Doble Vida

Extra FINAL ~ "J & J"

— Pero si es Yang Jungwon, Jungwon, ese chico lindo de pintura que me gustaba en la secundaria y la prepa.

Jay había dejado a Jungwon en su casa después de su primer día de trabajo como maestro, tenía muchas emociones al volverlo a ver, y un poco de impotencia al saber que el le correspondía en esos tiempos.

— Mi corazón late fuerte, ¿Por que?. — Se preguntaba Jay al volver a ver a Jungwon.

Las personas que te marcan de una u otra manera suelen ser de por vida y no solo una etapa, y si desaparecen volverán a ti, por que el destino lo quiere.

— Hola, deseguro, ¿Tu eres El Ángel? — Pregunta algo nervioso Jay.

— Estas en lo correcto, y tu, ¿Quien eres guapo?

—Soy Jay, mi amigo y bueno ya mi compañero Riki, me trajo aquí para celebrar.

Y no importa que, el destino te pondrá en aquel lugar, en aquella situación, el destino te maneja a su antojo, el lo quiso así, cuando una persona está destinada para ti, tu vida dará un cambio rotundo y esa persona estará al frente de ti, en cualquier momento.

Y tal vez, tú no sepas realmente, si esa persona está ahí, tal vez está escondiéndose detrás de un antifaz.

Pero al final la verdad se descubre, por qué así el destino lo quiere, conoces a la persona auténtica y te das cuenta de lo mucho que necesitabas a esa persona.

Jay y Jungwon estaban destinados a estar juntos, el pasado no ayudó pero el presente y el futuro si.

Después de tres meses de citas, llegó el día en el que Jay se sentía listo emocionalmente para pedirle a Jungwon ser su novio, y fue un 31 de diciembre.

En la navidad, habían ido a comer con sus respectivas familias, pero en la tarde habían tenido su duelo de pasión navideña, y acordaron que en Año Nuevo estarían juntos y solos.

Eran vacaciones decembrinas, y toda esa semana Jay estaba concentrado en organizar todo, una linda y rica cena, su ropa y la decoración, y el regalo que era un collar de oro compartido con sus iniciales "J y J" esa noche solo sería de ellos dos.

Ya era el día y estaba todo listo, con velas, pétalos de rosas, linda decoración, una mesa con una manta blanca, copas, cubiertos y platos.

Jay ya estaba listo, solo esperaba a Jungwon, que de un momento a otro ya estaba en la puerta tocando el timbre.

Jay abrió la puerta, impresionado por la belleza que iba a tener de novio, claro si el aceptaba.

— Vas a solo mirarme, o, ¿Me dejarás pasar guapo?

— Ah, lo siento Jungwon, pasa.

— Gracias. — Jungwon vio la mesa y toda la decoración e hizo un suspiro de sorpresa.

— Lo hice para ti bebé. — Jay abrazo a Jungwon de espaldas. — Por que eres especial.

Jungwon se dio la media vuelta para chocar miradas con Jay, realmente estaba enamorado de Jay, no quería apresurar las cosas pero ya deseaba que fueran novios.

— Te amo mi amor.

— Yo también.

Unieron sus labios en un lindo beso, un beso largo, no saben cuanto duraron pero lo disfrutaron.

— Bueno, te comeré esa boquita después de haber comido real. — Jay susurro en lo labios de Jungwon, para después morderse los labios.

— Quiero ver que preparaste guapo.

— No lo verás hasta que te sientes, pasa angelito.

— Gracias bombón.

Cuando Jungwon paso, Jay le pego una nalgada, lo que hizo sonrojar a Jungwon, el beso lo calentó y sentía su erección palpitando en su pantalón, pero primero le pediría eso especial a Jungwon.