The Kings

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Al día siguiente Aemond y Aegon despertaron temprano gracias a sus hijos, Alicent fue a visitarlos tan pronto le informaron que los príncipes se habían despertado, al conocer a sus nietos Alicent solo pudo sonreír, eran hermosos, los dos tenían los rasgos valyrios, el cabello y blanco y ojos lilas, Alicent quedó perdidamente enamorada de sus dos nietos

Otto solo miro a sus bisnietos con una sonrisa orgullosa, la cual dedicó a Aemond y Aegon

—Perfecto, no pudieron hacerlo mejor, no solo tuvieron dos herederos con apariencia Targaryen, si no que tuvieron varones esto solo solidifica nuestras posiciones— Otto tenía una gran sonrisa mientras ignoraba las miradas de sus dos nietos, después de un momento salió de la habitación para informar a su gente que el príncipe Aegon y su esposo habían tenido dos saludables herederos varones

Alicent le dio un beso a cada uno en la frente como disculpa por la actitud de Otto y se fue para dejarlos tranquilos, ni Aemond, ni Aegon tenían ganas de salir, por lo cual Alicent les aseguro que se encargaría de todo

En otra parte del castillo Rhaenyra y su familia habían decidido romper su ayuno juntos en las habitaciones de la princesa para así no formar más tensión, todos estaban callados y en el aire se podía respirar un aire legumbre, el qué, pero estaba era Jacaerys, el joven Alfa no había podido dormir por el miedo, el jamás quiso dañar a su tío, pero sus insinuaciones lo habían enfurecido, solo se dio cuenta del error que había cometido cuando vio a su tío en el suelo y con una mano en su vientre

Ahora sabía que su vida pendía de un hilo, había rezado toda la noche a todos los dioses que conocía porque su tío y su hijo estuvieran bien, de lo contrario Jace estaba seguro que Aegon colocaría su cabeza en una estaca lo antes posible

Rhaenyra miraba a su primogénito con dolor, la vida de su hijo ahora corría peligro y todo porque no supo cómo controlarse, ella no era estúpida sabía que Aemond se había estado burlando a propósito de sus hijos, sabía que solo los estaba provocando 0ara que explotarán lo cual logro sin duda, solo que ahora la situación se había salido de las manos, ella nunca pensó que Jace atacaría físicamente a su hermano después de todo Aemond era un Omega, el único Omega de la familia en generaciones, cuando vio el cuerpo de Aemond en el piso después de que su hijo lo atacará Rhaenyra quedó paralizada pero lo que la aterro fue ver la sangre manchar los pantalones de su hermano, ella no sabía que estaba embarazado nadie nunca le informo, ahora ella solo podía rogar piedad para su hijo para que al final todo estuviera bien

La familia siguió desayunando sin muchas ganas hasta que escucharon unas voces afuera de su habitación, segundos antes de que la puerta fuera abierta y por ella entrará la reina Alicent con su vestido esmeralda y sus joyas

Alicent entro y le dio un asentamiento a Rhaenyra en reconocimiento, la princesa le devolvió el gesto, pero todos sentía como la tensión en la habitación aumentaba, Alicent no tenía ninguna expresión en su rostro mientras pasaba su mirada por todos los presentes, cuando llegó a Jacaerys entrecerró los ojos y frunció el ceño lo que hizo que Jace se pusiera más nervioso

Todo se quedó en silencio hasta que Alicent decidió abrir la boca

— Buenos días, no quiero entrometerme en su desayuno así que seré directa— todos los presentes aguantaron la respiración— es un placer informar que mi hijo en príncipe Aemond se encuentra bien— todos en la habitación dejaron escapar un suspiro de alivio, menos Daemon— y sus hijos también están bien, así que espero que los sucesos de anoche se quede como un mal recuerdo y que nunca se vuelvan a repetir— esto lo dijo mirando directamente a Jace el cual asintió— de parte de mi hijo Aemond me pidió que en compensación por lo que pasó el príncipe Jacaerys no se le acerque bajo ninguna circunstancia— Alicent volvió sus ojos hacia Rhaenyra