Deja vu

2.3K 223 52
                                    

Mason

Me quedo mirando a Emma tomar del café, el cual había pedido para ella minutos antes, suspiro sin quitar mi mirada de ella. Aún no sé cómo pude olvidarla por tanto tiempo, la pregunta a la cual sabía la respuesta moria por preguntársela.

—Entonces, ¿tienes una hija?—hago la pregunta de la nada viendo como la pregunta la toma por sorpresa.

—Sí, Mason, Tengo una hija—Responde ella llevándose la taza a los labios para tomar otro poco.

—¿Cómo se llama tu hija?—Pregunto sabiendo que puede que no me responda.

—Lía.

La veo agachar la cabeza por cosa de segundos, el nombre me llega rápidamente a la cabeza y puede que me molestara un poco.

—¿Con qué derecho le pones así a tu hija cuando habíamos dicho que ese nombre se lo pondríamos a nuestra hija?

—No hay ningún nuestra hija Mason, le puse Lia porque me gusta el nombre. Si no tienes nada más que decir me largo, ya que tengo muchas cosas que hacer.

La veo levantarse del lugar algo molesta, me levanto de mi puesto para impedir que se aleje.

—No tenías que ponerle ese nombre.

—Mason, ya basta, han pasado cinco años. Tú hiciste tu vida y yo hice la mía, tengo muy claro que habíamos elegido ese nombre, pero... Adiós Mason.

Antes de que se alejara pongo mi mano en su hombro, pero ella es más rápida y aleja mi mano de su hombro colocando ahora ella su mano en mi hombro alejándome un poco. Mi mirada se dirige hacia su mano donde un anillo reluciente capta mi atención dándome cuenta de que es el anillo que le di a Emma hace 5 años.

Emma se da cuenta de eso y aleja la mano para así seguir su camino alejándose, me quedó unos segundos procesando aquello antes de ir tras de ella.

Ella ya estaba en su carro, pero tiene la ventana abierta, así que pongo mis manos para que no la cierre, lo que hace a continuación me toma desprevenido.

Ella se quita el anillo dejándolo en mi mano, no me deja hablarle, ya que empezó a conducir alejándose en una velocidad.

Emma

Estoy fuera de la cada de camille tocándole la puerta sin parar, no tarda en abrir y se sorprende al verme en el estado en el que estoy.

Estaba más calmada que antes porque cami me había traído un poco de agua, le conté todo lo que había pasado.

¿Cómo te sientes al respecto Emma?—pregunta camille.

—Me siento muy confundida, han pasado 5 años y verlo, no lo sé...

—Hay que despejar esa mente Emma, sé que si nos quedamos en casa sobrepensaras mucho, así que salgamos para que te diviertas y tengas la mente en otra osa. Lía se puede quedar con Antoni.

Acepto la salida con mi amiga, ya que odre despejar la mente un poco de lo que acababa de pasa, voy a mi casa en donde me pongo un vestido y me maquillo para la noche. Le pedí a Antoni que llevara a Lía a su casa, que necesitaba salir y no la podía dejar sola, hable con mi hija por llamada mientras me acercaba hacia el lugar de destino.

—Bueno, mi niña, tienes que acostarte temprano que cuando despiertes yo estaré ahí contigo—le dije a mi hija antes de que ella cortara.

Al llegar al sitio me bajo del carro adentrándome hacia la fiesta en donde veo a camille en la barra con un martini en mano el cual no tarda en darme.

Lastimosamente sin tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora