The Kings

27

Aemond estaba en sus aposentos con su esposo después de acostar a sus hijos y a su sobrino, ahora miraba por la ventana esperando a ver algún indicio de su hermano

— Aemond— Aegon se acercó a su omega — volverá pronto— susurro mientras dejaba un suave beso en su cabeza

— Ya se ha demorado mucho— Aemond se quejó logrando que Aegon riera

— No se ha ido ni dos días ya debe estar por llegar—

— ¿Y si paso algo malo en bastión de tormentas? — Aemond casi chillo, Aegon giro a su pareja para que la mirara

— El está bien si algo hubiera pasado ya nos habrían enviado una carta— Aegon tomo a su esposo y lo recostó en su pecho, Aemond se dejó guiar con facilidad mientras suspiraba al sentir las feromonas relajantes de su pareja,

— Tienes razón— Aemond se separó para mirar a su esposo y lentamente se acercó para besarlo, pero en ese instante las puertas se abrieron dejando ver a una Alicent preocupada

— ¿Madre que paso? — Aemond se separó de Aegon y se acercó a su madre

— Tessarion acaba de aterrizar— declaró la reina madre

— Eso es excelente— Aemond sonrió mientras Aegon también sonreía, pero esa sonrisa se congelo al ver el rostro de su madre —¿madre? —

Alicent miro a su hijo con preocupación — Arrax llego con el—

Toda la habitación se quedó en silencio antes de que Aemond avanzara y saliera de la habitación casi corriendo

— !!Aemond¡¡ — Aegon rápidamente siguió a su esposo, al llegar afuera vieron a su hermano, pero su atención se enfocó en la figura que un guardia y su hermano cargaban

Aemond fue el primero en hablar —¿Lucerys? —

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Daeron vio a sus hermanos y suspiro, sabía que tenía mucho que explicar, pero eso sería más tarde ahora debía llevar a su sobrino adentro, los dos estaban empapados y Lucerys estaba muy pálido, además de inconsciente

— Hablemos adentro por favor— Daeron pidió, Aemond y Aegon no se veían felices, pero asintieron al entrar a la fortaleza roja rápidamente llamaron un maestre y llevaron a Lucerys a una habitación, mientras llegaba el maestre Aemond ordeno que los dejaran solos

— Explica— Aemond exigió cuando estuvieron solos Daeron suspiro mientras miraba a su hermano

— Lucerys fue a bastión de tormentas para buscar los mismo que yo una alianza con Lord borros, sin embargo este lo rechazo. Después de que lo rechazara Lucerys salió, yo también salí unos minutos más tardes pues quería venir a dar las buenas noticias. Cuando Tessarion y yo estuvimos en el aire antes de que pudiéramos alejarnos escuche un grito acompañado con un rugido, Arrax y Tessarion eran los únicos dragones cerca así que contra mi buen juicio le di la orden a Tessarion de girar, al acércanos pude ver a Arrax, se estaba moviendo erráticamente mientras chillaba, Lucerys trataba de calmarlo pero no funcionaba, de repente un rayo cayó muy cerca de ellos logrando que Arrax se asustara y girara bruscamente, Lucerys no se alcanzó a agarrarse y cayo, al verlo le ordene a Tessarion que lo siguiera— Daeron miraba a su sobrino inconsciente — logre atraparlo antes de que cayera al mar o alguna roca filosa pero cuando lo agarre alcanzo a darse un golpe y se desmayó, la atrapada no fue muy agradable prácticamente se golpeó con el lomo de Tessarion, no podía dejarlo ahí a pesar de todo es nuestro sobrino— Daeron miro a Aemond el cual suspiro

Aegon miraba a su sobrino y luego a sus hermanos

— Aemond— Daeron se acercó — sé que no sientes simpatía por los hijos de Rhaenyra y menos por Lucerys y lo entiendo, pero no merecía morir de esa manera— Daeron miro a su hermano con ojos suplicantes

Aemond suspiro otra vez y se acercó a su sobrino, lo miro por un momento antes de declarar

— Lo cuidaremos hasta que este lo suficientemente bien para volar, luego lo dejaremos ir— Aegon miro a su esposo con sorpresa, al ver el rostro de su esposo contesto — nuestra imagen no es la mejor en este momento si se entera de que secuestramos a nuestro sobrino seria problemático para nosotros Aemond se mordió el labio además ni voy a ser yo quien comience esta guerra como dijo Daeron es nuestro sobrino y a pesar de todo es nuestra sangre mi ojo jamás será restaurado pero ahora tenga cosas más importantes en que pensar que cobrar esa deuda, mi problema es Daemon y Rhaenyra, si Lucerys no representa un peligro cuando se despierte lo trataremos con cortesía—

En ese momento entro el maestre y Aemond decidido salir de la habitación, Daeron se quedó con su sobrino, pero Aegon fue tras su esposo el cual fue hacia hasta el patio de entrenamiento y Aegon lo encontró mirando una espada

— ¿Crees que fue un error? — la voz de Aemond era un susurro

Que Aegon miro a su esposo el cual giro para verlo

—¿Crees que debí tomar a Lucerys prisionero para hacer que Rhaenyra se rindiera? —

Aegon lo miro un momento sin decir nada antes de negar con la cabeza — eres un rey Aemond uno de los mejores en mi opinión, mostrar que eres compasivo con el hijo de nuestra enemiga solo hará que la gente vea que eres mejor que ella a la hora de reinar— Aegon se acercó lentamente — la guerra todavía no estalla, pero lo hará en algún momento y nos conviene que no seamos nosotros quien la inicie, pero...— Aegon dudo

— ¿Pero? —

— Esa no es la única razón ¿verdad?— Aegon rodea con sus brazos a Aemond

El omega suspiro mientras apoyaba la cabeza en el hombro de su esposo —una vez hable con Helaena— la voz de Aemond sonaba lejana como si estuviera recordando —fue después de lo que le paso a Jaerion, quería saber, necesitaba saber sobre si estaba tomando las decisiones correctas— Aemond levanto la cabeza para ver a su esposo a los ojos —ella no quiso responderme directamente, pero si me dijo que esto era inevitable, que de una manera u otra terminaríamos así, pero también me dijo que debía tener cuidado—

—¿Cuidado? — Aegon pregunto con suavidad

—Helaena me dijo que cada decisión que tomamos cambia nuestro futuro, nada está escrito, me dijo que ella me había visto en sus sueños— la voz de Aemond sonaba áspera —me dijo que me vio asesinando a Lucerys— la respiración de Aegon se cortó —me dijo que me vio convertirme en un mata parientes—

—Aemond...— Aegon acaricio a su omega

—Al final de esto todos tendremos pecados que cargar esposo mío, pero el saber que yo podría iniciar la matanza de nuestra propia familia, que pondría en riesgo a nuestra familia, a nuestros hijos simplemente me estremeció, ni Lucerys, ni Jacaerys son mis personas favoritas, pero son solo adolecentes, adolecentes involucrados en una guerra por los errores de los adultos, cuando supe en lo podía convertirme me dije a mi mismo que lo cambiaria, es por eso que Lucerys debe volver con Rhaenyra, no solo por los bien que le hará a nuestra imagen y gobierno sino porque al final no estoy dispuesto a iniciar con la matanza de parientes Aegon— el alfa suspiro mientras abrazaba con fuerza a su omega

Los dos se quedaron un momento así dándose consuelo hasta que Aemond se separo

— Vamos esposo, hay que ir a descansar mañana hablaremos con el maestre— Aegon asintió y siguió

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¿Qué les pareció?

perdón si hay errores

¿Qué creen que pase de ahora en adelante?