

Eran besos y caricias hasta que el hombre alineó su miembro en la entrada de Jungwon, que entró muy rápido y empezó a darle embestidas rápidas a Jungwon.

Al principio si le dolió un poco, pero Jungwon estaba disfrutando, ya necesitaba tener sexo, no era con el chico que esperaba pero no estaba mal.

De pronto sintió que ya estaba a punto de correrse, sintiendo como el hombre solo le lamía los pezones y lo embestía.

— Jay, jay jay. — Jungwon empezo a gemir inconscientemente.

— ¿Jay?, Bueno si me quieres decir así, está bien cariño.

Jungwon no sabía que responder así que procedió a besar al hombre para cortar la plática, gimió el nombre de Jay por qué no podía dejar de pensar en el esa noche.

Antes pensaba en todos los hombres que se acostaba en el mero acto, pero ahora Jay aparece en esos momentos y en todos.

Llego a su respectivo orgasmo, que fue placentero, pero no era como el que tenía con Jay.

— Fue muy bonito Ángelito, este es mi número de celular.

— Gracias corazón.

El hombre se acercó y besos a los labios a Jungwon como despedida, en cuanto salió , Jungwon quería que fuera Jay el siguiente, pero entro otro hombre.

— Hola, ¿Tu debes ser El Angel? ¿No?.

De repente Jungwon tuvo un deja vu y sonrió, sonrió al solo pensar en Jay. Sería una noche larga al recibir a tantos clientes.

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Hola hola, espero y les haya gustado este capítulo, que está lleno de sexo jsjs, los quiero mucho, gracias por leer <3

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