Capitulo 24

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Industrias Oscorp

Un hombre junto a su hijo adolescente y un grupo de ingenieros de robotica se encuentran en el laboratorio, donde están trabajando en la creación de los centinelas, máquinas diseñadas para hacer frente a los mutantes. La importancia de este proyecto es evidente y está claro que se necesita que sea un éxito. En medio de la actividad, el jefe de Oscorp, Norman Osborn, entra al salón para supervisar el progreso.

Norman: ¿Cómo van los centinelas, Spencer?

Spencer: Todo va según lo planeado señor, los centinelas están progresando de manera excelente

Spencer: Todo va según lo planeado señor, los centinelas están progresando de manera excelente

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Spencer Smythe, un experto en robótica y arácnidos, se encarga de liderar el proyecto. A pesar de anteriormente fue despedido por un incidente con las arañas radioactivas, su conocimiento en el área de la robótica resultaba vital para crear los centinelas, y esto fue lo que llevó a Norman a darle otra oportunidad en Oscorp.

Alistair: Asi es señor Osborn, gracias por la información brindada por Stryker, nos facilita en que el centinela conozca bien a su adversario y se vuelvan más efectivos en la tarea

Alistair: Asi es señor Osborn, gracias por la información brindada por Stryker, nos facilita en que el centinela conozca bien a su adversario y se vuelvan más efectivos en la tarea

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Alistair Smythe, un joven de 19 años, comparte el mismo ingenio que su padre, Spencer. Apasionado por la robótica y actualmente estudiante de la Universidad Empire State, Alistair considera un honor trabajar codo a codo con su padre en Oscorp. Esta colaboración no solo enriquece su experiencia académica, sino que también promete un impulso a su futura carrera en el campo de la tecnología.

Norman: Perfecto (se acerca a Spencer) Si estos centinelas resultan exitosos y no me decepcionas como lo hiciste la vez pasada con las arañas radioactivas, podría considerar que te quedes permanentemente en Oscorp (mira a Alistair) y tu hijo se vea beneficiado con una beca para su educación y un puesto asegurado en la compañia, veo que tiene potencial

Spencer: ¡Así es! Mi hijo ha heredado mi amor por la robótica y posee una mente prodigiosa, digna de ser cultivada. Está estudiando en la Universidad Empire State, y esta oportunidad que nos brindas no solo impulsará su carrera, sino que también contribuirá a su crecimiento académico. Te aseguro que no te defraudaremos esta vez. ¡Gracias por esta segunda oportunidad, señor Osborn!

Una araña... dos corazonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora