Extra V ~ "Primera Cita" part 2.

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Salieron del restaurante en dirección al departamento de Jay, a pasar una linda noche, es muy increíble como después de una charla algo triste sale a relucir el instinto carnal y lleno de sexo.

Al llegar al edificio, Jungwon estaba nervioso ya que si tenían sexo, sería la primera vez sin antifaz, le ocasionaba algo de vergüenza, muy pocas veces a tenido sexo sin antifaz, literalmente El Angel tenia sexo y no el como Jungwon.

Llegaron al departamento y Jungwon veía como Jay abría la puerta.

— Pasa. — Le propuso a Jungwon con una sonrisa.

— Gracias.

Jungwon paso y se impresionó de lo bonito que era el departamento de Jay, su decoración era muy linda, demasiado retro, quedaba con su personalidad.

— Está bonita mi decoración, ¿no?. — Preguntó Jay agarrándole la cintura a Jungwon y pegándolo a él. — Igual que tu bebé.

Jungwon se sonrojo, los apodos que le ponía Jay esa semana lo sonrojaban.

— Me sonrojas cariño.

— Me encanta que me digas asi Jungwon.

Después de esto Jay se acercó a los labios de Jungwon, sus labios eran tan exquisitos, se sentía afortunado de probarlos antes aun sabiendo que no eran sus labios.

— ¿Vamos a mi habitación?

— Vas directo al grano, eso me gusta. — Jungwon le susurró eso a Jay en el oído.

— Oh vaya vaya, que atrevido eres, El Angel resurgió en tu personalidad.

— Aveces suele regresar, pero bueno, cogeme por favor.

Retomaron el beso, ahora era ardiente, cuando llegaron a la habitación, Jay acostó a Jungwon, empezaron a quitarse prenda por prenda hasta quedar completamente desnudos.

— Te follare Jungwon, te follare como nunca.

— S-si, follame, nadie lo hace como tú.

Volvieron a besarse, esa sed de sexo que se tenían, una semana de no tocarse los tenían locos, definitivamente se necesitaban para sobrevivir.

Jay alineó a su miembro en la entrada de Jungwon, lo cual no tardo ni un segundo en metérsela, empezando con embestidas lentas.

— Ya extrañaba estar dentro de ti.

— Y tu que estés d-dentro de mi, cielos, estoy en la gloria Jay.

— Yo igual.

— E-e.

Jay no lo dejo terminar para empezar a besarlo y embestirlo fuerte, callando sus gemidos, las piernas de Jungwon temblaban del placer en los hombros fuertes de Jay.

Jay hizo un movimiento repentino, se sentó dejando así a Jungwon encima de él, montando su polla.

Jungwon saltaba en su miembro, mientras veía a Jay lamiendo su pezones y toda su piel.

— Por Dios bebé, en serio el Ángel eres tú, tu piel es exquisita.

— No me creía-as, hasta me desenmascaré.

— Todavía no lo asimilo.

E igual Jungwon, hizo un moviento rápido, empujó a Jay, dejándolo acostado.

— Montare tu linda polla bebé, yo tengo el control ahora. — Le susurró Jungwon a Jay en el oído.

Se empezaron a besar, Jungwon saltaba muy fuerte en el miembro de Jay y acariciaba su lindo pecho, empezó a lamer los pezones de Jay y solo miraba la expresión de placer que tenía.

— Sigue Jungwon, sigue, ya estoy a punto de correrme.

Al escuchar esto, Jungwon empezó a saltar más fuerte, y Jay empezó a gemir mas fuerte, era tan caliente sus gemidos para Jungwon que se sentía en el cielo, e igual el miembro de Jay tocaba su punto placentero.

Jungwon se corrió primero, fue un orgasmo múltiple, sintio placer en todo el cuerpo, se sentia tan débil pero a la vez relajado, solo tenía fuerzas para saltar un poco para que Jay se corriera y ver su expresión de placer consiguiendo el orgasmo lo hacía sentir bien.

Se separaron del agarre, Jungwon abrazo a Jay, y el solo le correspondió el abrazo, y acariciaba la cabeza de Jungwon en su pecho, asimilando todo lo que acababan de pasar.

— Es raro tener sexo sin antifaz. — Jungwon suspiro algo cansado.

— Es increíble tener sexo sin que tú tengas antifaz, y es increíble estar contigo por completo.

— Siempre me dejas con las piernas temblando cariño.

Jungwon y Jay hicieron contacto visual, había algo en esa mirada y era obviamente amor.

— Tu me dejas temblando el corazón Jungwon, la verdad, tú me gustas mucho.

— Y tu a mi Jay, desde hace 13 años.

Se dieron un lindo beso, empezando con este juego de citas, tuvieron muchas más, donde iban a cenar y en su mayoría iban a cualquiera de sus dos departamentos a tener sexo, pocas veces iban a ver una película o a platicar.

Y tener citas les encantaba, parecían dos adolescentes experimentando el amor, o tal vez, en su adolescencia no lo pudieron hacer.

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Holaaa, esta es la segunda parte de este extra, ya solo faltan dos extras para concluir ya por completo la historia, así que aquellas personas que han estado leyendo les quiero dar las graciassss<3

Los quiero mucho y espero y les haya gustado

Doble Vida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora